FRASES DE LA HISTORIA

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Los franceses son derrotados por el ejército hispano-inglés, en la batalla de San Marcial.


Los franceses son derrotados por el ejército hispano-inglés, en la batalla de San Marcial y se ven obligados a repasar definitivamente la frontera del Pirineo occidental. Sólo quedan unos restos del ejército francés en la parte oriental del Pirineo que lo traspasan unos meses después dándose por terminada la Guerra de la Independencia (Barcelona, sin embargo, seguia en poder del ejército francés). Wellesley, muy reacio al elogio, reconocerá que «en este triunfo los españoles se han portado como, los mejores soldados del mundo».

NAPOLEÓN hace su entrada en las Tullerías, en París, el día 20 de marzo por la noche.


NAPOLEÓN hace su entrada en las Tullerías, en París, el día 20 de marzo de 1815 por la noche. El periódico oficial, el «Moniteur», publica varias informaciones sobre los movimientos de Napoleón, y diez artículos a modo de editoriales, encabezados por diez famosos titulares. El tono de tales titulares va variando a medida que el Corso se acerca a París. Helos aquí por orden de aparición: «El antropófago ha salido de su escondite» «El ogro de Córcega ha desembarcado en el golfo Jean» «El tigre ha llegado a Gap» «El monstruo ha dormido en Grenoble» «El tirano ha atravesado Lyon» «El usurpador está a sesenta leguas de la capital» «Bonaparte avanza a pasos agigantados, pero jamás entrará en París» «Napoleón estará mañana bajo nuestros bastiones» «El Emperador ha llegado a Fontaineblau» «Su majestad Imperial hizo ayer su entrada en el Palacio de las Tullerías, en medio de sus fieles súbditos» (Estos titulares son distintos, aunque similares, según otras versiones)

NAPOLEÓN ha alcanzado la capital. Comienza el Imperio de los Cien Días.


NAPOLEÓN, en la fecha, ya ha alcanzado la capital sin pegar un solo tiro y sin perder un solo hombre. Comienza el Imperio de los Cien Días. Nadie quiere otra guerra en Francia. El país está exhausto. Los jóvenes necesitan trabajo y paz. Los hombres maduros, los que participaron en los triunfos de la Convención y el Consulado son ya demasiado viejos para retomar las armas. Tampoco NAPOLEÓN quiere la guerra. Pero Europa la exige. A las potencias representadas en el Congreso de Viena les llegan las noticias. De inmediato firman una declaración de apoyo al rey depuesto. Gran Bretaña, Prusia, Rusia y Austria se alían para poner en pie un ejército que llegará a aglutinar a más de 900.000 hombres con el objetivo de reinstaurarle en el trono. El duque de Wellington es designado jefe del mando supremo. Nace la Séptima y última Coalición que declara oficialmente la guerra no a Francia sino a Bonaparte. «Pues bien -dice en un arrebato de genio NAPOLEÓN- tendrán la guerra, pero seré yo quien dará el primer golpe». Es consagrado como rey de Francia y durante tres meses se prepara para la guerra. «Necesito una victoria. No puedo hacer nada antes de haberla logrado», dice NAPOLEÓN.

NAPOLEÓN, a pie, o a caballo, retrocede penosamente hasta llegar a París exhausto y enfermo.


NAPOLEÓN, a pie, a caballo, en su carroza maltrecha y por caminos inhóspitos, retrocede penosamente hasta llegar a París exhausto y enfermo ¿Quedará alguien en Francia dispuesto al sacrificio?. Las cámaras no le perdonan su derrota y sus propios ministros le exigen la abdicación. LA FAYETTE, con su enorme prestigio, acaba por inclinar la balanza en contra suya: «Durante más de diez años, tres millones de franceses han muerto por causa del orgullo y afán de poder de un hombre que todavía se empeña en luchar contra toda Europa. ¡Ciudadanos, vosotros no lo permitiréis!»

La derrota de NAPOLEÓN es definitiva. Waterloo ha sido el golpe de gracia a su carrera política.


