REVOLUCIÓN ESPAÑOLA DE SEPTIEMBRE DE 1868

Total de piezas: 13

La familia real española se ha trasladado a Lekeitio para tomar los acostumbrados baños de mar.


En el mes de agosto de 1868, la familia real española se ha trasladado a Lekeitio para tomar los acostumbrados baños de mar. En Madrid, la imprevisión y la ociosidad se acusan aún más en aquel tiempo de vacaciones. Es entonces cuando los generales adversos a la monarquía SERRANO y Dulce vuelven furtivamente de Canarias -donde han sido confinados poco tiempo antes- y cuando el general PRIM, después de realizar provechosas gestiones políticas y financieras en casi toda Europa, regresa a España desde Inglaterra. El pronunciamiento está en marcha: «La Gloriosa».

Un golpe militar en septiembre de 1868 derrocó la monarquía para vivir la primera, breve experiencia republicana.


Solo tras la muerte de Fernando VII en 1833, primero durante la regencia de María Cristina y en el reinado de Isabel II después, se pudo hablar del fin del absolutismo monárquico a la vez que se consolidaba el nuevo Estado liberal, con una alternancia en el poder de moderados y progresistas, cuyo triunfo fue siempre fruto de revoluciones encabezadas por alzamientos militares. Un golpe militar en septiembre de 1868 derrocó la monarquía para vivir la primera, breve experiencia republicana.

Esta pieza también aparece en ... ISABEL II (Reina de España) (1833 / 1843-1868)

PRIM pronto se da cuenta de que la voluntad de los revolucionarios es republicana, y él es monárquico.


Tras la caída de Cádiz y Sevilla, PRIM se encarga de recoger la adhesión de las principales ciudades mediterráneas y llegará hasta Reus, Tarragona y Barcelona. Sin embargo, pronto se da cuenta de que la voluntad de los revolucionarios es republicana, mientras él es monárquico.

Las causas de la revolución de 1868.


CRISIS ECONÓMICA, cuyos primeros síntomas ya se observan en 1865 para desembocar en el derrumbamiento de 1866. El tendido ferroviario (una vez acabada la fase de construcción masiva del tendido se comprobó la escasa rentabilidad de las líneas), la Bolsa (las acciones de las compañías ferroviarias cayeron estrepitosamente, a las que acompañaron otras empresas y los títulos de Deuda Pública), el negocio inmobiliario, la industria textil (alza de precios del algodón norteamericano debido a la Guerra de Secesión que tiene lugar allí en estos momentos, cierre de empresas, aumento del paro)… se desploman de forma paralela a la crisis europea, provocando una situación de paro e inestabilidad social, exacerbadora del descontento popular manifestado desde este momento activamente en los repetidos motines y pronunciamientos. Además, una nueva crisis de subsistencias, en 1867-68, fruto de unas estructuras agrarias anquilosadas, azota a las capas populares que, progresivamente, comienzan a aproximarse a soluciones republicanas que para ellos significaban la resolución de la cuestión social.

Esta pieza también aparece en ... ISABEL II (Reina de España) (1833 / 1843-1868)

Las causas de la revolución de 1868, son múltiples: 1) CRISIS POLÍTICA.


Las causas de la revolución son múltiples: 1) CRISIS POLÍTICA. Nos referimos en lo fundamental a un sistema asfixiado que en la década de los sesenta va perdiendo sus bases de sustentación, hasta verse restringido en el inicio de 1868 a la actuación de una camarilla palatina próxima a la reina Isabel y a su marido, Francisco de Asís. La descomposición del aparato político se materializa en el despegue progresivo de los partidos progresista y demócrata del entramado constitucional isabelino: niegan la legitimidad del sistema (política del retraimiento, revuelta armada vía pronunciamiento). A ello hay que añadir los sucesivos fraccionamientos dentro de la Unión Liberal y del partido moderado, bases donde se sustentaba el sistema isabelino. Y es que las formas constitucionales censitarias, menoscabadas por la continua farsa electoral del caciquismo, no respondían a la realidad sociológica del país.

PRIM y Topete desembarcan en Cádiz. Se produce el pronunciamiento que incia la Revolución de 1868.


Se pone en marcha, en la fecha, desde Cádiz el movimiento revolucionario contra la reina Isabel. PRIM y Topete desembarcan en Cádiz, y allí, con toda la escuadra española en el puerto, el jefe de la misma, el almirante Topete, se pronuncia a favor de la revolución mientras el general SERRANO prepara las tropas destinadas a conquistar la capital, defendida militarmente por el marqués de Novaliches, pero ya predispuesta desde mucho tiempo atrás en contra de Isabel II y de su gobierno.

PRIM, junto a Sagasta y otros jefes de la futura revolución, lanzan el manifiesto «España con honra”.


Garantizado el apoyo de los unionistas y del ejército, PRIM, junto a Sagasta, Ruiz Zorrilla y otros jefes de la futura revolución, lanzan el manifiesto «España con honra”.  En efecto, el brigadier de la Armada, Juan Bautista Topete, lee en Cádiz el manifiesto España con honra, redactado por López de Ayala. Tendrá gran importancia para el triunfo de la Revolución Gloriosa de 1868. Debía su título a la expresión «¡Viva España con honra!», que aparecía en él.

Se pone en marcha desde Cádiz el movimiento revolucionario contra la reina Isabel II.


Al día siguiente ya ha prendido en toda la península. Es la Revolución de Setiembre de 1868, denominada la «Gloriosa» por sus partidarios. En numerosas ciudades españolas se forman juntas revolucionarias pidiendo la caída de la monarquía. La Junta de Barcelona tiene una estructura más democrática que en otros lugares del estado, y su programa es mucho más radical ya que pide, en primer lugar, la supresión de los impuestos de consumo que se cobran sobre los artículos de primera necesidad. Igualmente, se pide la abolición de las quintas y también la organización de unos Batallones de Voluntarios de la Libertad. Entre sus miembros hay progresistas y demócratas.

Esta pieza también aparece en ... ISABEL II (Reina de España) (1833 / 1843-1868)

En el periodo (1868-74) se intenta organizar por primera vez un estado democrático (Sexenio democrático).


Durante el periodo (1868-74) se intenta organizar por primera vez un estado democrático (Sexenio Democrático) que, hasta 1873, será monárquico y, entre el 1873 y el 1874, será republicano.