LUIS XIII el Justo (Rey de Francia) (14/5/1610-14/5/1643)

Total de piezas: 58

Olivares quiere que Catalunya se envuelva en la guerra contra los franceses.


En el contexto de la Guerra entre España y Francia, el cardenal RICHELIEU, primer ministro francés, fija sus ojos en el Rosellón y en junio de 1639 se produce el ataque francés por la frontera del Rosellón. Los franceses, dirigidos por el mariscal Schomberg, duque de Halluin, conquistan Òpol y la fortaleza de Salses reputada inexpugnable. Esta conquista es facilitada por la traición de su alcalde, que contra las Constituciones no es catalán. Por otra parte, este ataque es una nueva oportunidad que tiene OLIVARES de arrastrar a los catalanes a su política. A OLIVARES, que lo supo a tiempo, le hubiese sido fácil evitar este ataque francés, adelantándose al mismo por el otro extremo de la frontera donde acampaba el ejército real. Con poco esfuerzo, podría haber desbaratado los planes enemigos. Sin embargo prefiere que Catalunya se convierta en frente de batalla, envolviéndola así en la guerra.

Un cuerpo de quince mil infantes catalanes, marchan hacia el Rosellón.


Catalunya, entonces olvidando los agravios recibidos, al grito de ¡sometent!, se levanta en armas, dando el ejemplo Barcelona, donde se alistan unos seiscientos hombres formando varias compañías de mosqueteros, arcabuceros y lanceros. El obispo de Barcelona pone en la puerta de su palacio una bandera de guerra donde campa la cruz de Santa Eulalia. Por su parte el virrey, conde de Santa Coloma, congrega desde Girona las milicias del Principado, alistándose por ciudades, villas y lugares un cuerpo de quince mil infantes, divididos en dos regimientos, para marchar, en la fecha, hacia el Rosellón.

Las tropas del ejército real se dirigen hacia Francia, para expulsar a los franceses del Rosellón.


Las tropas del ejército real, comandadas por Spinola, se dirigen hacia el norte de Catalunya, para expulsar a los franceses del Rosellón.

A pesar de la victoria de Salses, Olivares deja el ejército en Catalunya con los consiguientes abusos.


La victoria de Salses y la consecuente retirada del ejército francés de territorio catalán, permite, asimismo, la retirada del ejército español, y los poderes catalanes piden que Catalunya sea liberada de esta carga que soporta hace tantos años. También en Madrid suenan algunas voces aconsejando el traslado del ejército. Pero OLIVARES lejos de seguir estos consejos, deja el ejército en Catalunya con los consiguientes abusos de la soldadesca, que sin correctivo de ninguna clase, se entrega a ellos desenfrenadamente. Robos, homicidios, violaciones, destrozos de toda clase marcan el paso de las tropas reales por los pueblos y campos de Catalunya.

La Generalitat quiere demostrar al conde-duque de OLIVARES que puede reclutar a miles de hombres.


Con Salses en manos de los franceses, la Generalitat quiere ahora demostrar al conde-duque de OLIVARES que puede reclutar a varios miles de hombres para defenderse en caso de ataque francés. El ejército real, con ayuda de estas tropas, recupera -en la fecha- la fortaleza de Salses. Pero el coste es altísimo. Entre los 13.000 movilizados se producen 8.000 bajas.

Las tropas hispánicas llegan a Barcelona. Pau Claris reconoce a Luis XIII de Francia , Conde de Barcelona.


A la rendición de Cambrils siguen la de otros pueblos y ciudades. Van cayendo Tarragona, Vilafranca, Sant Sadurní de Noia y Martorell. El cardenal RICHELIEU aconseja a PAU CLARIS, Presidente de la Diputació de Catalunya, la proclamación de una República separada de España y bajo la protección de Francia. PAU CLARIS no ve viable la constitución de una República pero cuando las tropas hispánicas llegan a los pies de las murallas de Barcelona, no queda otra solución que reconocer a LUIS XIII de Francia, como conde de Barcelona «com en temps de Carlemany». Esta proclamación comporta el mantenimiento de las constituciones de Catalunya. Desde 1641 a 1643 parte de la nobleza catalana, al ver el autoritarismo de los lugartenientes franceses y los excesos de las tropas, tomarán partido por FELIPE IV

Batalla de Montjuïc en la que es vencido el ejército real, dirigido por el marqués de Los Vélez.


El ejército real se encuentra en frente de Barcelona. Forzado por las dificultades de los suministramientos y confiando en la enorme superioridad numérica, el ejército hispánico renuncia a establecer un asedio formal sobra la ciudad catalana y opta por un ataque frontal contra Montjuïc, desde donde espera poder bombardear la ciudad hasta obligarla a la rendición. Así, en la fecha, tiene lugar la Batalla de Montjuïc en la que es vencido el ejército real, dirigido por el marqués de Los Vélez. El ejército catalano-francés está comandado por el embajador Du Plessis-Besançon y presidido por la Bandera de Santa Eulàlia. Este éxito, que trastoca el proyecto de OLIVARES de una rápida conquista, obliga a las tropas de FELIPE IV a retroceder hasta Tarragona, reafirmándose la revuelta catalana. Durante varios años, la guerra siguió este mismo curso, de ofensivas y contraofensivas que iban de un extremo al otro del territorio, convirtiéndolo en simple escenario de luchas entre soldados extranjeros. El entusiasmo era tan escaso en toda España que, a la práctica, sólo se enfrentaban el ejército francés y los mercenarios a sueldo de la corona española.

HONORATO II y LUIS XIII de Francia firman -a espalda de los españoles- el tratado de Peroné. Derecho soberano de Mónaco.


En setiembre de 1641, luego de una década de negociaciones, HONORATO II y LUIS XIII de Francia firman -a espalda de los españoles- el tratado de Peroné, por el cual reconocen el derecho soberano de Mónaco y acuerdan para el Príncipe y sus descendientes una igualdad de rango con la más alta nobleza francesa. El reino de Francia asegura entonces su protección al príncipe de Mónaco quien incluso vive durante un tiempo en la corte de París. Son los últimos años del placentero reinado de los Luises. Días felices y despreocupados.

Esta pieza también aparece en ... PRINCIPADO DE MÓNACO

La Junta General de Braços constituye una Junta de Guerra formada por catalanes y franceses .


La Junta General de Braços constituye al mismo tiempo, una Junta de Guerra formada por catalanes y franceses bajo la presidencia del «Conseller en cap» JOAN PERE FONTANELLA con plenos poderes para organizar la defensa del Principado. Se organiza la estructura militar territorial y las compañías de almogávares. En la defensa de Barcelona se singulariza la Coronela, o milicia urbana.

LUIS XIII de Francia recibe bajo su obediencia y amparo el Principado de Catalunya y los condados.


En la fecha, se firma en Perona un tratado por el cual LUIS XIII de Francia recibe bajo su obediencia y amparo el Principado de Catalunya y los condados de Cerdanya y el Rosellón, con la precisa condición de guardar sus fueros, libertades y privilegios, pasando el mariscal Brezé a ser el virrey de Francia en Barcelona. Las autoridades francesas, en efecto, respetan las instituciones catalanas, y tienen buen cuidado de que, en las principales instituciones, no puedan aparecer dirigentes ?
partidarios de España.