PEDRO el Grande, inmediatamente después de su coronación como rey de Sicilia, se dirige hacia Messina para levantar el cerco al que la han sometido las tropas de CARLOS de Anjou. En la fecha, PEDRO el Grande consigue el dominio total de la isla de Sicilia al ocupar Messina. PEDRO el Grande es acogido con entusiasmo popular, tanto porque es considerado el heredero de la tradición germánica como porque ha venido a la isla llamado por el parlamento siciliano. Con la conquista de Sicilia, el rey se venga de lo que CARLOS I de Anjou ha hecho con el territorio de Provenza, y busca de centralizar en Sicilia una política mediterránea de amplio alcance conjuntando los intereses de la monarquía y la burguesía catalana.
CORONA DE ARAGÓN (1162-1716)
Total de piezas: 636
La Corona de Aragón englobaba al conjunto de territorios que estuvieron sometidos a la jurisdicción del rey de Aragón, de 1162 a 1716
Las galeras catalano-sicilianas derrotan a la flota provenzal delante de Nicotera.
Las tropas angevinas se repliegan en Reggio de Calabria y las galeras catalano-sicilianas derrotan a la flota provenzal, en la fecha, delante de Nicotera. Para asegurarse plenamente el dominio de la isla, los catalanes se apoderan también de Reggio di Calabria, Seminara y algunas otras poblaciones de la península. Desde el punto de vista de los sicilianos, PEDRO es visto como el restaurador de las viejas libertades y de los derechos propios de la tradición siciliana, pero su tarea no será nada fácil, porque también ha de ganarse los exponentes políticos de la isla que no están dispuestos a sacrificar la propia libertad al imperialismo aragonés. Pero la sangrienta guerra de las «Vísperas sicilianas» solamente servirá para sustituir un dominio represivo por otro de la misma concepción, pero que durará más de tres siglos. Los soberanos aragoneses copian la misma estructura de gobierno de los Anjou. Favorecen a los nobles aragoneses y catalanes, dándoles a éstos todos los feudos sustraídos a los franceses. Por lo tanto, no faltan las reacciones de la vieja nobleza siciliana que se ve amenazada en las propias prerrogativas. Tales acontecimientos generarán caos, anarquía y guerra interna, que tendrá como protagonistas a las familias de la más antigua nobleza.
El papa MARTÍN IV pone al reino de Sicilia en entredicho y excomulga al rey PEDRO el Grande.
El papa MARTÍN IV, aliado de los Anjou, pone, en la fecha, al reino de Sicilia en entredicho debido a su comportamiento ante PEDRO el Grande y excomulga al rey.
PEDRO III autoriza la instalación del «Consolat de Mar» en Valencia.
PEDRO III autoriza la instalación del «Consolat de Mar» en Valencia, institución medieval que con precedente en el siglo XI en las costas italianas, esta encargada de administrar justicia por delegación real en materia mercantil y en asuntos marítimos. Ha sido creado en Barcelona en 1282.
JAIME II el Justo empieza siendo el lugarteniente de su padre en el reino de Sicilia.
Las primeras actuaciones políticas de JAIME II el Justo están estrechamente ligadas al reino de Sicilia, primero como lugarteniente de su padre PEDRO III el Grande al lado de su madre CONSTANZA (1283-1286)
El papa ofrece al rey de Francia, los reinos de Pedro el Grande para un hijo que no sea el heredero.
El papa MARTÍN IV, ofrece -en la fecha- al rey de Francia, los reinos de PEDRO el Grande para un hijo que no sea el heredero.
El Papa Martín IV depone formalmente a Pedro el Grande como rey de Aragón.
El Papa MARTÍN IV depone formalmente, en la fecha, a PEDRO III el Grande como rey de Aragón. El rey FELIPE III de Francia aprovecha el interdicto papal para invadir los territorios del rey de Aragón al norte de los Pirineos, incumpliendo el tratado de Corbeil.
PEDRO el Grande se ve obligado a dejar Sicilia y volver a la Península. Establece condiciones de herencia.
Mientras, en la fecha, PEDRO el Grande se ve obligado a dejar Sicilia y volver a la Península ya que sus reinos están amenazados por la cruzada promovida por el rey de Francia y el Papa. Por ello, PEDRO asigna la regencia a su mujer, la reina CONSTANZA, que se instala en Sicilia acompañada de sus hijos JAIME y FEDERICO. Al lado de la reina quedan el gran canciller Joan de Pròixida, el gran almirante Roger de Llúria y el gran justicia Alaimo de Lentini. PEDRO aprovecha la ocasión para establecer que cuando él muera, las coronas de Aragón y de Sicilia han de separarse. La primera ha de corresponder a su primogénito ALFONSO, y la otra, a su segundo hijo, JAIME.
PEDRO declara «felón» a Carlos de Anjou, ya que no ha cumplido su palabra.
CARLOS I de Anjou ha aprovechado la ocasión para hacer acusaciones de traición y de deslealtad contra PEDRO el Grande. Éste ha optado por un desafío personal. El acuerdo a que se ha llegado es que los dos monarcas, asistidos cada uno de ellos por cien caballeros luchen el 1 de junio de 1283 en Burdeos, ciudad que se encontraba bajo la soberanía del rey Eduardo I de Inglaterra y que para este fin parecía, por tanto, terreno neutral. Pero mientras tanto, Eduardo I se ha desentendido del tema y ha puesto bajo el dominio del rey de Francia, sobrino de CARLOS de Anjou, Burdeos y toda la Gascuña. Por ello, y porque PEDRO se entera de que CARLOS de Anjou le prepara una trampa para encarcelarlo, considera roto el pacto caballeresco. Sin embargo, PEDRO quiere demostrar su valor personal y disfrazado de mendigo entra en Burdeos, recorre el palenque y hace levantar un acta notarial del hecho. Al no aparecer su rival por ninguna parte, PEDRO, conforme a las leyes de caballería, declara «felón» al príncipe francés. Cuando CARLOS de Anjou, que esperaba a PEDRO con un fuerte ejército, se entera del hecho, ya PEDRO está fuera de su alcance.
PEDRO el Grande de la Corona de Aragón conquista el castillo de Malta, la isla de Gozzo y la ciudad de Lipari.
Termina el encarnizado combate naval iniciado el día anterior frente al puerto de la isla de Malta; PEDRO el Grande de la Corona de Aragón conquista el castillo de Malta, la isla de Gozzo y la ciudad de Lipari. La acción militar angevina es anulada por la victoria naval de ROGER de Llúria en Malta que pone en manos de Catalunya todos los puntos que dominan los caminos del Mediterráneo.

