Felipe V, Rey de España, es nombrado Rey de las Dos Sicilias (1700 -1707)
Reino de las Dos Sicilias (Monarquía Hispánica) (1516 - 1713)
Total de piezas: 25
FERNANDO II el Católico, recupera Nápoles, pero mantiene dos virreinatos diferentes, uno para Sicilia y otro para Nápoles.
Felipe V tiene que dejar la Península para ir a Italia a pacificar el Reino de las Dos Sicilias.
FELIPE V tiene que dejar la Península para, siguiendo las instrucciones de su todopoderoso abuelo, ir a guerrear en Italia. En efecto, estimulado por su abuelo, FELIPE V desembarca cerca de Nápoles, pacificando el Reino de las Dos Sicilias. De ahí va a Milán, siendo recibido con entusiasmo también aquí, e incorporándose al ejército del Po, al mando del duque de Vendóme a comienzos de julio. La primera batalla, en Santa Vittoria supone la destrucción del ejército del general Visconti, por las tropas franco-españolas a la que sigue un sangriento intento de desquite en Luzzara. Su comportamiento en estas batallas es brillante rayando lo temerario.
El emperador CARLOS VI es asimismo Rey CARLOS VI de Nápoles de (1707 – 1734).
El emperador CARLOS VI es asimismo Rey CARLOS VI de Nápoles de (1707 – 1734)
Felipe V de España (IV de Nápoles) será solo rey titular en (1707 – 1713).
Felipe V de España (IV de Nápoles) será solo rey titular en (1707 – 1713). Durante estos años será rey CARLOS VI de Habsburgo (1707 – 1734)
Los Tratados de Utrecht ponen fin a la Guerra de Sucesión española. Sicilia es cedida al duque de Saboya, Víctor Manuel II.
En la fecha, los Tratados de Utrecht ponen fin a la Guerra de Sucesión española. Son firmados por Francia y España, por una parte, y por Inglaterra, Holanda, Portugal, Saboya y Prusia, por la otra, previa renuncia de FELIPE V a la corona de Francia y la de los príncipes franceses a la de España. FELIPE V es reconocido rey de España y de las colonias americanas (1713 – 1724) (1724 – 1746). Completado con otros tratados posteriores. También por el Tratado de Utrecht, España, cede Sicilia al duque de Saboya, Víctor Amadeo II, a título de rey (1713 – 1720). Para compensar la definitiva renuncia de CARLOS VI de Austria al trono español, la nueva dinastía hispánica (FELIPE V de Borbón) le cede, las posesiones italianas de Milán, Nápoles y Cerdenya y, por otra parte, todo lo que resta de las posesiones españolas en los Países Bajos (Luxemburgo y Flandes). Este último territorio se convertirán en unos ambiguos «Países Bajos austriacos», generalmente apagados y silenciosos, pero con bruscos estallidos de pasión nacionalista, donde CARLOS VI tendrá que aceptar tropas de las Provincias Unidas en 8 plazas fuertes como protección ante Francia.