Ya que sus dos hermanos han muerto, LEONOR tiene el camino abierto para ser princesa de Viana y heredera del trono de Navarra. Gracias a las astucias de su padre y de su esposo, con el apoyo inevitable de LUIS XI, ocupa el lugar que desea. En efecto, en las Cortes de Tafalla, en la fecha, LEONOR y GASTÓN son reconocidos y jurados como príncipes de Viana.
LEONOR (Reina de Navarra)(1479)
Total de piezas: 17
LEONOR de Navarra otorga el título de príncipe de Viana a su hijo mayor Gastón. Todo ello da idea del estado exultante de LEONOR en esos momentos.
En este año, LEONOR de Navarra otorga el título de príncipe de Viana a su hijo mayor Gastón. Todo ello da idea del estado exultante de LEONOR en esos momentos. Pero también se da cuenta de que ahora tendrá que contar asimismo con la desmedida ambición de JUAN II, que no cede el mando de Navarra. Tiene, pues que enfrentarse a una serie de hechos, promovidos por su padre, para apartarla de la corona: partidarios de éste asesinan al obispo de Pamplona, Nicolás de Echávarri, amigo personal de LEONOR, y después JUAN II la obliga a renunciar a sus derechos sobre Aragón (a favor de su hijo FERNANDO, nacido de la unión con JUANA ENRÍQUEZ). Además incita las ambiciones de LUIS XI, siempre deseoso de anexionarse Navarra. Finalmente, LEONOR se convierte en \»prisionera\» de su propio padre que impone un carcelero: M.Pierres de Peralta, temido señor de la guerra y fiel vasallo de JUAN II.
LEONOR, desengañada de su padre, quizá pensase en el trágico final de sus dos hermanos, ya que ahora es ella la que estorba a los intereses del aragonés.
Con todos estos acontecimientos LEONOR, desengañada de su padre, quizá pensase en el trágico final de sus dos hermanos, ya que ahora es ella la que estorba a los intereses del aragonés. Esta negras ideas se confirman cuando tras la muerte en torneo de su hijo Gastón, JUAN II se apresura a nombrar príncipe de Viana a Francisco, hijo del anterior, niño todavía, llamado \»Febo\», con lo que relega a los condes de Foix, que quedan como meros lugartenientes.
GASTÓN el conde de Foix parte hacia el Béarn para encontrar apoyos a su causa. La muerte le sorprende en Roncesvalles.
Ante esta situación que cambia sus planes, GASTÓN el conde de Foix parte hacia el Béarn para encontrar apoyos a su causa. La muerte le sorprende en la fecha, en Roncesvalles, dejando en su testamento señora del reino de Navarra a su esposa.
LEONOR, pese a encontrarse sola, consiguiendo que los beaumonteses renuncien a varias posiciones en su favor.
LEONOR, saca fuerzas de flaqueza, pese a encontrarse sola, y arregla antiguas disputas con los beaumonteses, consiguiendo que estos renuncien a varias posiciones en su favor. También se dirige a su padre y a su hermanastro FERNANDO (ya casado con Isabel de Castilla) reivindicando sus derechos, y por toda respuesta recibe la proposición de JUAN II de casar con el conde de Medinaceli, a lo que la princesa LEONOR contesta con una negativa. Sin embargo su principal apoyo viene de alguien insospechado, Pierres de Peralta, su carcelero, que, viendo la felonía de JUAN II, pasa al bando de doña LEONOR, ayudándola a convocar Cortes en Olite que reafirmarán su posición en el reino.
Es coronada reina de Navarra, LEONOR, hija de Juan II que acaba de fallecer.
En la fecha, es coronada reina de Navarra, LEONOR, hija de Juan II que acaba de fallecer. Con su advenimiento, se une al reino de Navarra el condado de Foix, lo que implica un crecimiento de la parte navarra situada más allá de los Pirineos. Hasta este año, no ha podido reinar LEONOR en Navarra ya que las intrigas de su padre se lo han impedido desde 1464 en que muriera su hermana BLANCA. Pero sobre LEONOR cuelga la maldición que su hermana BLANCA le lanzó en el lecho de muerte.
Quince días después de haber subido al trono de Navarra muere al parecer de un infarto, la reina LEONOR.
Quince días después de haber subido al trono de Navarra, en la fecha, muere bruscamente al parecer de un infarto la reina de Navarra LEONOR. Se cumple de esta manera la maldición de su hermana BLANCA. Es enterrada por su expreso deseo en el convento de San Francisco de Tafalla, que ella misma ha mandado edificar. (Del convento y de su tumba no quedan hoy vestigios) ¡Han transcurrido quince días!.