El misionero irlandés COLUMBANO despues de evangelizar Irlanda y Gran Bretaña se traslada a Francia, Alemania, Suiza e Italia fundando monasterios y abadías, siempre son su regla, austerísima en el trabajo, estudio y oración.

Fallece en el monasterio de Bobbio el más célebre monje irlandés COLUMBANO. Irlanda, es el único lugar de Occidente donde se conoce el griego, y por un momento parece que el cristianismo celta pueda llegar a competir con éxito con el catolicismo ortodoxo. Los restos de S.PATRICIO, Sta.BRÍGIDA y S.COLUMBANO se venerarán en una ciudad del Ulster: Downpatrick. De hecho, en el siglo VII el sur de Irlanda acepta la obediencia a Roma pero el norte de la isla tardará varias generaciones en dar el mismo paso. Varios son los monjes conocidos que evangelizan el continente en este siglo: COLUMBANO, Gall (fallecido en 640), Fridolin, Ruperto, Severino, Virgilio y Estasio. La labor evnagelizadora de estos monjes tiene algunos defectos graves que la hacen casi enteramente infructuosa. Se aferran demasiado a sus peculiaridades nacionales y les falta la unión estrecha con la Santa Sede y esto impedirá la organización eclesiástica que garantice la permanencia de su trabajo.

En el siglo VII, a los irlandeses que penetran en Gales, se unen también los anglos y en repetidas ocasiones vencen a los britanos. Muere en combate el rey pagano de los anglos, Adelhere. (La barca funeraria, cargada con un tesoro, descubierta en 1939 en Sutton Hoo (Suffolk), dentro de un túmulo, se le atribuye)

En el siglo VII el sur de Irlanda acepta la obediencia a Roma pero el norte de la isla tardará varias generaciones en dar el mismo paso.

Los vikingos (noruegos) siguen su ataque saqueando las costas de Irlanda, estableciendo su base en Rechru (Lambay) al norte de Dublín. El país no tarda en quedar a su merced.

Brian BORU o Boroimhe se convierte en el 978 en rey de Cashel, capital del antiguo reino irlandés de Munster. Hacia el año 984 controlaba la totalidad del reino, y en 1001 es reconocido como Gran Rey de Irlanda.

Brian BORU de Munster (1002-1014), rey de Irlanda, encabezó la resistencia contra los vikingos, que habían dominado el litoral durante dos siglos. En 1014, en la batalla de Clontorf, en las inmediaciones de Dublín, los vikingos resultaron derrotados y su posición en Irlanda decayó rápidamente a partir de entonces. Pero BRIAN murió cuando la batalla terminaba y siguió un período de anarquia.

El Papa ADRIANO IV, recién nombrado pontífice, otorga las tierras de Irlanda a ENRIQUE II. El único inglés que ha alcanzado esa dignidad, otorga Irlanda a Enrique II. Los ingleses se establecerán al principio sólo en la región de Dublín. Otras partes de Irlanda quedarán fuera de la órbita inglesa durante largo tiempo. Dicha región de Dublín será vallada con estacas a fin de mantener alejados a los subyugados irlandeses.

Irlanda se ha mantenido en la anarquía tribal desde que los vikingos fueon expulsados ciento cincuenta años antes. Algunos señores normandos de Inglaterra, tratando de hallar más libertad de la que el firme gobierno de ENRIQUE II les concede, se trasladan a Irlanda en 1169 en busca de fortuna.

Irlanda se ha mantenido en la anarquia tribal desde que los vikingos fueron expulsados hace ciento cincuenta años. Como ENRIQUE no quiere una Irlanda normanda e independiente, se dirige allí en 1170 y se asegura de que las regiones conquistadas permanezcan fieles a la corona inglesa. La pertenencia a ésta de aquellas tierras se ha acordado con el respaldo del papa Adriano IV en 1154.