NAPOLEÓN está solo. Su derrota es definitiva. Waterloo ha sido, realmente, el golpe de gracia a su carrera política, a su prestigio militar, a todos sus sueños de gloria. No quiere ser humillado por sus compatriotas. Una sola posibilidad: la benevolencia y la hospitalidad de los ingleses. En la fecha, se entrega a los ingleses y pide su protección. Ante la petición de protección solicitada por NAPOLEÓN a los ingleses, el gobierno británico contesta: «Sería incompatible con nuestros deberes para con el país y para con los Aliados de su Majestad dejar al general Bonaparte en condiciones de turbar nuevamente la paz de Europa».

El nombre de la República de Bolivia, constituye un homenaje al Libertador Simón Bolívar.


El nombre de la República de Bolivia, constituye un homenaje al Libertador Simón Bolívar, propuesto por el Presbítero Manuel Martín Cruz, en los siguientes términos: «Si de Rómulo, Roma; de Bolívar, Bolivia». La capital de la República fue denominada Sucre, en reconocimiento al Mariscal Antonio José de Sucre. Bolívar hasta ese momento no aceptaba de buen grado la independencia de Bolivia, debido a que le preocupaba su futuro, debido a que Bolivia se encuentra en el centro de Suramérica, y esto según Bolívar supondría que sería una nación acosada y que afrontaría futuras guerras, cuestiones que se cumplieron.

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El rey, firma un codicilo, en forma de decreto, que deroga la pragmática restableciendo la Ley Sálica.


FERNANDO VII sufre, en la fecha, un ataque de gota que pone en peligro su vida. Desde el mes de julio la corte se encuentra en el Real Sitio de La Granja de San Ildefonso. Ante las malas noticias de los médicos los partidarios del infante don CARLOS MARÍA ISIDRO de Borbón, hermano de FERNANDO VII, dan claras muestras de su alborozo y presionan sobre el rey presentándole el grave peligro que corren la reina y sus hijas si no deroga la pragmática sanción. El rey, firma un codicilo, en forma de decreto, que deroga la pragmática restableciendo la Ley Sálica, satisfaciendo así los intereses de su hermano CARLOS. Parece ser que el rey al restablecer la Ley Sálica ha sido muy influenciado por su ministro de Gracia y Justicia Francisco Tadeo de Carlomarde. Carlota, la hermana de la reina Cristina, se irrita sobremanera y propina a Tadeo un sonoro bofetón. La historia afirma que el ministro pronunció aquella conocida frase :»¡Manos blancas no ofenden!. (Sucesos de la Granja)

El Gobierno de España pone de nuevo en vigor la pragmática que anula la Ley Sálica.


En diciembre los reyes regresan a Madrid y el monarca declara solemnemente que el decreto firmado el 13/9/1832, «en las angustias de mi enfermedad fue arrancado de mí por sorpresa… y que es nulo y sin ningún valor». Así, pues, el Gobierno de Francisco Cea Bermúdez, en la fecha, pone de nuevo en vigor la pragmática que anula la Ley Sálica. FERNANDO VII vuelve a tomar las riendas del poder.

Muere, en la fecha, FERNANDO VII y, con él, el Antiguo Régimen en España.


Muere, en la fecha, FERNANDO VII y, con él, el Antiguo Régimen en España. Durante el reinado de FERNANDO VII, España ha perdido su inmenso dominio americano. En el poder están los liberales. Días antes, el parte médico de palacio dictaminaba que el monarca padecía «gota en los riñones, hernia vieja, algo de retención de orina, no puede andar y va en sillón, pero por lo demás de cuerpo y cabeza está muy sano»

El mismo año en que muere Fernando VII, María Cristina, su mujer, se casa con su amante.


El mismo año en que muere Fernando VII, María Cristina, su mujer, se casa con su amante Agustín Fernando Muñoz y Sánchez, sargento de su guardia de corps, con el que tendrá hasta ocho hijos. La relación no es vista positivamente por el pueblo español y bautizan pícaramente al sargento como Fernando VIII. Es en ese ambiente bélico en el que aparece la canción popular que cita las famosas frases de: María Cristina me quiere gobernar, y yo le sigo, le sigo la corriente, porque no quiero que diga la gente que María Cristina me quiere gobernar. De hecho, desde la muerte de Fernando VII, el conflicto carlista –la pretensión al trono del hermano del rey esgrimiendo la legitimidad de la ley sálica, que excluía a las mujeres del trono, y la guerra civil consecuente – fue un episodio constante de hostigamiento al recién inaugurado régimen liberal y, por tanto, un elemento añadido a la confusa situación política.