Japón advierte a Corea del Norte que si sigue adelante con el ensayo de un nuevo misil balístico llevarán el caso al Consejo de Seguridad de la ONU para imponer sanciones al régimen comunista. Pyongyang ha mostrado su disposición a incrementar sus medios defensivos para afrontar cualquier agresión externa, toda vez que se ha especulado sobre el ensayo inminente de un nuevo misil. El portavoz de la Casa Blanca, Tony Snow, ha recordado que “los norcoreanos decidieron en 1999 que establecerían una moratoria sobre este tipo de prueba. Esperamos que la mantengan”.

El Consejo de Derechos Humanos celebra su sesión inaugural en Ginebra entre discursos que llaman a enmendar los errores de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, de la cual es heredero. Considerado un hito en el proyecto de reformas de las Naciones Unidas de su secretario general, Kofi Annan, este organismo debe ser más activo que el anterior y a trabajar en un marco de multilateralismo en defensa de los derechos humanos y las libertades individuales en todo el mundo. Annan, en la apertura de los debates, instó a los miembros del Consejo a no permitir que éste quede atrapado en “maniobras mezquinas” y a “pensar siempre en aquellos cuyos derechos son negados”.

Ultimátum del Consejo de Seguridad para la suspensión en un mes del programa nuclear.

Al régimen comunista de Corea del Norte los misiles que ha disparado el pasado miércoles le han salido por la culata. El destructor Mustin, capaz de detectar y pulverizar misiles, llega a Japón para reforzar la flota de EEUU. en las costas asiáticas del Pacífico. Y Japón, el gran aliado de EEUU. en la región, ha presentado un proyecto de resolución al Consejo de Seguridad de la ONU en el que pide sanciones para Corea del Norte, a cuyo régimen urge a que vuelva a la mesa de negociaciones sobre su controvertido programa nuclear.

El Consejo de Seguridad de la ONU aprueba por unanimidad una resolución, elaborada por Japón, para condenar y sancionar a Corea del Norte por el reciente lanzamiento de misiles, y exigir que retorne a las negociaciones a seis bandas. En una reunión del Consejo de Seguridad, y tras intensas y complicadas negociaciones, sus quince miembros votaron a favor de la medida, patrocinada por ocho países, entre ellos EEUU., Reino Unido y Francia. En el documento, se condena a Pyongyang por el lanzamiento de misiles de prueba el pasado 5 de junio, y se le exige que suspenda todos sus programas de misiles balísticos, de acuerdo con la declaración del 19/9/2005. También se pide a los estados miembros, de acuerdo a sus legislaciones nacionales, que “ejerzan vigilancia y prevengan la transferencia de materiales y tecnología que pueda ser utilizada por Corea del Norte para la fabricación de misiles y armas de destrucción masiva”.

Apenas minutos después de que se votara la resolución de la ONU contra Corea del Norte, el embajador de este país en Naciones Unidas, Pal Gil Yon ha rechazado “contundente y totalmente” los términos de la misma y ha afirmado que el régimen norcoreano seguirá su política de efectuar pruebas de lanzamientos de misiles como ejercicio para comprobar el nivel de su autodefensa.

Israel acepta el despliegue de una fuerza internacional temporal en el sur de Líbano, de acuerdo con la iniciativa de las Naciones Unidas, pero anuncia que exigirá limpiar el país vecino de misiles e impedir el rearme de Hezbollah. La ministra de Exteriores, Tzipi Livni, declaró ayer que la fuerza de unos dos mil cascos azules desplegada en el sur de Líbano “no es efectiva ni relevante”, por lo que Israel exige adaptarla a la nueva circunstancia. La ONU pretende agrandar su fuerza en Líbano. Varios países han empezado a sugerir participar en ella, entre ellos Indonesia, que propone enviar 450 hombres. El Gobierno de Olmert no aceptará una tregua en la que se retorne a la situación anterior a la lucha, ya que, según dice, eso sería una victoria para Hezbollah. El ejército pide al Gobierno que le permita actuar una semana más, o al menos hasta el fin de semana, para seguir atacando infraestructuras chiíes. Altos oficiales creen que la ofensiva durará unos días más. El general Gadi Eizencot afirmó que “el Gobierno no pone una fecha límite”.

Los peores temores sobre el desarrollo de la primera reunión entre los albaneses y los serbios de Kosovo sobre el futuro estatuto de esta provincia se confirmaron. Al final del primer día de reuniones en Viena no se registró ningún movimiento. Las dos delegaciones se acusaron de no querer negociar. Asu llegada a Viena, el actual presidente de Kosovo y sucesor del legendario Ibrahim Rugova, Fatmir Sejdiu, repitió en la capital austriaca que “la única solución realista” es la independencia. El presidente kosovar anunció que la población de la actual provincia espera tener la independencia antes de final de año. Su interlocutor, el presidente de Serbia, Boris Tadic, le reprochó su falta de disposición a discutir el proyecto serbio de un estatuto de “amplia autonomía” para Kosovo. Pero lo importante es que, por primera vez desde que en 1999 acabó la guerra de la OTAN contra lo que quedaba de Yugoslavia, se reúnen los presidentes y primeros ministros de Serbia y Kosovo para discutir el indefinido estatuto prometido por la ONU en la resolución que puso punto final al conflicto. La represión serbia en Kosovo en su última fase costó la vida a 10.000 civiles albaneses y causó una ola de 800.000 fugitivos. Ahora 17.000 soldados de la OTAN garantizan la seguridad de la provincia.

Después de cinco semanas de un constante intercambio de misiles, Líbano e Israel recobran la tranquilidad al verificar cada parte el primer día del alto el fuego acordado por la ONU (resoluciones 1559 y 1701). Decenas de miles de libaneses regresan a sus hogares, mientras que cada bando -Hezbollah y el Gobierno de Israel- trata de persuadir al mundo de haber emergido victorioso de cinco semanas de conflicto. Pero muchos libaneses sienten que esta guerra no ha concluido. Los habitantes del sur del río Litani, no pueden volver por la prohibición israelí de circular motorizados por su territorio y por la destrucción de sus puentes y carreteras. De hecho, continúa el bloqueo aéreo y marítimo impuesto por Israel al iniciarse esta batalla con Hezbollah, y no ha sonado todavía la hora de la verdad. Desde un punto de vista político y militar, la situación interior se ha hecho más ambigua y más compleja. La pregunta es ¿quién desarmará ahora a Hezbollah?. Porque la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU así lo exige

El día 31 termina el plazo fijado por el Consejo de Seguridad para que Irán paralice su plan de enriquecimiento de uranio. Ignorando los incentivos económicos occidentales, Teherán ha respondido hoy con un ambiguo documento en el que ofrece más diálogo pero no se mueve de sitio, lo que certifica el desafío iraní. El Consejo de Seguridad de la ONU podrá, pues, adoptar sanciones económicas.