ADRIANO IV (Papa)(1154-1159)

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ADRIANO IV, se aplica por entero a fortalecer y ampliar el poder espiritual y temporal del papado.


Al convertirse en ADRIANO IV, Nicolás Breakspeare hace suyas las concepciones de san Gregorio Vll y se aplica por entero a fortalecer y ampliar el poder espiritual y temporal del papado. ADRIANO IV acaba de cumplir cuarenta años, lejos pues de la bondadosa senectud de Anastasio IV. Roma, los normandos y el emperador, unos tras otros, pondrán a prueba su capacidad de decisión.

ADRIANO IV -papa- (5.12.1154 – 1.9.1159). El único papa inglés que ha ocupado la sede de S.Pedro.


ADRIANO IV -papa- (5.12.1154 – 1.9.1159). El único papa inglés que ha ocupado la sede de S.Pedro. De nombre civil Nicolás Brekspear, ha nacido en Abbot´s Langley, ha alcanzado el cargo de canónigo de la abadía de Saint-Ruf y posteriormente abad en 1137. En 1148 es nombrado cardenal-obispo de Albano por el papa Eugenio III, encomendándole la representación de la Iglesia en Escandinavia. Allí, ordena la diócesis de Trondheim y logra que Uppsala sea designada como sede metropolitana de la Iglesia en Suecia. Como el de su antecesor, el pontificado de ADRIANO IV estará oscurecido por la inmensa sombra de FEDERICO I Barbarroja.

El Papa ADRIÁN IV, recién nombrado pontífice, otorga las tierras de Irlanda a ENRIQUE II.


El Papa ADRIANO IV, recién nombrado pontífice, otorga las tierras de Irlanda a ENRIQUE II. El único inglés que ha alcanzado esa dignidad, otorga Irlanda a Enrique II. Los ingleses se establecerán al principio sólo en la región de Dublín. Otras partes de Irlanda quedarán fuera de la órbita inglesa durante largo tiempo. Dicha región de Dublín será vallada con estacas a fin de mantener alejados a los subyugados irlandeses.

FEDERICO I Barbarroja es coronado emperador por ADRIANO IV. Arnaldo de Brescia es ajusticiado.


FEDERICO I Barbarroja devuelve al papa ADRIANO IV el gobierno de los Estados Pontificios cuando, deseando ser coronado emperador de mano del pontífice, entra en la ciudad con un potente ejército. Allí intentan los senadores atraerlo a su causa, ofreciéndole coronarle función que según ellos, corresponde al Senado. Pero FEDERICO no se deja convencer, respondiéndoles: «Roma ya no es Roma». La ciudad se rebela contra él, por lo que FEDERICO toma cumplida venganza con los alzados, muchísimos de los cuales son ajusticiados. BARBARROJA ha de salir de Roma llevándose con él al papa y a los cardenales. Poco después, sus hombres logran apoderarse del instigador de los motines, el ardiente predicador ARNALDO de Brescia. El emperador se lo entrega al prefecto de la ciudad y éste le condena a morir en el cadalso, quemando luego su cadáver y echando sus cenizas al río Tíber. Finalmente, FEDERICO recibe del nuevo Papa, ADRIANO IV, la corona imperial como premio por la ayuda que le ha prestado.

El papa ADRIANO IV concluye con GUILLERMO I de Sicilia, hijo de Roger II, el tratado de Benevento.


Sometida Roma por FEDERICO I Barbarroja, el Papa ADRIANO IV se ocupa de sus problemas con los normandos quienes dominando el reino de Sicilia y el sur de Italia constituyen una amenaza para los Estados de la Iglesia. En 1156 el papa concluye con GUILLERMO I de Sicilia el tratado de Benevento, que garantiza al papado la seguridad de sus fronteras meridionales. Pero este acuerdo entre ADRIANO y los normandos indispone al Papa con el emperador. En realidad, nunca ha habido unas relaciones claras y cordiales entre el monarca alemán y el sucesor de Pedro. Posee aquél una enorme personalidad y es un hombre de Estado de excepcional categoría que lucha decididamente por restaurar todos los derechos y privilegios de su corona. Su imperialismo tiene que chocar necesariamente con un papa imbuido de antiguas pretensiones gregorianas por un dominio universal.

El emperador FEDERICO I Barbarroja exige que los obispos italianos le presten juramento de fidelidad.


En una dieta celebrada en Plasencia (Piacenza, norte de Italia), FEDERICO exige -contra el Conocordato de Worms- que los obispos italianos le presten juramento de fidelidad y poniendo su autoridad por encima de todo otro poder terrenal, incluido el de los papas. Estas medidas reunidas por los más ilustres exponentes del derecho, los juristas de Bolonia, en el llamado «Código Roncaglia», por haberse celebrado la dieta en los «campos Roncáglicos», proclaman que la voluntad del emperador, heredero directo de la potestad de los césares, constituye ley y le conceden amplio poder sobre las comunas y sobre la Iglesia. Lógicamente este código no puede ser aceptados por el Papa ADRIANO IV.

Quedan regulados con tres breves apostólicos las relaciones legales de la Corona de Aragón con Roma.


El Papa ADRIANO IV, regula con tres breves apostólicos las relaciones legales de la Corona de Aragón con Roma. En la fecha, escribe a los arzobispos de Tarragona y Narbona diciéndoles que ha tomado bajo la protección de S.Pedro al conde y a todo su país y da su aprobación a los convenios de RAMON BERENGUER IV con las tres Órdenes de caballería, en relación al testamento de Alfonso I el Batallador. ADRIANO IV renueva además el privilegio concedido en 1095, según el cual el conde nada más puede sufrir excomunión o entredicho con el consentimiento del papa.