CARLOS VI, Emp. Del SIRG; Carlos III, Rey de Hungría; Carlos II, de Bohemia (1711-1740)

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Partidarios de FELIPE V se han hecho, en estas últimas semanas, dueños de la Villa de Madrid.


Partidarios de FELIPE V se han hecho, en estas últimas semanas, dueños de la Villa de Madrid. En la fecha, en la Plaza Mayor de Madrid, el archiduque es rechazado públicamente por los ciudadanos de Madrid como rey de España. FELIPE V vuelve a Madrid. El ejército felipista, dirigido por el excepcional Berwick, hace retirar a CARLOS III y sus tropas, de manera que el dominio de éste queda reducido a los territorios de la Corona de Aragón. La guerra sigue su curso pero esta vez con resultado adverso para las armas de CARLOS III.

En todas partes de España se producen posicionamientos a favor de uno u otro pretendiente al trono.


Analizando las poblaciones catalanas que se alzan a favor del Archiduque CARLOS y las que se decantan por FELIPE V, parece adivinarse una ancestral rivalidad entre villas. Cervera es filipista, y las poblaciones tradicionalmente rivales, Anglesola, Guisona Agramunt, son austracistas, Pinell de Brai se declara felipista contra la eterna rival Mora de Ebro. Berga, asimismo, se proclama felipista y Cardona austracista. Fraga es felipista contra Lérida y Monzón, que eligen al otro pretendiente. Gentes de Vic y Torelló asaltan la vecina Manlleu. Así también ocurre en buena parte de España: Jaca es felipista mientras Huesca es austracista. En las memorias del Vizconde del Puerto se refieren casos semejantes como la Tudela felipista y su vecina Egea, austrófila. Así, pues, en todas partes de España hubo posicionamientos a favor de uno u otro pretendiente.

El archiduque Carlos de Austria otorga a Rafael CASANOVA el nombramiento de “ciutadà honrat”.


El archiduque Carlos de Austria otorga a Rafael CASANOVA el nombramiento de “ciutadà honrat” (ciudadano honrado), un título honorífico ambicionado por las familias acaudaladas catalanas no pertenecientes a la nobleza.

Las tropas felipistas que dirigen el duque de Berwick y el conde de Pinto consiguen la victoria en Almansa.


Las tropas felipistas que dirigen el Duque de Berwick y el conde de Pinto consiguen la victoria sobre las tropas aliadas del archiduque, mandadas por el marqués de Minas y lord Gallway, en Almansa. Participan aproximadamente 25.000 hombres por bando y las bajas para CARLOS III se cifran en unos 5.000 muertos y unos 12.000 prisioneros. La derrota aliada es decisiva para el desarrollo de la guerra porque permite a los felipistas la ocupación del País Valenciano.

FELIPE V trata de conseguir la uniformidad administrativa de todos los territorios de la Monarquia.


Con el fin de conseguir la uniformidad administrativa de todos los territorios de la Monarquía, FELIPE V, el 29 de junio de 1707, promulga el primero de los Decretos de Nueva Planta, por el que los reinos de Aragón y de Valencia, que hasta entonces han mantenido fueros, leyes y privilegios particulares, quedan sometidos a las leyes y forma de gobierno establecidos en Castilla. El decreto también permite una primera reforma tributaria, y aunque no desaparecen los antiguos impuestos de cada región totalmente, el sistema de contribución única que plantea los unifica en parte y los modifica en gran medida. FELIPE V adopta como justificación de la abolición de los fueros de Valencia la quiebra del juramento de fidelidad de sus súbditos al alinearse éstos a favor del archiduque CARLOS en la Guerra de Sucesión. La imposición del castellano como lengua oficial de la administración ha agudizado el retroceso del uso social del valenciano desde el siglo XV.

Las élites valencianas solicitan la revocación de la medida tomada por FELIPE V.


Las élites valencianas solicitan la revocación de la medida tomada por FELIPE V, negando que hubiese tenido lugar una rebelión en contra del monarca. Lo cierto es que al iniciarse el reinado de FELIPE V, tanto las Juntas de Estamentos como la Generalitat habían acordado el envío de una embajada a la Corte para manifestarle su fidelidad. Aquellas inician, además, los preparativos para la convocatoria de una próxima reunión de las Cortes y colaboran en el esfuerzo de guerra mediante el recurso a la tradicional leva de tropas. El advenimiento de la dinastía borbónica no había parecido, pues, que implicase una amenaza. Las causas por las que una parte de la sociedad valenciana se había adherido al partido austracista son difíciles de determinar. Se suele esgrimir un sentimiento antifrancés entre la población y los perjuicios ocasionados a la agricultura por la prohibición del comercio con los países atlánticos del noroeste de Europa. Sin embargo, lo que facilitó la ocupación del reino de Valencia por las tropas aliadas fue el malestar en el campesinado de señorío ante las elevadas rentas que exigía la nobleza.

En la Lonja de Mar se celebra la que parece es la primera representación operística en Catalunya.


El género operístico no llega a Barcelona, hasta 1708 en que en la Lonja de Mar se celebra la que parece es la primera representación operística en Catalunya. Es el motivo una sesión en honor del archiduque CARLOS, reconocido como rey con el nombre de CARLOS III, y de su esposa ELISABET CRISTINA, con la que acaba de casarse. La ópera o, mejor dicho, un “Componimento da Camera per musica”, es en tres actos y de contenido mitológico.

LUIS XIV, derrotado en varios frentes, pide por dos veces conversaciones de paz. No son aceptadas.


Las tropas aliadas penetran en Francia. LUIS XIV, derrotado en varios frentes, pide por dos veces conversaciones de paz. No obstante, las exigencias de los aliados, especialmente los ingleses, rompen las negociaciones, ya que el rey francés no acepta tener que exigir a su nieto FELIPE V la renuncia al trono España. Así, pues, se desaprovechan dos ocasiones magníficas por parte del bando aliado y la guerra sigue…

No existe en Menorca hasta 1708 otros hechos bélicos que las incursiones de los piratas berberiscos.


No existe en Menorca hasta 1708 otros hechos bélicos que las incursiones de los piratas berberiscos. Dentro de la Guerra de Sucesión de España, el desembarco de las tropas anglo-holandesas aliadas del archiduque CARLOS al mando del general Stanhope obliga a la capitulación de Menorca el 30 de mayo de 1708. Los ingleses incautan los bienes de los felipistas y permanecerán en la isla durante casi todo el siglo XVIII.