El general romano TIBERIO, hijastro del emperador AUGUSTO, que está desde el 11 aC casado con JULIA, hija del propio AUGUSTO, es adoptado, en la fecha, por el emperador para asegurar su sucesión ya que han muerto los dos herederos designados en un principio: Marcelo, el hijo de su hermana y AGRIPA, su yerno. Este último, es el famoso Marco Vipsanio AGRIPA, el genial vencedor de Actium (31 aC). TIBERIO está casado con una hija suya, Vipsania Agripina. Pero este matrimonio no es el que conviene a los ambiciosos deseos de Livia Drusilla, esposa actual del emperador AUGUSTO y madre de TIBERIO, a quien quiere para futuro emperador, sino un enlace con la hija mayor de AUGUSTO, JULIA (hija no de Livia, sino de su anterior esposa, Escribonia). TIBERIO será así no sólo hijastro, sino también yerno de AUGUSTO. En cuanto a los hijos que ya tiene JULIA, supuestos herederos del legado de AUGUSTO (Casualmente del renombrado padre de Vipsania, de quien acaba de quedar viuda) sabido es que eso no es obstáculo en Roma. Así pues, por real capricho, TIBERIO debe repudiar a su amada esposa y casarse en segundas nupcias con JULIA.

El general TIBERIO asume el mando de las tropas romanas en el Rin, donde la situación se hace cada vez más difícil a causa de la creciente actividad de las tribus germánicas, que desde la derecha del Rin se extienden hasta el Elba en lo que se denomina la provincia de Germanía al mando del príncipe marcomano Marbod. Por ello, desde hace varios años, prácticamente la totalidad de los ejércitos romanos es utilizada para consolidar la frontera del Rin, intentando llevarla hasta el rio Elba.

Pero toda esta política romana de la frontera del Rin se hunde cuando en el año 6, surge un peligro mayor en Panonia, donde miles de hombres amenazan la propia Italia. La situación es tan grave que el propio AUGUSTO está aterrado, decretándose un reclutamiento extraordinario. Al mando de estas tropas envía a GERMÁNICO para reunirse con TIBERIO, que contará en un momento dado con diez legiones en un solo campamento.

Rebelión contra los romanos en Palestina. 2.000 rebeldes son crucificados. Nace el movimiento zelota. El celo al que deben su nombre se ejerce al servicio de Dios y de la Ley, contra la dominación romana, a la vista de la instauración de una teocracia. Poco a poco, en Samaria, Judea e Idumea, el poder ha pasado a manos de los procuradores romanos (Funcionario nombrado por el emperador para dirigir una provincia imperial, con funciones de gobernador) que a partir del 6 y hasta el 40, ya lo ejercerán directamente bajo la autoridad romana de Siria. Así, Samaria, Judea e Idumea se convierten en una provincia del Imperio Romano y ARQUELAO es destituido y desterrado a Viena en las Galias.

Judea se convierte en una provincia romana.

Creación de la prefectura de anona, servicio de reavituallamiento de cereales y productos de primera necesidad, hasta ahora confiado a los ediles. Tiene por función efectuar distribuciones gratuitas (200.000 socorridos) o de controlar la provisión de víveres. Roma tiene cuatro Prefectos: El del pretorio, el urbano, el de anona y el de los vigiles. Una multitud de secretarios están colocados bajo las órdenes de estos magistrados. Casi todos son libertos, porque se está más seguro de que sean fieles.

Panonia e Iliria, en la fecha, quedan pacificadas y definitivamente sometidas se convierten en provincia romana imperial.

La provincia de la Galia, romana desde hace sólo medio siglo, es bastante insegura porque las tribus germánicas situadas al este del Rin pueden, y en ocasiones logran, efectuar incursiones al otro lado del río. Por esta razón las fuerzas romanas lo cruzan a su vez con la intención de conquistar Germania e incorporarla al Imperio. Avanzan con lentitud hacia el Elba, pero en la selva de Teutoburgo los germanos, al mando de ARMINIO, príncipe de la tribu germánica de los queruscos, después de servir durante varios años en las fuerzas auxiliares romanas, tienden una emboscada a tres legiones guiadas por Publio Quintilio Varo. Los romanos deben retroceder abandonando la provincia de Germania, pero manteniendo la frontera del Rin. Las tres legiones quedan destruidas. El general Varo se suicida. AUGUSTO, que es hombre cauto, duda que merezca la pena dilapidar hombres y dinero en un nuevo intento de conquista, por lo que Germania es abandonada y el Rin continúa siendo en lo sucesivo la frontera. Lo mismo que la batalla de Carras sesenta y dos años antes (53 aC), la batalla de la selva de Teutoburgo señala un límite a la expansión imperial romana.

Gran sublevación en Germania. TIBERIO, llamado de nuevo al mando (10-12) para atenuar los efectos del suicidio de Varo (9), puede, a duras penas, mantener la frontera del Rin.

CÉSAR AUGUSTO, en la fecha, ha establecido un gobierno fuerte y eficiente, además de asegurarse la lealtad y el respeto de todas las clases sociales, tanto en Roma como en las provincias. Éstas habían sido cruelmente explotadas bajo la república por sus gobernadores y por los recaudadores de impuestos agrícolas, no sujetos a ningún tipo de control. El principado ha cambiado esta situación. Esta forma de gobernar, permite la existencia de un régimen autocrático de facto al tiempo que mantiene los aspectos formales del sistema republicano. La mayor parte de los emperadores estimularán esta falsa fachada democrática al tiempo que se asgurarán su reconocimiento como monarcas entre los senadores. Las provincias tienen ahora garantizada la paz y la seguridad y la perspectiva de un gobierno fuerte que controla la actuación de sus propios funcionarios y agentes económicos.