La prohibición que establece la Ley sálica impuesta en Francia en tiempo de CLODOVEO I no ha sido establecida modernamente en Francia sino hasta 1316, con la muerte del rey neonato JUAN I de Francia, y que su aprobación se debe a una manipulación de la antigua ley de los salios, motivada por intereses políticos y dinásticos para que no acceda al trono la hermana del niño muerto, sino su tío (FELIPE V de Francia). La Ley Sálica original otorgaba, en realidad, un papel preponderante a la mujer en la sucesión al trono: establecía que el acceso al mismo correspondía al hijo varón de la hermana del rey, siendo este el único medio de asegurar la transmisión de la sangre real y la continuidad del linaje familiar en el poder. En efecto, siguiendo la lógica sálica, nunca se podía estar completamente seguro de si el hijo de la mujer del rey llevaba realmente la sangre del rey, pero es indudable que el hijo de la hermana del rey lleva sangre real y continuará la línea familiar.
REINO DE NAVARRA (1162-1516)
Total de piezas: 153
Existiendo en Francia la ley sálica, que prohíbe el reinado de las mujeres, hereda el trono FELIPE el Largo,
Existiendo en Francia la ley sálica, que prohíbe el reinado de las mujeres, el heredero del trono es FELIPE el Largo, V de Francia y I de Navarra (1316-1322). Segundo hijo de Felipe IV, hermano, por tanto, de LUIS X. Su acceso a la corona será motivo de nuevos problemas en Navarra ya que estos, sometidos al régimen francés pero defensores de sus propias leyes, reclaman como reina a Juana, hija de LUIS, ya que Navarra no tiene establecida ninguna norma que impida su coronación. FELIPE V el Largo, que reinará algo más de cinco años, intentará restaurar las reformas modernizadoras de su padre Felipe IV, que han sido abandonadas en una fuerte regresión feudal, por su hermano Luis X, influido por su tío el conde de Valois.
Felipe I de Navarra, concierta la boda de su sobrina Juana con Felipe de Evreux, un primo suyo.
Durante dos años, los estamentos navarros se resisten a reconocer a FELIPE I de Navarra (Felipe V de Francia) y, aunque finalmente deben hacerlo, una parte importante del país sigue considerando a JUANA como a su reina. En 1318, FELIPE I concierta la boda de su sobrina JUANA con FELIPE de Evreux, un primo suyo.
Fallece FELIPE el Largo, V de Francia y I de Navarra.
Fallece FELIPE el Largo, V de Francia y I de Navarra dejando sólo dos hijas. A lo largo de sus años de reinado, FELIPE el Largo se limita a gobernar Navarra a través de sus representantes, dedicándose plenamente a los asuntos franceses.
Sube al trono francés el hermano de Felipe V el Largo: CARLOS IV el Hermoso (I de Navarra).
Fallecido Felipe el Largo, V de Francia y I de Navarra, sin descendencia ya que el único hijo que ha tenido ha muerto antes que él, le sucede en el trono francés su hermano CARLOS el Hermoso (I de Navarra, IV de Francia) (1322-1328), último hijo de Felipe IV. Como JUANA y su esposo FELIPE de Evreux siguen reclamando su derecho al trono de Navarra y al condado de Champagne, debe entablar negociaciones con ellos. Pese a ello, los estamentos navarros, que insisten en reconocer a JUANA, se niegan a prestarle juramento. La situación, sin embargo, se mantiene invariable aunque la posición francesa en Navarra es cada vez más débil.
Matanza e incendio de las principales aljamas del Reino de Navarra.
La riqueza de los judíos navarros, amén de los elementos irracionales de siempre y las destempladas prédicas antisemitas del franciscano Pedro de Ollogoyen, dan pie a un complot que cristaliza en la terrible matanza de 1328 en diversas ciudades navarras, de las cuales, la más despiadada fue en Estella. A los judíos se les da a elegir entre bautismo y muerte. El 6 de marzo de 1328, el vacío de autoridad producido a la muerte de Carlos I el Hermoso fue la ocasión propicia que desencadena la matanza e incendio de las principales aljamas del reino. Aprovechando el interregno que supone la muerte del rey Carlos hasta que son reconocidos los derechos de JUANA y FELIPE de Evreux la banda aglutinada en torno a fray Pedro asaltará Estella, Funes, San Adrián, Tudela, Pamplona, Marcilla y Viana, saqueando y asesinando por doquier.
Las Cortes de Navarra sin la presencia de los franceses, proclaman a Juana II, como su legítima reina.
En Navarra, después de que las villas apoyen las decisiones de la asamblea de Puente la Reina, los regentes convocan a Cortes. Éstas reunidas en la misma plaza del Castillo de Pamplona, sin que se haya permitido la presencia de los embajadores franceses, proclaman a JUANA, JUANA II (1328-1349), como a su legítima reina, y con ella a su esposo FELIPE de Evreux, FELIPE III, no aceptando a FELIPE VI de Valois, heredero de la corona francesa y de la navarra. Ha empezado el reinado de una nueva dinastía y Navarra ha conseguido -en gran parte aunque no totalmente- su independencia respecto a Francia. Dada la situación de su reino, el nuevo rey francés FELIPE VI acepta la decisión de los navarros a cambio de la renuncia de FELIPE de Evreux a la posesión de la Champagne.
JUANA II y su marido FELIPE III de Evreux juran el fuero.
JUANA II y su marido FELIPE de Evreux III juran el fuero. A continuación, son coronados, en la fecha, reyes de Navarra (1329-1349). Las Cortes establecen que, en caso de que JUANA II muera antes que su esposo, serán herederos del trono los hijos de ésta. Con ellos entra a reinar en Navarra la tercera dinastía extranjera: la Casa de Evreux. Durante el reinado, que recaerá principalmente en FELIPE de Evreux III y que será ejercido por medio de lugartenientes, se produce un cierto retorno a la normalidad y a la tranquilidad interior. Los nuevos monarcas restablecen el orden e imponen fuertes multas a los concejos por haber sido incapaces de defender a los judíos.
Felipe de Evreux cae muerto, al frente del contingente navarro, en la lucha por la conquista de Algeciras.
FELIPE de Evreux, se pone al frente de los contingentes navarros que participan en la lucha por la conquista de Algeciras. Durante el asedio de aquella plaza FELIPE cae muerto.
Fallece en Conflans, JUANA II de Navarra.
Fallece en Conflans, JUANA II de Navarra.


