La misma pistola usada para asesinar a Massimo D’Antona en 1999, es usada también para el de Marco Biagi, otro consejero económico, en este caso del gobierno derechista de Silvio Berlusconi, y figura clave en las actuales políticas de mercado de trabajo italianas. Las Brigadas asumen la responsabilidad.

Una avioneta se estrella contra el edificio Pirelli, el más alto de Milán; mueren tres personas y sesenta resultan heridas. El incidente, que recuerda el de las Torres Gemelas (11/9/2001), es atribuido a causas desconocidas, pero fortuitas.

Dos activistas de las Brigadas Rojas, Mario Galesi y Nadia Desdemona Lioce, inician un tiroteo con la policía en un tren estacionado en la estación de Terontola. Galesi y Emanuele Petri (uno de los policías) mueren. Lioce es detenida.

El príncipe heredero de Italia, que en 1946 abandonó Italia junto con toda su familia, Víctor Manuel, no ha podido regresar a Italia hasta el 2003, meses después de que el Parlamento decidiera levantar la prohibición de que los varones de la familia Saboya pisaran suelo italiano.

Toda Italia, salvo la isla de Cerdeña, se queda sis suministro eléctrico al menos durante ocho horas debido a un incidente ni aclarado en las líneas de alta tensión que transporta la energía desde Francia y Suiza.

Los Carabinieri arrestan a seis miembros de las Brigadas en redadas simultáneas en Florencia, Cerdeña, Roma y Pisa, estando esta operación relacionada con el asesinato de Massimo D’Antona.

Cinco países integrantes de la Unión Europea han aprobado la constitución de una fuerza de gendarmería europea. La fuerza, integrada por 900 efectivos, puede participar en operaciones de pacificación. Así lo han convenido los ministros de Defensa de Francia, España, Portugal, Italia y Holanda durante un encuentro celebrado en la localidad holandesa de Noordwijk. La gendarmería europea, una iniciativa de Francia, entrará en funciones en el curso del próximo año, y tendrá su base en la italiana Vicenza. Posiblemente, en un futuro otros países aporten efectivos.

En Italia, el Parlamento aprueba una ley antiterrorista, en 2005, según la cual es delito esconder el rostro en público.

El Senado italiano ratifica en medio de una monumental bronca el proyecto de ley de reforma constitucional, de corte federalista, que otorga más competencias a las regiones y da mayor poder al primer ministro. El texto, ha sido aprobado por la Cámara de Diputados el pasado octubre, y debe pasar aún dos nuevas lecturas en Cámara y Senado para ser definitivo. El centroizquierda, indignado, quiere reunir el medio millón de firmas necesario para convocar un referéndum que anule o confirme el texto. La reforma diseñada por el centroderecha supone sustanciales cambios respecto a la Constitución italiana de 1948, y la oposición considera que el primer ministro, Silvio Berlusconi, ha cedido a \”un chantaje de la Liga Norte\”. La formación liderada por Umberto Bossi, al comienzo claramente secesionista y ahora federalista, ha condicionado a la aprobación de esta reforma su apoyo al Gobierno desde el inicio de esta legislatura en el 2001. El primer y breve gabinete de Berlusconi, en 1994, cayó por un espantada de Umberto Bossi, cosa que il Cavaliere nunca ha olvidado.

Los parlamentarios de Italia ratifican, en la fecha, la Constitución europea con una mayoría aplastante.