En principio, el Parlamento inglés ha ofrecido la corona a MARÍA y la regencia a GUILLERMO. Pero cuando este último insiste en su deseo de ser rey, se acuerda -caso único en la historia de Inglaterra- que GUILLERMO III y MARÍA II de Inglaterra compartan la corona. Su reinado suele designarse como época de Guillermo y María (1689 – 1702). Formaba parte del acuerdo la promulgación de una declaración de derechos en la que se ponían en claro qué derechos asistían al Parlamento. Inglaterra se convierte así en una monarquía limitada, pues el poder regio tiene unas cortapisas cuidadosamente explicitadas. El advenimiento, pues, de la casa de Orange pone fin a las luchas dinásticas y abre para Inglaterra un período de paz religiosa, política y social que permite al país convertirse en breve tiempo en la primera potencia comercial e industrial del mundo. Y sucede esto en una época en la que toda Europa sigue el modelo de LUIS XIV y se vuelve absolutista. Así concluye la última, incruenta y Gloriosa Revolución inglesa de 1688.

La transformaciones político-institucionales de Inglaterra se completan en el terreno religioso con la aprobación del “Acta de tolerancia” (mayo de 1689), que supone en la práctica, aunque con algunos condicionamientos para los no anglicanos, la libertad religiosa, que se concede a los grupos protestantes, pero de la que son excluidos no obstante los católicos.

A pesar de que JACOBO II lucha con denuedo, es derrotado -en la fecha- en la batalla de Boyne, al norte de Dublín. Así pierde definitivamente su oportunidad y JACOBO II Estuardo, marchará -en la fecha- al exilio francés. Desde entonces, los irlandeses protestantes del Norte, que han apoyado a GUILLERMO III, de la casa de Orange, han sido conocidos como “los de Orange”. (Cada año el 12 de julio la Orden de Orange celebra esta victoria). GUILLERMO desbarata, pues, el último intento de restauración católica y trae consigo el color naranja que hoy sigue distinguiendo a quienes defienden la supremacía protestante en el Ulster unido para siempre a Gran Bretaña.

En el interior del país, Escocia viene manifestando inquietud, y los habitantes de las tierras altas han apoyado a Jacobo II. Se les da de plazo hasta el 31 de diciembre de 1691 para que presten juramento de adhesión a Guillermo, y todos se avienen a ello.

En Escocia, Entre Kihgshouse y Loch Leven se encuentra el valle de Glen Coe. Todavía se percibe una sobrecogedora frialdad en este valle, rodeado de escarpadas montañas, escenario de un episodio atroz de la historia de Escocia: la matanza de Glen Coe. En efecto, el 13/2/1692, los hombres del clan Campbell mataron a 38 miembros del clan Macdonald, sin importarles que fueran mujeres, niños o enfermos. GUILLERMO III consintió esta carnicería con la esperanza de que sirviera para despejar toda duda respecto a la legitimidad de la ascensión de la reina MARÍA al trono en vez de JACOBO VII (II de Inglaterra). Pero lo peor es que fue un quebrantamiento de las leyes de la hospitalidad de las Highlands, porque los Campbells estuvieron bebiendo y comiendo con los Macdonalds unas horas antes. Después los asesinaron mientras dormían.

El 29 de mayo de 1692, la flota francesa ataca las fuerzas combinadas de Inglaterra y los Países Bajos en La Hogue, cerca de Cherburgo, y es literalmente deshecha. Y es que LUIS XIV no ha entendido la importancia de la fuerza naval. De hecho, Colbert muere en 1683, y desde entonces LUIS no vuelve a preocuparse de la marina. Este episodio pone fin al intento de Francia de convertirse en una potencia naval dominante, y también malogra un vago plan de Luis XIV de desembarcar un ejército en Inglaterra. (Luis XIV fracasa en el mismo propósito que Felipe II de España un siglo antes.)

Para ayudar a GUILLERMO III en la guerra contra LUIS XIV se ha fundado el Banco de Inglaterra. Este empieza a funcionar en la fecha. En diez días reúne 1.200.000 libras esterlinas. Esto significa que Inglaterra dispone de una fuente regular de ingresos y que es financieramente estable, a diferencia de otras naciones, incluida Francia, que siempre está rondando la bancarrota. Esta medida confiere a Inglaterra un enorme poder, pues así puede siempre financiar a otras naciones para que luchen por ella. Ahora GUILLERMO III emprende la organización de la resistencia contra LUIS XIV de Francia.

María II de Inglaterra muere sin descendencia en 1694, quedando Guillermo como único rey hasta su fallecimiento en 1702. El reinado de María II de Inglaterra es breve. Una epidemia de viruelas, que deja más de 1300 víctimas reconocidas, siembra de luto y dolor a todo el país, cobrando entre esas víctimas la vida de la Reina. Era el mes de diciembre de 1694, cinco años más tarde de su ascenso al trono.

Los comerciantes ingleses que llegan por primera vez a Cantón (Guangzou) a finales del siglo XVII, buscan las sedas y el té chinos y los canjean por plata.

LUIS XIV, rey de Francia, reconoce a GUILLERMO III como rey de Inglaterra