Fallece ROBERTO del Palatinado, rey de romanos.

En 1413 las relaciones entre Juan XXIII y Ladislao I (Rey de Nápoles)(1386-1414) se deterioran hasta tal punto que este invade los territorios papales obligando a Juan a huir con sus cardenales y refugiarse en Florencia donde cuenta con la protección del rey de romanos SEGISMUNDO a cambio de la convocatoria de un nuevo concilio que acabe con el cisma y que habrá de celebrarse en Constanza (Sudoeste de Alemania) en 1414, bajo la presidencia de Juan XXIII. El Papa acepta esta convocatoria aunque a regañadientes ya que SEGISMUNDO se convierte por ello en el artífice del Concilio.

El 4 de noviembre de 1414 se inicia el Concilio de Constanza (1414-1418). El Concilio se propone: 1) Dar fin al cisma de Occidente; 2) Impugnar las doctrinas heréticas propugnadas por Juan HUSS, John Wyclef y Jerónimo de Praga y 3) La reforma de la Iglesia. La sesión inaugural es presidida por JUAN XXIII. Pronto empezará a tomar un rumbo contrario a la pretensión de éste de ser nombrado único pontífice de la cristiandad.

El concilio de Constanza (1414-1418) (16º Concilio Ecuménico), celebra, en la fecha, la primera sesión con asistencia de 3 patriarcas, 29 cardenales, 33 arzobispos, 150 obispos, más de 100? abades, 50 priores y 300 doctores y canonistas. El número de clérigos que asiste con su servidumbre alcanza la cifra de 18.000. Asiste también el rey de romanos SEGISMUNDO, por ser el primer concilio que se celebra en territorio alemán, gran número de representantes de otras naciones, nobles y magnates, que hacen elevar a cien mil los asistentes al concilio, cifra impresionante para una población como Constanza en pleno siglo XIV. Por otra parte, a lo largo de los cuatro años que durará el Concilio llegarán a Constanza cientos de meretrices siguiendo a los participantes masculinos. (En 1993, en el extremo del embarcadero que limita el puerto de Constanza en su parte norte, se ha levantado una enorme figura femenina la “Imperia” que viene a representar el poder de las meretrices de 1414.)

El emperador SEGISMUNDO, como rey de Bohemia, Hungría y Croacia, se mantiene muy apegado a sus propias posesiones dinásticas. El movimiento husita convulsiona Bohemia, al combinar los sentimientos tradicionales checos con el deseo de reformar en profundidad la Iglesia. SEGISMUNDO invita al reformador Jan HUS para exponer sus puntos de vista (bajo la protección imperial) en el Concilio de Constanza.

El emperador SEGISMUNDO concede a la Confederación de los Ocho Cantones (Helvética) el derecho de conquista sobre Argovia austriaca, perteneciente al Archiduque de Austria declarado rebelde. Los confederados ocupan el territorio y lo gobernarán mancomunadamente.

SEGISMUNDO hipoteca Brandeburgo que es adquirido por su acredor Federico de Nuremberg, Hohenzollern.

En 1415 la ciudad de Berlín es elegida capital del estado de Brandeburgo, a la sazón un principado que forma parte del Sacro Imperio Romano Germánico.

Al conocer JUAN XXIII que en el Concilio de Constanza se le va a someter a un juicio, tras el que muy probablemente seguirá su deposición se disfraza de mozo de mula y, en la fecha, ayudado por su amigo FEDERICO IV Bolsa Vacía, duque de Tirol, huye de Constanza con el intento de revocar su condenación y provocar un movimiento que le sea más favorable. La autoridad imperial se interpone y queda arrestado. En vista de la deserción del Papa, la asamblea, en su sesión V, decide permanecer reunida y decreta la superioridad de la autoridad conciliar sobre la pontificia.

En el Concilio de Constanza, el juicio contra JUAN XXIII se celebra y resulta el pontífice acusado de simonía, malversación de los bienes eclesiásticos y desleal administración en los asuntos tanto espirituales como temporales. En la sesión XII, en la fecha, el Concilio le depone. JUAN XXIII recibe la sentencia humildemente, es excomulgado y queda en prisión durante cuatro años.