ALEMANIA NAZI -III Reich- (1933-1945)

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Los soviéticos rebasan finalmente el anillo defensivo basado en el Metro de Berlín y sólo las zonas céntricas del mismo quedan en poder de los alemanes,


El día 27 de abril los soviéticos rebasan finalmente el anillo defensivo basado en el Metro de Berlín y sólo las zonas céntricas del mismo quedan en poder de los alemanes, cuyas tropas se ven cada día en una situación más crítica, sin opciones de refuerzos externos, y con una creciente escasez de armas, municiones y suministros médicos.

HITLER es consciente de que los días del Tercer Reich, y con él su propia persona, han llegado a su fin.


De la estructura jerárquica del Tercer Reich, tan sólo acompañan a Hitler en el búnker el ministro de Propaganda Joseph Goebbels, el jefe de la Cancillería Martin Bormann, el jefe del Estado Mayor del Ejército Hans Krebs y algunos oficiales de enlace. La disciplina se ha relajado, y se fuma y bebe incluso en presencia de Hitler. Éste muestra por primera vez en su vida signos de dejadez. Aunque sigue moviendo tropas imaginarias y haciendo planes para después de la guerra, es consciente de que los días del Tercer Reich, y con él su propia persona, han llegado a su fin. Las defecciones de Góring (que ha mandado un teletipo diciendo que, de no recibir noticias en contra, asumirá el mando) y de Himmler (que intenta negociar con los aliados por medio del diplomático sueco Folke Bernadotte) no hacen sino confirmarlo. Hasta los más allegados están abandonando el barco. Sólo las zonas céntricas de Berlín quedan en poder de los alemanes, cuyas tropas se ven cada día en una situación más crítica, sin opciones de refuerzos externos, y con una creciente escasez de armas, municiones y suministros médicos.

HITLER designa como sucesor al frente del Estado y de la Wehrmacht al almirante Dónitz. Después contrae matrimonio con Eva Braun, su amante.


HITLER ha decidido suicidarse, y la mejor forma de hacerlo se convierte en el primer tema de conversación de aquellos últimos días. La noticia de la muerte de Mussolini no hace sino precipitar su decisión. Pero antes debe resolver sus asuntos personales. Así, hace redactar un testamento privado y otro público. En éste sigue acusando a los judíos de todo mal, designa como sucesor al frente del Estado y de la Wehrmacht al almirante Dónitz, nombra a Goebbels canciller y a Bormann jefe del partido. Después contrae matrimonio con Eva Braun, la que hasta entonces ha sido su amante. La División Nordland se encarga de la defensa final de la Cancillería del Reich.

El Ejército Rojo localiza los restos calcinados de varias personas entre ellas los de HITLER y Eva Braun.


Cuando llegan las tropas del Ejército Rojo a las puertas del bunker de la cancillería localizan los restos calcinados (?) de varias personas. Informados sobre la tragedia, inmediatamente se hacen los estudios de las dentaduras y se concluye que dos de los cadáveres son los de HITLER y Eva Braun, los otros parece ser que corresponden a Goebbels, a su esposa, etc. Los restos de estos personajes serán llevados en peregrinación durante meses por Alemania (Buch, Rathenow), para evitar que sean recogidos por seguidores nazi y que se le hagan homenajes e idolatrías. Finalmente se decidirá enterrarlos en febrero de 1946 en Magdeburgo, si bien serán exhumados hasta dos veces más por orden de Stalin para asegurarse que son los restos de HITLER. Más adelante, parece ser que dichos restos serán de nuevo incinerados y vertidos al Elba. Cosa aparte es decir si HITLER ha sobrevivido o si el muerto es uno de sus múltiples dobles. De hecho, hay quien llegará a decir que HITLER sobrevive y que vive en Sudamérica.

HITLER se suicida junto a su esposa Eva Braun.


Sobre las 14 h del día 30, y mientras ya se combate en los aledaños del Reichstag, HITLER come a solas con sus secretarias y cocineros. Nombra sucesor a Dónitz. Luego, tras despedirse de sus más íntimos colaboradores, se encierra con su esposa en su habitación. A las 15.30 se oye una detonación y, tras un breve silencio, ambos cuerpos son hallados sin vida. Él se ha disparado, y posiblemente ha ingerido una cápsula de ácido prúsico al mismo tiempo; para ella ha bastado con el veneno. HITLER ha dejado escrito: “Muero con el corazón feliz, consciente del valor y los éxitos de nuestros soldados en el frente, de nuestras mujeres en la patria, de los logros de nuestros granjeros y trabajadores, y del cometido, único en el mundo, de la juventud que lleva mi nombre…”. Ambos cadáveres serán trasladados al exterior del recinto e incinerados, siguiendo sus previas instrucciones. Afuera la lucha sigue, y mientras el general Krebs intenta una rendición honorable ante su homólogo soviético Vasili Chuikov, Weidling llega al convencimiento de que el combate debe cesar.

Toma de Berlín por los rusos. Dónitz constituye un nuevo gobierno en Alemania.


