En la Conferencia Imperial que se celebra en la fecha en Viena se toma la decisión que los exiliados por causa de la Guerra de Sucesión de Polonia (1733-1738), principalmente de Nápoles y Sicilia, que huyendo de los ejércitos de FELIPE V de España, pretendan vivir en Austria y disponer de ayudas del estado para ello, han de ser confinados al Banato de Temesvar, una región recientemente conquistada a los turcos donde se está haciendo un importante esfuerzo colonizador. Allí han de habitar una ciudad que se ha de llamar Carlaggaben en honor del emperador, pero que muy pronto se empezará a conocer como la Nueva Barcelona ya que estos exiliados residentes en Nápoles y Sicilia son a su vez los catalanes exiliados, o sus descendientes, de la Guerra de Sucesión Española. Así, pues, 20 años después la historia es a punto de repetirse para los que a partir de 1714 huyeron de las fuerzas borbónicas en el asedio de Barcelona.

El príncipe CARLOS (Carlos III) es coronado en la catedral de Palermo, rey de Nápoles y Sicilia, (CARLOS VII, Rey de las Dos Sicilias). CARLOS renuncia al título de duque de Parma.

Se firma un tratado preliminar de paz entre franceses y austríacos (Primer Tratado de Viena; el Segundo se celebrará el 18 de noviembre) deteniéndose la guerra de Sucesión polaca (1733-1735), coronando a AUGUSTO III como rey de Polonia y fijando un complejo reajuste territorial: a ESTANISLAO Leszczynski se le entrega la Lorena con la obligación de revertir a Francia a su muerte y a FRANCISCO de Lorena la Toscana, perdida por el príncipe CARLOS (Carlos III) de España, al que se desposee también de Parma y Piacenza, que pasan a los Habsburgo de Austria, pero se reconoce al infante español como Rey de la Dos Sicilias (Nápoles y Sicilia). La ratificación de este tratado preliminar tardará tres años. Desaparece, prácticamente, el sistema español de flotas en el comercio iberoamericano; los particulares podían obtener desde años antes una autorización (registro) para comerciar con Iberoamérica por su cuenta.

FELIPE V decide el matrimonio, que se celebra en la fecha, de su hijo CARLOS (Carlos III) ya rey de Nápoles, con Amalia de Sajonia, hija de AUGUSTO III de Polonia y de María Josefa de Austria. Esta boda significa un desafío a Francia ya que Polonia entra en su zona de influencia, y un paso hacia el Imperio. Durante toda la larga vida de CARLOS (Carlos III), su esposa será su gran pasión -tendrá 13 hijos-, superior a la otra de su vida: la caza.

Se ratifica, en la fecha, mediante el Tratado de Viena, el tratado preliminar firmado en 10/1735, por el que Francia reconoce a AUGUSTO III de Polonia y se compromete al respeto de la Pragmática Sanción, finalizando, así, oficialmente, la guerra de Sucesión polaca (1733-1735). En general este tratado se considerará un triunfo de los Borbones españoles y franceses. Intercambio de reinos: el emperador CARLOS VI cede las Dos Sicilias al infante don Carlos, pero recibe Parma y Plasencia. Su yerno, Francisco de Lorena, cede su ducado y se convierte en gran duque de Toscana. Estanislao Lesczynski renuncia a Polonia pero recibe Lorena y Barrois (o Bar), que tras su muerte serán anexionados a Francia.

No mejoran las cosas con el nuevo año, pues la escuadra inglesa se presenta en Nápoles y obliga al príncipe CARLOS (Carlos III) de España a comprometerse a mantener una neutralidad estricta.

Como réplica, se firma en Fontainebleau el Segundo Pacto de Familia entre Francia, España, Dos Sicilias y Prusia con el fin de hacer frente a la coalición formada en el Tratado de Worms. Por otra parte, FELIPE V aprovecha la guerra de sucesión de Austria para conseguir los ducados de Parma, Plasencia y Guastalla para su hijo el infante Felipe, fruto de su matrimonio con Isabel de Farnesio.

LUIS XV, rey de Francia,  garantiza la permanencia del principe CARLOS (Carlos III) como rey de Nápoles y Sicilia y declara la guerra a Inglaterra, luchando en concierto con España para recuperar Gibraltar y Menorca.

Por otra parte, en la Paz de Aquisgrán, CARLOS MANUEL III incrementa sus dominios hasta el Ticino. LUIS XV acepta evacuar los Países Bajos, renunciando así a una ocasión muy favorable de ampliar la frontera norte francesa. CARLOS III mantiene Nápoles y Sicilia. D.FELIPE, casado con una hija de LUIS XV, recibe los ducados de Parma Guastalla y Piacenza, arrebatados a María teresa. Así queda fortalecida la influencia de los Borbones en la península italiana.

Al morir Fernando VI, como no tiene hijos, le sucede su hermano Carlos, a la sazón Carlos VII de Nápoles. Se proclama, en la fecha, rey de España con el nombre de CARLOS III (1759-1788). Estará muy influido por su esposa Amalia de Sajonia. El nuevo rey, contra lo que es habitual, disfruta de larga experiencia como gobernante, por haber ocupado el trono de Nápoles y Sicilia durante un cuarto de siglo, desempeñando su oficio con gran dedicación y buenos resultados. Por todo ello, los españoles confían en que su reinado abra una etapa de bienestar y progreso. CARLOS III abdica del trono napolitano en favor de su hijo Fernando de ocho años.