Consolidación del golpe de Estado del día anterior (18 brumario). Ante la oposición del Consejo de los Quinientos, Luciano Bonaparte hace desalojar el consejo. Napoleón queda investido de poderes absolutos. Es el fin de la Convención, y el camino está abierto ante el dictador para convertirse en emperador.

Cuando en la fecha se efectúa la primera reunión de los tres cónsules en Luxemburgo, NAPOLEÓN ocupa la presidencia de un modo tan natural que los colegas nada se atreven a decir. Presencian tranquilamente su actitud, como presencian un panorama de los Alpes. NAPOLEÓN, en efecto, es nombrado primer cónsul. Bonaparte mantiene un control absoluto, tanto del poder ejecutivo, como del legislativo, y todos los que tienen algún cargo en el gobierno, deben de rendir cuentas de su actuación a NAPOLEÓN. De hecho NAPOLEÓN gobierna como un verdadero dictador. Los otros dos cónsules están dominados por él y no cuentan.

Se aprueba, en la fecha, una nueva Constitución, y NAPOLEÓN dirige una carta a todos los soberanos europeos, formulando deseos de paz. A medida que Francia se va rehaciendo y ensanchando su influencia, las grandes potencias europeas desencadenan contra ella una serie de ofensivas que NAPOLEÓN de momento supera victoriosamente.

JORGE III de Gran Bretaña rechaza la paz que le propone NAPOLEÓN

Su ambición y la popularidad que ha alcanzado NAPOLEÓN como consecuencia de la pacificación de Francia, le permiten transformar el Consulado decenal en Consulado vitalicio. La pacificación ha sido conseguida merced a la gran operación diplomática puesta en marcha por NAPOLEÓN, a través de su ministro Talleyrand, para neutralizar a la Segunda coalición. Consigue convencer al zar PABLO para que resucite la Liga de la Neutralidad Armada que comprende a Rusia, Prusia, Suecia y Dinamarca.

El ejército francés, abandonado en Egipto al mando del general Kléber, hace milagros para sobrevivir. A pesar de ser ampliamente inferior en número y estar desmoralizado por la falta de abastecimientos, ha batido en Heliópolis a un ejército turco y espera en El Cairo la ayuda que NAPOLEÓN, a causa del bloqueo inglés, en absoluto puede hacerles llegar.

El nuevo papa, PÍO VII, no alberga una preconcebida indisposición hacia NAPOLEÓN ni se muestra beligerante contra el orden político que el régimen francés pretende instaurar en los países de su órbita. Cuando era sólo obispo de Imola y el ejército francés penetró en los estados del norte de Italia y NAPOLEÓN creó con ellos la República Cisalpina, Chiaramonti aconsejó no resistir al poderoso invasor y predicó el sometimiento a los recientes señores. Su famosa homilía del día de Navidad de 1797 es clara en este sentido: el futuro papa hace en ella profesión de fe en los enunciados democráticos del nuevo gobierno y mantiene que una constitución de esta tendencia política no está en contradicción con los principios de la iglesia cristiana. Tampoco NAPOLEÓN siguió las tendencias anticlericales de las primeras fases de la revolución. En su pragmatismo político tiene bien presente que las creencias religiosas están muy enraizadas en el pueblo francés y que es provechoso para sus designios mantener una amistosa relación con los poderes eclesiásticos, en especial con el papa de Roma.

Austria en su guerra contra Francia, ha recuperado la mayor parte de italia y está ansiosa por hacerse con las últimas posesiones francesas. En efecto, un ejército austríaco al mando del brillante general barón von Melas ha llegado hasta Milán y ha vencido a Massena, enviado por NAPOLEÓN a detenerlo, obligándolo a refugiarse en Génova. Con los pasos alpinos guarnecidos y dejando parte del ejército para bloquear a Massena, von Melás llega hasta Niza en abril de 1800 y de esta manera aparece como el peligro más directo e inmediato. En esta situación, el genio militar de NAPOLEÓN produce su obra maestra en el plano táctico.

NAPOLEÓN cruza los Alpes en mayo de 1800. Es tarde para salvar a Génova. Pero en Marengo, a unos 80 km al norte de aquella ciudad, derrota, en la fecha, a los austríacos, y el noroeste de Italia vuelve a manos de BONAPARTE.

El mismo día de la victoria de Marengo por las tropas de ?APOLEÓN, Kléber, jefe de las fuerzas francesas en Egipto, es asesinado por un joven musulmán, por lo que después de este suceso, el fin es sólo cuestión de tiempo. Kléber es sustituido, en la fecha, por el general Menou, un pintoresco personaje que ha tomado a una egipcia por esposa y se ha convertido al Islam.