Los castellanos invaden el reino de Aragón y asolan tierras y aldeas. En algunos casos la destrucción es de tal calibre que ciertas poblaciones arrasadas entre 1359 y 1363 jamás volverán a poblarse. Otras, como Tarazona (donde la catedral sirve como establo a los caballos de los castellanos) o como Cariñena (cuyos hombres son mutilados de orejas y nariz por su enconada resistencia a los castellanos) sufren terriblemente. Una vez más, esta guerra pone de relieve el egoismo de la nobleza aragonesa y su desinterés por los asuntos del reino. Mientras las villas, ciudades y aldeas de la frontera occidental se desangran ante la ofensiva castellana, los nobles impiden o dilatan que las Cortes acuerden recursos extraordinarios para hacer frente a esa guerra, la Guerra de los Dos Pedros. El conflicto entre ambos monarcas -Pedro I de Castilla y Pedro IV de Aragón- se encuadra dentro de otros mayores contemporáneos como la Primera Guerra Civil Castellana (1351-1369) y la guerra de los Cien Años (1337-1453).
PEDRO I el Cruel (Rey Corona de Castilla y León) (1350-1369)
Total de piezas: 47
Pedro I de Castilla, llamado en la posterioridad «el Cruel» por sus detractores y «el Justo» o «el Justiciero» por sus partidarios, fue rey de Castilla desde el 26 de marzo de 1350 hasta su muerte
La tregua termina. Enrique de Trastámara inicia la ofensiva atacando Murcia. Pedro I contraataca.
La tregua termina. ENRIQUE de Trastámara inicia la ofensiva atacando tierras de Murcia. PEDRO I el Cruel replica con un ataque naval contra Guardamar que representa el inicio de la presencia castellana en el Mediterráneo. La lucha sigue en Soria y la Rioja cuando, en 1359, se inicia otra ofensiva naval castellana que llega hasta Barcelona.
ENRIQUE de Trastámara, resulta vencedor en la batalla de Araviana (La Rioja).
ENRIQUE de Trastámara, resulta vencedor, en la fecha, en la batalla de Araviana (La Rioja). En el aspecto militar no tiene mayores consecuencias porque la gran superioridad castellana permite a Pedro I reorganizar rápidamente sus fuerzas de frontera, mientras que el rey aragonés, por temor a una acometida del potente ejército castellano, no aprovecha la ventaja momentánea que le da la victoria y prefiere mantener sus posiciones en torno a Tarazona. Donde sí que tiene importantes consecuencias es en la moral castellana. No por la derrota en sí, sino por la desaparición en la batalla del hombre fuerte del reino, Juan Fernández de Hinestrosa, que es el único que contaba con la total confianza de PEDRO I. El rey pasa los siguientes meses buscando culpables de la derrota y muerte de su valido, sin saber ocupar los cargos importantes del gobierno que han quedado vacantes. Por otra parte, muchos nobles fieles hasta ese momento a PEDRO I, temen que el rey les señale como culpables de la derrota y comienza un constante goteo de nobles a engrosar las filas de los rebeldes exiliados en Aragón.
ENRIQUE inicia una nueva ofensiva confiando en un levantamiento general contra Pedro.
En marzo de 1360 -después de que Tarazona se entregara a los aragoneses- ENRIQUE inicia una nueva ofensiva basada en la confianza de que servirá de detonante para un levantamiento general que se ha estado impulsando desde Aragón.
Los aragoneses fuerzan la celebración de conversaciones con los castellanos -Paz de Terrer- donde se firma la paz.
Los aragoneses fuerzan entonces la celebración de conversaciones, que tienen lugar en Terrer (Zaragoza), donde se firma la paz el 13 de mayo de 1361. La expulsión de los exiliados castellanos, exigida por el tratado, significa una nueva matanza de PEDRO I. ENRIQUE de Trastámara tiene que refugiarse en Francia.
ALFONSO, hijo de PEDRO I y de MARÍA de Padilla, es declarado sucesor al trono.
Se produce entonces la muerte de MARÍA de Padilla ¿asesinada?, y PEDRO I que hace poco ha dado muerte con sus propias manos a Muhammad, rey de Granada. Reúne a las Cortes en dicha ciudad. En ellas declara que ha contraído matrimonio con MARÍA de Padilla, según una peculiar forma posible en aquella época, y, con ello, consigue que ALFONSO, hijo suyo y de MARÍA de Padilla, sea declarado sucesor al trono. Conseguido esto rompe el compromiso matrimonial de ALFONSO con LEONOR de Aragón, boda que consentía para conseguir una legitimación para su hijo que ahora ya la tiene.
JAIME IV, aliado con ENRIQUE de Trastámara, combate contra Aragón.
JAIME IV, ayuda a PEDRO el Cruel de Castilla y cae prisionero en Burgos, y aliado después con ENRIQUE de Trastámara, combate contra Aragón, con el deseo de recuperar su reino, del que sólo ha sido rey titular, aspiración que no logró ver realizada.
Castilla y Navarra, acuerdan su unión para luchar contra Aragón y contra Francia.
La actuación política de CARLOS II el Malo en Francia le lleva a ser mal visto en este país y, en consecuencia, se traslada a Pamplona. Poco después, en la fecha, PEDRO I el Cruel de Castilla y CARLOS II se reúnen en Estella. Ambos acuerdan su unión para luchar contra Aragón y contra Francia. En virtud de esta alianza, Navarra ataca Salvatierra, Puerta y Esco y contingentes suyos forman parte del ejército de PEDRO I que lucha contra Aragón.
Después de tomar diversos castillos, PEDRO I entra triunfalmente en Calatayud, que ha debido rendirse.
El ataque castellano es fulgurante y, después de tomar diversos castillos, el 29 de agosto PEDRO I entra triunfalmente en Calatayud, que ha debido rendirse. Tras pasar el invierno en Sevilla, PEDRO I reemprenderá la ofensiva con Zaragoza como objetivo.
PEDRO I dispone que la Corona de Castilla sea heredada por su hija BEATRIZ.
Como consecuencia de la muerte de su único hijo varón ALFONSO el pasado 19 de octubre, PEDRO I dispone que el reino sea heredado por su hija BEATRIZ y, en caso de muerte, por CONSTANZA e ISABEL, sucesivamente. Tal disposición testamentaria es reconocida por todos los componentes de la Corte de PEDRO I, que son obligados a firmar un documento en este sentido.