Las Cortes españolas, recientemente constituidas, ratifican a SERRANO y a sus ministros como poder ejecutivo. Se inicia la redacción de un proyecto de Constitución que será presentado ante las Cortes el 30 de marzo.

Es asesinado el gobernador civil de Burgos en la catedral de la ciudad por una muchedumbre enfurecida. La versión oficial atribuye el atroz linchamiento a la acción airada de las masas como una respuesta a la misión que ha llevado al político al templo: inventariar e incautar objetos de ciencias, letras y artes del cabildo.

En España, las nuevas Cortes abren sus sesiones después del derrocamiento de Isabel II. Transcurrirán seis años de gran inestabilidad política hasta la restauración de los Borbones.

El 18 de mayo de 1869 se firma y se hace público el denominado “Pacto Federal de Tortosa”. Impulsado por el dirigente federalista Valentí Almirall, el pacto de Tortosa consiste en un acuerdo entre los comités federales de los antiguos territorios de la Corona de Aragón: Aragón, Catalunya, Valencia y Baleares. La finalidad del acuerdo es posibilitar un primer paso para constituir un auténtico estado federal poniendo de relieve la importancia que da a las comunidades históricas como pieza ideológica clave en su manera de entender la organización del estado federal y toma como ejemplo constituciones como las de Suiza o de EEUU. Estas teorías también las recoge ‘El Estado Catalán’, portavoz del federalismo intransigente que funciona primero en Barcelona y después en Madrid. Estas ideas serán expresadas en las ‘Bases para la Constitución Federal de la Nación Española y para la del Estado en Catalunya’. Valentí Almirall plantea la reconstitución de España a partir de los grandes Estados Históricos y desde el rechazo a la división por Provincias, fruto únicamente de la centralización. El proyecto decaerá con el establecimiento de la Primera República.

Un estudio detallado de las Cortes Constituyentes españolas de 1869, nos revela que los republicanos -que son minoría- profesan una gran admiración por los EEUU. y por el sistema imperante en aquel país. Tanto es así que en uno de sus momentos de euforia norteamericanista, uno de los republicanos más notables -el marqués de Albaida- llega a proponer que se copie íntegro el sistema constitucional americano. En otras palabras, que se traduzca la Constitución norteamericana y se promulgue entera en España.

El general SERRANO es designado por las Cortes, en la fecha, regente del país (144 votos a favor y 45 en contra) (18/6/1869-2/1/1871). El general Juan PRIM, hombre fuerte del régimen, es nombrado el día 18, presidente del Gobierno. Comienza un largo y complicado proceso para encontrar al príncipe europeo que encabezará la nueva monarquía democrática. Tanto PRIM como los progresistas se oponen desde el principio a la candidatura del duque de Montpensier y empiezan los contactos con distintas cortes europeas, para lograr una solución. Varias partidas carlistas se movilizarán contra el gobierno a lo largo del verano de 1869, pero con escaso éxito.

Se publica, en la fecha, una ley que impone los nuevos aranceles librecambistas, es la denominada “ley de Figuerola”. Laureano Figuerola suprime todas las restricciones, tanto para exportar como para importar, y establece para las mercancías tres tipos de aduanas: extraordinarias, fiscales y de balanza comercial. El ambiente financiero de Madrid resulta muy propicio para estas medidas, sin embargo, se encuentran contrarios a ella en Catalunya, aqui los empresarios y obreros del Círculo de Dependientes de Comercio se manifiestan a favor del proteccionismo.

Carlos Manuel de CÉSPEDES es elegido presidente de Cuba. El general PRIM comprende que el recién nombrado presidente en Cuba no va a contentar con una simple autonomía y que luchará por la independencia. Decide entonces entablar negociaciones con el entonces representante en Madrid de los EEUU., el ministro Sickles, para estudiar la posibilidad de conceder la independencia a Cuba y Puerto Rico a cambio del pago de una suma de dinero equivalente al valor de los edificios y obras oficiales que quen en manos de los dos países; esta suma sería avalada por los EEUU. hasta que las islas saldaran su cuenta.

Empieza a correr el rumor de que las islas se venden y los españoles de La Habana protestan enérgicamente. Para enrarecer más la situación, en la prensa de Washington la noticia de las conversaciones de Sickles y PRIM tergiversa la verdad. El presidente del Gobierno ha de defenderse en las Cortes: “La Isla no se vende, porque esa venta sería deshonra para España y a España se la vence, más no se la deshonra”. A pesar de esto, PRIM continúa las negociaciones con Washington. Los EEUU. exigen la presencia de los representantes de Cuba en las negociaciones, pero los enviados españoles no aceptan su intervención sin que antes hayan cesado las hostilidades y los insurrectos depongan sus armas.

Parece claro, ya por estos años, que en un conflicto con los EEUU., los americanos nos arrebatarían la isla de Cuba. Aunque es cierto que muchos de los prohombres españoles del momento opinan de manera distinta, no cabe duda de que alguna de las mentes más claras del momento así lo advierten. El mismo general PRIM, artífice de “la Gloriosa”, a su vuelta de México, para en EEUU. y tiene ocasión de conocer a LINCOLN y a muchos de los militares norteños empeñados en la guerra civil estadounidense. Al llegar a España, PRIM expone en el Senado sus ideas sobre el potencial bélico norteamericano, siendo fácil de adivinar lo que piensa con respecto a Cuba.