Entre el verano de 1516 y principios de 1517, CARLOS asegura su posición gracias a la firma de una serie de acuerdos diplomáticos, como el Tratado de Noyón con Francia. Además, los Estados Generales (en Francia, asamblea o junta magna que convocan los reyes para, con carácter excepcional, tratar asuntos urgentes, fundamentalmente de índole legal o financiera) acuerdan concederle 800.000 coronas para los gastos del viaje.
CARLOS I (Rey de España, 1516-1556) / CARLOS V (Emperador del SIRG, 1520-1556)
Total de piezas: 374
Carlos I de España y V del Sacro Imperio Romano Germánico, llamado «el César», reinó junto con su madre Juana la Loca —esta última de forma solamente nominal— en todos los reinos y territorios de España con el nombre de Carlos I desde 1516 hasta 1556.
La aprobación papal de la creación de la Orden del Toisón de Oro de 1433, será ratificada por León X.
La aprobación papal de la creación de la Orden del Toisón de Oro de 1433, será ratificada por un Breve de LEÓN X de 8 de Diciembre de 1516, fecha en la que la Orden no pertenece ya al ducado de Borgoña sino, por herencia, como vínculo familiar, a CARLOS I de España.
BARBARROJA, rey de Argel, decide renunciar a su título de rey y ceder Argel al sultán del Imperio Otomano
En 1517 Aruj BARBARROJA, rey de Argel, decide renunciar a su título de rey y ceder Argel al sultán del Imperio Otomano, SELIM I, para estar bajo su protección contra España y su futuro nuevo rey CARLOS I. Debido a este acto, el sultán le nombra gobernador de Argel. Así, pues, la expansión española por el litoral norteafricano es frenada, en la fecha, y los piratas turcos se establecen en las ciudades costeras comenzando así el poderío otomano que será reconocido por los bajaes de Argel durante muchos años.
La expedición de Francisco Hernández de Córdoba toca las costas de Cabo Catoche, Campeche y Tabasco.
La llegada de Colón, así como de los viajeros que le han seguido, a las islas caribeñas permite que los españoles vayan conociendo algunas de las costumbres de los pueblos con los que se encuentran y que les lleguen noticias sobre la extrema riqueza que poseen. Poco a poco diferentes expediciones se irán acercando a las costas mexicanas y finalmente, en marzo de 1517, Francisco Hernández de Córdoba toca las costas de Cabo Catoche, Campeche y Tabasco.
Con el fin de calmar a los descontentos, CARLOS I se decide partir para España.
Con el fin de calmar a los descontentos, CARLOS I se decide partir para España. Embarca, en la fecha, pero los vientos y las tormentas le dificultarán la navegación.
Las cuatro naves que conducen al rey CARLOS I y a su séquito a tierras españolas echa anclas en Asturias.
Las cuatro naves que conducen al rey CARLOS I y a su séquito a tierras españolas sufren una tormenta en el Golfo de Vizcaya y se ven obligadas a desviar el rumbo y echar anclas en la ensenada de Tazones (Villaviciosa-Asturias), pequeña villa asturiana próxima a Oviedo, el 17 de septiembre de 1517. Llega rodeado de un gran séquito de flamencos, entre ellos, como consejero y hombre de confianza, el famoso GUILLERMO DE CROY, SEÑOR DE CHIEVRES, obispo de Cambrai, único privado que tendrá CARLOS I a lo largo de su reinado. Desde allí el rey inicia su viaje hacia Tordesillas, dónde se reunirá con su madre doña JUANA, evitando las grandes ciudades, dado el recelo de estas hacia él.
CARLOS I y su hermana Leonor llegan a Tordesillas donde se reúnen con su madre la reina JUANA.
CARLOS I y su hermana Leonor, tras sufrir penas y enfermedades, llegan a Tordesillas donde se reúnen con su madre la reina JUANA, y ésta da a su hijo la autorización para que asuma los poderes como rey. Algo más ocurrirá, pues CARLOS, hijo de JUANA, va a mantenerla recluida. JUANA, que permanecerá a lo largo de 46 años en Tordesillas, querrá estar al margen de la vida política en la que no quiere intervenir, pero seguirá defendiendo que sólo ella es la reina y que su hijo CARLOS no es más que príncipe.
Fallece CISNEROS, quizás al recibir una carta de CARLOS en la que se le releva de su cargo.
CISNEROS quiere ir a recibir al joven rey, pero sus achaques le impiden acceder hasta Tordesillas, donde el futuro emperador se ha trasladado para saludar a su madre, JUANA I la Loca. En Roa, CISNEROS recibe una cordial carta del futuro emperador a la que contesta con otra carta suya. Es la última que escribirá. Después se explicará que, aconsejado por los cortesanos flamencos que le rodean, CARLOS I escribe una segunda epístola al cardenal, relevándole de su cargo, y que al leerla, CISNEROS muere -en la fecha- del disgusto. Parece ser que se ha demostrado por algunos historiadores que el cardenal no llegará a conocer el contenido de tal misiva. Tenía 81 años de edad.
CARLOS nombra a un sobrino de Guillermo de Croÿ, de veinte años de edad, arzobispo de Toledo.
No ha transcurrido una semana del fallecimiento del Cardenal Cisneros, cuando, el 14 de noviembre, CARLOS naturaliza castellano a un sobrino de Guillermo de Croÿ, de veinte años de edad, haciéndolo poco después arzobispo de Toledo, como sucesor del Cardenal Cisneros, colocándole al frente de la Iglesia Castellana. Al mismo tiempo, inescrupulosamente los flamencos se reparten los cargos y beneficios.
CARLOS I llega a Valladolid. La primera impresión no es buena. Revueltas de las comunidades en ciernes.
CARLOS I llega a Valladolid. La primera impresión no es buena. Su propia apariencia personal y su incapacidad para hablar español le granjean las antipatías de buena parte de los castellanos y leoneses. La puesta en marcha de nuevas obligaciones fiscales y la decisión de nombrar a personas de procedencia flamenca para los cargos más altos del Estado, es la gota que colma el vaso: está en ciernes la revueltas de las Comunidades.