Dónitz, sucesor de HITLER, constituye un gobierno en el que no sólo no incluye a ningún nacionalsocialista notorio, sino que algunos, como Himmler, son destituidos. Espera que ello le permita un más fácil trato con los aliados. Dónitz emite el siguiente comunicado: “Espero disciplina y obediencia. El caos y la ruina sólo pueden evitarse con la inmediata e incondicional ejecución de mis órdenes. Cualquiera que en estas circunstancias no cumpla con su deber y condene a las mujeres y a los niños a la esclavitud y a la muerte, será un traidor y un cobarde. El juramento de lealtad que hicisteis al Führer, ahora os obliga a mí. Que he sido nombrado por él su sucesor”. Sobre las 9 de la mañana, y tras haber envenenado a sus seis hijos, el matrimonio Goebbels acaba también con su vida. El 1 de mayo, es la fecha oficial de la toma de Berlín por los rusos. El fotógrafo Evgeni Jaldei -un judío de Donetsk- inmortalizó la toma de Berlín con la célebre instantánea en la que se ve a un soviético -Aleksei Kovoliov- sosteniendo y enarbolando una bandera y a otro con gorra de plato -Abduljakim Ismailov- aguantando a Kovoliov para que no pierda el equilibrio.

Joseph Goebbels y su esposa Marian, asesinan con veneno a sus seis hijos, y ambos se suicidan disparándose en la cabeza.


En la mañana del 1 de mayo, en el Führerbunker, Joseph Goebbels -ministro de propaganda del Reich- y su esposa -Marian-  asesinan con veneno a sus seis hijos, y en la tarde de ese mismo día ambos se suicidan disparándose en la cabeza. También esa tarde se suicidan en el Führerbunker los generales Wilhelm Burgdorf y Hans Krebs. En medio de la noche, los soldados y oficiales que aún han sobrevivido a la batalla en el cerco de Berlín huyen de la zona del Führerbunker para escapar en grupos con la intención de llegar a los territorios bajo control norteamericano. El general Weidling no participa de la huida al considerarla muy arriesgada, pero acepta que lo hagan sus subordinados mientrar intenta buscar un acuerdo para rendirse al Ejército Rojo en tanto ahora él es la máxima autoridad de Berlín tras el suicidio de Goebbels.

El general Weidling envía un mensaje al general soviético Vasili Chuikov, jefe del Segundo Frente Bielorruso para solicitar la rendición incondicional.


Finalmente, a las 01.00 horas del 2 de mayo el general Weidling con su estado mayor envía un mensaje al general soviético Vasili Chuikov, jefe del Segundo Frente Bielorruso para solicitar la rendición incondicional. Chuikov se entera entonces de la muerte de Krebs y acepta a Weidling como jefe máximo de la guarnición berlinesa. Para el amanecer de ese día las tropas soviéticas lanzan un asalto final hacia la Cancillería del Reich, pero hallan muy poca resistencia en tanto la mayor parte de los defensores se habían unido al fallido intento de “ruptura” lanzado por el general Wilhelm Mohnke. Weidling rinde Berlín de manera incondicional el 2 de mayo a las 8.45 horas y requiere por radio a los defensores alemanes que cesen la lucha de inmediato, con lo cual termina la batalla. Para esas horas los focos de resistencia alemana en la ciudad eran ya muy reducidos y la mayor parte de las ruinas de Berlín estaban bajo control soviético. Ante la orden de Weidling, algunos nazis fanáticos optan por suicidarse en la mañana del 2 de mayo.

El general alemán Wilhelm Keitel firma la capitulación de Alemania ante el mariscal Zhúkov.


Un grupo de oficiales se fuga de Berlín liderados por el general Wilhelm Mohnke; a este grupo se unen Martin Bormann, el médico jefe de las SS Ludwig Stumpfegger, y el jefe máximo de las Hitlerjugend, Arthur Axmann. Al grupo de fugitivos militares se unen varios civiles hasta sumar algunos millares de individuos, pero el intento fracasa en la madrugada del 2 de mayo. Aunque un grupo numeroso de soldados y civiles llega a Spandau, otros fugitivos ni siquiera logran cruzar los puentes sobre el Spree para huir del área metropolitana de Berlín y son sorprendidos por los soviéticos, que les cortan la retirada. En este intento perecen varios cientos de alemanes, entre soldados y civiles. Mueren también Bormann y Stumpfegger, cuyos cadáveres reconoce Arthur Axmann días después. La gran mayoría de los fugitivos son muertos o apresados por los soviéticos y sólo unos pocos cientos logran huir lo bastante lejos hasta rendirse a los estadounidenses.

En Italia, los elércitos alemanes son destruidos y se rinden incondicionalmente.


En Italia, los ejércitos alemanes son destruidos y, en la fecha, se rinden incondicionalmente en las afueras de Verona. La guerra en Italia ha terminado. Algunas fuerzas americanas se dirigen hacia el norte para enlazar con sus camaradas que avanzan hacia el sur desde Austria, encontrándose en el paso de Brénnero en los últimos días de la guerra.