Francia ha perdido mucho prestigio en Rusia, por lo que en 1812 sus relaciones se han deteriorado tanto, que NAPOLEÓN, sin previa declaración de guerra a Rusia, decide su invasión. Toda Europa sabe que NAPOLEÓN ha organizando un ejército de 450.000 soldados para atacar Rusia. En mayo de 1812, NAPOLEÓN se halla con la Grand Armée ante el Vístula.

Francia tiene necesidad de efectivos para atacar a Rusia lo que le obliga a reducir efectivos en otros frentes, sobre todo en el de España, de donde se retiran más de 60.000 hombres, dejando poco más de 200.000 repartidos por el amplio y complejo espacio peninsular.

El 27 de mayo de 1812, siguiendo órdenes de NAPOLEÓN antes de partir para la campaña de Rusia, se procede al traslado del Papa PÍO VII de Savona a Fontainebleau. La travesía de los Alpes casi le costará la vida, llegándosele a administrar la extremaunción y el viático.

WELLESLEY siente a NAPOLEÓN lo suficientemente lejos como para iniciar en España la carnpaña que presiente decisiva. El 13 de junio de 1812 se pone en marcha y cruza el río Águeda con más de 45.000 infantes y 5.000 jinetes.

PíO VII llega prisionero a Fontainebleau donde pasará el resto de su cautividad durante 19 meses, en el palacio renacentista de Francisco I.

El 24 de junio de 1812, día de San Juan, NAPOLEÓN, rodeado de los soldados de su Guardia, y al frente de tres cuerpos, del ejército, aguarda en los terrenos llanos de la carretera de Vilna, junto a la orilla izquierda del Niemen. Es la frontera rusa y el corso se dispone a cruzarla obsesionado por la idea de vengarse de las deslealtades de ALEJANDRO I Pavlovich. Lo que ocurrirá a continuación es exactamente lo mismo que cuando invadió Rusia Carlos XII de Suecia un siglo antes. Resulta imposible creer que Napoleón no hubiera estudiado las campañas de Carlos, pero en todo caso no parece que aprendiera algo de ellas. Lo que le impulsa en este momento es, sencillamente, que no puede concebir la derrota. Los ingenieros tienden puentes sobre el Niemen, y la «Grande Armée» comienza a penetrar en la inmensa Rusia. Son 450.000 hombres. Ante los franceses no aparece enemigo alguno. Pero no cuenta NAPOLEÓN con la astucia de los comandantes rusos que se niegan a dar a los franceses la satisfacción de librar una batalla campal. En su lugar, conducen a los invasores al interior de sus vastos territorios.

PÍO VII llega más lejos en sus concesiones que ahora quedan reflejadas en el denominado Concordato de Fontainebleau (repudiado por el Papa dos años después).

Se firma la Alianza de Ùrebro (Suecia) que une a Gran Bretaña, Suecia y Rusia, contra Napoleón.

En Arapiles, apenas a 7 km. al sur de Salamanca, los 44.000 soldados del mariscal Marmont son batidos, en la fecha, en menos de 45 minutos. Entre los vencedores se encuentran el general Carlos de España y los guerrilleros de julián Sánchez. Wellesley considerará que la Batalla de Arapiles ha sido una de sus tres mejores victorias, siendo las otras dos las de Vitoria y Waterloo. Pese a su brevedad, la lucha es tan intensa que entre ambos bandos se producen unas diez mil bajas, repartidas casi por igual. La importancia de la victoria residirá en las pérdidas materiales francesas, sobre todo artillería y municiones y, fundamentalmente, en las consecuencias estratégicas y morales.

NAPOLEÓN avanza, y los rusos se retiran arrasándolo todo, como ya hicieran en la ocasión anterior. Los franceses toman Moguiliov el 23 de julio.