En las fértiles tierras situadas al sur del Sahara, los portugueses encuentran a gentes de una nueva raza. Parecen primitivas y, ciertamente, no son cristianas. Así que a los portugueses les parece apropiado esclavizarlas. Las tribus negras, que luchan y se esclavizan entre ellas, no oponen reparo alguno en comerciar con los portugueses con esclavos cautivos, a cambio de lo que los barcos lusos puedan ofrecerles.

Terminada la minoría de edad del rey ALFONSO V el Africano, rey de portugal, el partido de la nobleza predomina de nuevo y el regente PEDRO, en la fecha, es asesinado en Alfarrobeira. Este episodio señala el inicio de un período caracterizado por la sumisión de la política nacional a las necesidades económicas de la nobleza y por frecuentes expediciones militares al Norte de África, en las que se conquistarán algunas ciudades costeras (Alcazarquivir, Tánger, Arcila, Larache)

A mediados del siglo XV se constata la presencia de los portugueses en la desembocadura del Senegal y en Cabo Verde, controlando el comercio de esclavos hasta mediados del siglo XVI, en el que este monopolio pasa a manos de los holandeses. Intereses franceses y británicos se dejan también sentir en la zona.

Los portugueses conquistan en Marruecos, otros puertos: Tánger (1471), Santa Cruz de Auger (1505), Mazagán (1514).

Los navegantes portugueses, en su exploreación de la costa africana, hace ya algunos años han alcanzado el tramo costero que les conduce decididamente hacia el Este. Se apresuran en seguir adelante, y en 1472 el navegante Fernando Poo descubre la isla que llevará su nombre (hoy Bioko, en Guinea Ecuatorial). En un par de años ocupan esta isla, así como las de Annobón y Corisco que convertirán en embarcaderos de esclavos. Estas islas se hallan a 2.000 kilómetros al este de Portugal, y los navegantes están claramente en la ruta de las Indias. Pero entonces la costa africana gira hacia el Sur una vez más y no muestra signos de torcer de nuevo hacia el Este. Por un momento, los portugueses se desmoralizan, y el intento de llegar a las Indias languidece.

Las tropas lusitanas penetran en el valle del Duero. Su intención es reunirse en Burgos con los franceses, que atacarán desde el norte. Pero no se producirá la invasión francesa y los portugueses, en un espectacular avance, llegarán hasta Baltanás donde se estabilizará el frente en la región de Zamora. El rey portugués, ALFONSO V, no sólo decide apoyar a su sobrina JUANA la Beltraneja, sino que, encontrándose a la sazón viudo, anuncia, en la fecha, su intención de casarse con ella.

La inteligencia política demostrada por ISABEL y FERNANDO al eliminar sus diferencias no puede evitar el estallido, en la fecha, de la guerra sucesoria (1475-1479). Los seguidores de JUANA y aquellos que están junto a ISABEL o, lo que es casi igual, quienes defienden la unión de Castilla con Portugal y los que prefieren que Castilla se una a Aragón, lucharán en una guerra sucesoria por espacio de cuatro años. FERNANDO II, es proclamado corregente de Castilla en el arbitraje de Segovia (1475), participa activamente en la dirección militar de la guerra.

El rey portugués, ALFONSO V, se casa en Plasencia, en la fecha, con su sobrina JUANA la Beltraneja de trece años de edad, sin dispensa pontificia.

En la fecha, COLÓN, cuando navega protegiendo un convoy mercante que cubre la ruta de Génova a Flandes, su barco es atacado y hundido por una escuadra francesa a la altura del cabo de San Vicente. COLÓN consigue alcanzar la costa portuguesa de Lagos, a unas dos leguas de distancia (unos once km.). Desde allí pasa a Lisboa. Creyendo que ha llegado el momento de emprender fortuna, fija allí su residencia, quizá por hallarse en la antesala del mar en que quiere penetrar.

JUAN II el Perfecto, rey de Portugal (1481-1495). Hijo y sucesor de ALFONSO V el Africano y sobrino nieto de Enrique el Navegante, es un rey enérgico, acaso el más grande de la historia del país. Afirma la monarquia autoritaria contra la nobleza, abandona las disputas fronterizas con Castilla, interrumpe las expediciones militares al Norte de África y orienta el país hacia la expansión marítima animando a los marinos portugueses que estaban bordeando África, a seguir adelante. Así lo harán, siguiendo la costa africana en dirección Sur, hasta sobrepasar en más de 2.500 km. La isla de Fernando Poo.