En los comienzos de la Iglesia, los cristianos se reúnen en las casas particulares. Esto supone unas casas bastante amplias. En Oriente, los cristianos utilizan la habitación superior bajo el techo, la pieza más tranquila y la más discreta (cf. Hch 20,7-11). En Occidente, el lugar de reunión puede ser el comedor de la casa romana de un cristiano acomodado. La sala de baño o la piscina sirve para los bautismos. En su origen, la palabra baptisterio significa «piscina» y bautismo equivale a «inmersión». Durante el buen tiempo se pueden reunir en el patio de una casa, en un huerto o en un cementerio. A partir del siglo II, algunos cristianos regalan sus casas, cuyo uso estará reservado al culto. Desde mediados del siglo III se construirán verdaderas iglesias.
HISTORIA DE LA IGLESIA CATÓLICA. Primeros cristianos hasta Constantino (6 aC - 313)
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Iniciación cristiana
Por «iniciación cristiana» hay que entender lo que en la actualidad llamamos al conjunto del bautismo, la confirmación y la primera eucaristía, con el correspondiente tiempo de preparación. Los discípulos de Jesús recogen para la iniciación cristiana el baño de agua, práctica heredada del judaísmo. Al valor tradicional de conversión y purificación, ellos añaden un nuevo significado: el bautismo -único y definitivo- lleva a cabo el renacimiento por el Espíritu; hace participar al cristiano en la muerte y la resurrección de Cristo (Rom 6,211; Gál 3,27; Col 2,11-13). El que desea hacerse cristiano debe arrepentirse de sus pecados, practicar los mandamientos, acoger el mensaje y proclamar su fe en Cristo salvador. El candidato al bautismo debe ser presentado por los cristianos, que se ofrecen como garantes de la sinceridad de su actitud (padrinos y madrinas). Al bautismo sigue la confirmación considerada como el complemento de aquél. Recibido el bautismo y la confirmación, los nuevos cristianos son admitidos a tomar parte en el culto público de la comunidad, la Misa, en la que reciben por primera vez la sagrada comunión.
La comunidad cristiana de Roma la forman al menos quince mil personas y probablemente muchas más.
La iglesia de Roma ha pasado, de ser fundamentalmente greco-parlante, a ser de latino-parlante. La comunidad la forman al menos quince mil personas, y probablemente muchas más. En un solo siglo, el número ha crecido aceleradamente, hasta llegar a duplicarse.
Los miembros de la jerarquía adquieren el nombre de «clérigos».
En plena expansión de la Iglesia Católica, como tiende cada vez más a llamarse ella misma, el último grado de la jerarquía está constituido por los diáconos, que son asistentes y colaboradores del obispo: tienen a su cargo la administración de las limosnas. A continuación los presbíteros: se cuidan de la predicación o la administración del bautismo. Y finalmente el obispo, responsable general de la comunidad, sucesor de los apóstoles. Al principio, los obispos son hombres con esposa y con hijos. Varios de los primeros papas estaban casados, y algunos de ellos, en estos primeros siglos, son descendientes de papas anteriores. Los miembros de la jerarquía adquieren en general el nombre de «clérigos», y gobiernan e instruyen a los simples fieles o «laicos». Un lugar especial, en las primitivas comunidades, está ocupado por los llamados «carismáticos», es decir, simples fieles no pertenecientes a la jerarquía pero dotados de dones especiales, sobrenaturales, como el don de las lenguas (lingüistas), de la profecía (profetas) y de la enseñanza (doctores). En el sucesivo desarrollo de las iglesias, mientras los «carismáticos» irán desapareciendo poco a poco, adquirirán mayor importancia la figura del obispo y, por tanto, la organización interna de las comunidades se irá centralizando cada vez más.
Apologías de Justino.
Gracias a JUSTINO el Filósofo, se poseerá una descripción fidedigna de las celebraciones solemnes de la Eucaristía en el siglo II. Lo primero se leían trozos de las Sagradas Escrituras, se cantaban himnos y se hacían oraciones colectivas por los creyentes, los gobernantes y por todos los hombres. A la oración precedía una alocución del obispo o del sacerdote. La segunda parte de la ceremonia consistía en la consagración, y la tercera en la distribución de la sagrada comunión a los presentes y en llevarla también a los ausentes. De ordinario se recibía la comunión bajo las dos especies, pero podía también comulgarse bajo la sola especie de pan, como sucedía, por ejemplo, en tiempos de persecución, en que los fieles llevaban las especies sagradas consigo a sus propias casas. Aún no había en este tiempo iglesias, es decir, edificios exclusivamente destinados al culto divino.
Aparecen una serie de sectas gnósticas, conocidas históricamente como ofitas.
Aparecen -alrededor de la fecha- una serie de sectas gnósticas, conocidas históricamente como ofitas, que veneran a la serpiente satánica del Génesis puesto que consideran que ha aportado la gnosis o conocimiento al hombre. Algunos de sus aspectos pervivirán en el luciferismo, el ocultismo y el satanismo.
Carta de POLICARPO, en la que hace referencia a las siete cartas de Ignacio de Antioquía.
Carta de POLICARPO, obispo de Esmirna, en la que hace referencia a las siete cartas de Ignacio de Antioquía, martirizado el año 117. POLICARPO, utiliza la palabra «católico» en ambos sentidos: tres veces con el significado de iglesia universal y una vez con el sentido de auténtica. Se reconoce como «Obispo de la Iglesia Católica de Esmirna.»
Fallece el papa PÍO I. La tradición afirma que sufrió martirio.
Fallece el papa PÍO I. No se sabe nada de su episcopado. La tradición, bastante tardía, afirma que sufrió martirio.
ANICETO -papa- (155-166). Destacará en el pontificado de ANICETO su entrevista con POLICARPO.
ANICETO -papa- (155-165). Destaca en el pontificado de ANICETO su entrevista con POLICARPO, obispo de Esmirna quien, unos meses antes de su muerte, se traslada a Roma para tratar con el papa diversos temas que preocupan a la Iglesia de Oriente, en especial el de la fecha en que debe celebrarse la fiesta de Pascua. En efecto, al principio la fiesta de Pascua sólo se celebraba por los cristianos de Oriente, contentándose los de Occidente con la “fracción del pan” cada domingo. En todo caso, en estas fechas, todos los cristianos celebraban la Pascua, pero estaban divididos en cuanto a la fecha precisa. En algunas provincias de oriente, los cristianos conservaban el día de la Pascua judía. En todos los demás lugares se eligió el domingo siguiente a la fiesta judía. Es muy estimado el testimonio de POLICARPO, porque ha conocido a Juan, discípulo directo de JESÚS. El hecho de que constituye una especie de eslabón con los apóstoles y con Cristo, explica, por ejemplo el deseo del papa ANICETO de entrevistarse con él.
Fallece Policarpo quemado en una hoguera durante el gobierno del emperador ANTONINO PÍO.
Fallece POLICARPO quemado en una hoguera durante el gobierno del emperador ANTONINO PÍO poco después de regresar de Roma tras su visita al papa Aniceto.

