Incorporación al reino de Prusia del Ducado de Sajonia-Luxemburgo.

En plena Segunda Guerra Mundial, los Países Bajos, Bélgica y Luxemburgo pactan la supresión de los derechos de aduana en sus fronteras comunes, además de fijar tasas comunes para las mercancías provenientes del exterior de la unión. El 5 de septiembre de 1944, se firma el tratado en Londres, por el que se constituye el Benelux, en donde los tres gobiernos se encuentran exiliados. La entrada en vigor del tratado se preve para el 1 de enero de 1948, con el ánimo de poder tener un tiempo (tres años) para la reconstrucción de cada uno de los países. El tratado del Unión Aduanera de Benelux, tiene además como vocación la libre circulación de personas, de bienes y de servicios.

Tras el final de la guerra mundial, el alejamiento de las posturas entre los integrantes de la alianza vencedora, la Unión Soviética por un lado y las democracias occidentales, por otro, se ha hecho patente. El corte entre el Este y el Oeste queda plásticamente expuesto por CHURCHILL al enunciar: “Un telón de acero ha descendido sobre Europa desde el Báltico al Adriático”. Polonia, Bulgaria, Rumanía y Yugoslavia, entrados en la órbita soviética, se convirtieron en “democracias populares”. En respuesta a la creación del Kominform, surge, en la fecha, la Unión Occidental, precursor de la OTAN y establecida por Francia, Reino Unido, Bélgica, Holanda y Luxemburgo mediante el Tratado sobre Cooperación Económica, Social y Cultural y Autodefensa Colectiva, conocido como el Tratado de Bruselas, y que aspira a reconstruir e integrar la Europa de la posguerra bajo un enfoque omnicomprensivo de todos los campos esenciales de su seguridad. Comienzo, en la fecha, de las negociaciones en Washington, y conclusión del borrador del texto del tratado en el mes de marzo de 1949.

La unión aduanera del Benelux (Bélgica-Holanda-Luxemburgo), acordada por los gobiernos exiliados en 1944, es efectiva desde 1948. Primer antecedente de la Unión Europea.

Tratado de Bruselas, celebrado entre Bélgica, Francia, Gran Bretaña, Luxemburgo y los Países Bajos para prestarse mutuamente ayuda militar si alguno de estos cinco estados sufre un ataque armado en Europa. El tratado prevé la celebración de conferencias y consultas periódicas, y algunos lo consideran como la génesis de la CEE.

Se firma en Washington, el Tratado del Atlántico Norte o Alianza Atlántica, quedando fundada la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN / NATO) con una voluntad muy concreta de mantener la cohesión entre las dos orillas del Atlántico y hacer frente al peligro ideológico y militar que representa la Unión Soviética. Los países fundadores son: Bélgica, Canadá, Dinamarca, Francia, Islandia, Italia, Luxemburgo, Holanda, Noruega, Portugal, Gran Bretaña y los EEUU. Más tarde se adherirán Grecia y Turquía (1952) y Alemania (1955).

El resultado de la propuesta lanzada por Robert Schuman (Ministro de finanzas de Francia) en 1950, surge en 1951. En efecto, Francia, la RFA, Italia, Bélgica, Holanda y Luxemburgo (“los seis”), firman el Tratado de París por el que se crea la Comunidad Europea del Carbón y el Acero (CECA). Jean Monnet (Francia), será el presidente de la Alta Autoridad y Paul-Henri Spaak (Bélgica) el de la Asamblea; dos de las instituciones de la Comunidad, junto a un Consejo Especial de Ministros y un Tribunal de Justicia.

Francia, la RFA, Italia, Bélgica, Holanda y Luxemburgo, firman en París, el Tratado de la Comunidad Europea de Defensa (CDE) el llamado “Ejército europeo”. Como afirman en el preámbulo del mismo, “conscientes de salvar así una etapa nueva y esencial en el camino para la formación de una Europa unida”.

Se celebra la Conferencia de Messina, en la que los Gobiernos de Francia, Alemania, Italia, Bélgica, Holanda y Luxemburgo “estiman que hay que proseguir el establecimiento de una Europa unida mediante el desarrollo de instituciones comunes, la fusión progresiva de las economías nacionales, la creación de un mercado común y la armonización progresiva de las políticas sociales”.

Países firmantes en 1957 de los Tratados de Roma, por tanto, cofundadores de la CEE, la “Europa de los Seis”: Holanda, Bélgica, Luxemburgo, Francia, Italia y RFA.