Fallece MARÍA de Borgoña, casada con el rey de romanos MAXIMILIANO. Los Países Bajos ya no quieren ser gobernados por un austríaco una vez desaparecida su reina, pero MAXIMILIANO consigue mantener su dominio pasando los Países Bajos, a su hijo FELIPE el Hermoso, convertido en soberano de dichos estados.

Los Reyes Católicos se preocupan por reforzar la posición de Castilla y León en el campo internacional y uno de los medios empleados son los enlaces dinásticos. Por ello, deciden en la fecha, casar a sus hijos e hijas con herederos de las familias reinantes. En consecuencia, se acuerdan los enlaces matrimoniales de los hijos de los Reyes Católicos, D.JUAN y Dña. JUANA, con los de MAXIMILIANO de Austria, la princesa MARGARITA y el archiduque FELIPE el Hermoso (habidos con MARÍA de Borgoña), si bien no se celebrarán estos matrimonios hasta 1496 el de Dña. Juana y hasta 1497 el del príncipe JUAN.

JUANA, hija de los Reyes Católicos, se casa con FELIPE el Hermoso -hijo del emperador Maximiliano I-, en la colegiata de San Gumaro de la ciudad de Lierre. Previamente, en agosto, lo ha hecho por poderes, en Valladolid, según el acuerdo alcanzado por sus respectivos padres en 1495. Los Reyes Católicos no tienen hijos varones que hereden sus Estados. Obviamente, si a aquella pareja le nace un hijo, un Habsburgo reinará en Austria, los Países Bajos, España y los otros países que Austria y España dominan en Europa, por no hablar de los crecientes dominios españoles en América. Parece que los dos esposos se quieren mucho, al menos en los primeros tiempos. Luego FELIPE se apartará de su mujer y reanudará las relaciones que mantenía con varias queridas. Esta situación llenará de desesperación y celos a JUANA que no se sentirá a gusto en aquellas tierras creyéndose cercada de rivales y espías. Preferirá quedarse sola muchas veces, fuera de toda compañía, sin participar en las fiestas palaciegas. Entonces comenzará a mostrar cierta propensión a la melancolía y a la vida retirada.

Nace LEONOR, primera hija de FELIPE el Hermoso y JUANA la Loca. Se casará con Manuel I de Portugal.

En Gante (Países Bajos) se celebra, en la fecha, una brillante fiesta a la que asisten los infantes FELIPE el Hermoso y su esposa JUANA. La dama se siente aquejada de los dolores del parto; se retira al retrete y allí da a luz un niño -su segundo hijo (primer varón)-. Este niño es llamado CARLOS en memoria de su bisabuelo Carlos el Temerario. Es el futuro rey de España -CARLOS I- y emperador del SIRG -CARLOS (V)-, nieto por línea paterna del emperador MAXIMILIANO de Habsburgo y de María de Borgoña (única heredera de Carlos el Temerario), y por línea materna, de los Reyes Católicos. CARLOS es feo, muy feo, fealdad que se acentuará con los años. Los Habsburgo le proporcionan el labio inferior prominente, característica de la familia, y, por parte borgoñona, el mentón salido que le impedirá siempre cerrar la boca, afeada, además, por una detestable dentadura.

En la fecha, la infanta de Castilla JUANA es proclamada junto a su marido FELIPE el Hermoso de Borgoña, por las Cortes castellanas de Toledo, príncipes de Asturias. El paso siguiente, hacer lo mismo en Aragón, se verá dificultado por la altanería de Felipe. Así, pues, se está preparando para su heredero CARLOS la más vasta herencia jamás vinculada a una corona: España con los inmensos territorios de Ultramar, por parte de su madre JUANA la Loca (Castilla y Aragón); el imperio alemán por parte de su abuelo MAXIMILIANO de Habsburgo; los Países Bajos por parte de su abuela (MARÍA de Borgoña). FELIPE el Hermoso regresa a Flandes, pero JUANA, encinta, no podrá acompañarle y hasta 1504 no se reunirá con su marido. Otra vez se encenderán los celos, menudearán los conflictos con FELIPE y con la gente de palacio. La situación angustia a los Reyes Católicos. FELIPE el Hermoso envía a España una información detallada, firmada por un médico, Martín de Múgica, en la que se hace mención por primera vez de la salud mental de JUANA, aparte de las manifestaciones de celos.

Nace ISABEL, tercer hijo de JUANA la Loca y de FELIPE el Hermoso (segunda niña). Es la futura reina de Dinamarca.

La situación de JUANA preocupa a sus padres, los Reyes Católicos, cuidadosamente informados por sus embajadores de lo que pasa en la corte de FELIPE el Hermoso y es que JUANA aparte de preocuparles como hija, juega un papel político importante. En efecto, muertos sus hermanos JUAN (1497) e ISABEL (1498), así como el hijo de ésta, MIGUEL (1500), la infanta JUANA se ha convertido en heredera de los tronos de Castilla y Aragón. Así, pues, JUANA ha de regresar a España para ser reconocida oficialmente como futura reina. En la fecha, JUANA emprende el viaje con su marido en 1502.

JUANA no sólo es una mujer inteligente, además de hermosa, sino que está también dotada de una carácter resuelto. Así será famosa la anécdota del castillo de Blois cuando -de regreso a España con su marido FELIPE- se niega a echar en la ofrenda la moneda de oro que le ha proporcionado la reina francesa Ana de Bretaña, esposa de LUIS XII. FELIPE ya lo ha hecho consintiendo así en mostrar su vasallaje como archiduque de Borgoña al rey francés LUIS XII, pero la entonces heredera del trono hispánico, consciente de su dignidad, se desprende de uno de sus valiosos zarcillos antes que mostrar sumisión. El gesto de independencia, evidentemente, no gusta en la corte gala y el viaje ha de reanudarse a la primera oportunidad.

Nace FERNANDO I de Habsburgo, el cuarto hijo de JUANA la Loca y de FELIPE el Hermoso (Segundo varón). Futuro emperador del Sacro Imperio. FERNANDO nace en el Palacio arzobispal de Alcalá de Henares. Es el nieto preferido de FERNANDO el Católico, y es educado a la española por su abuelo. Hasta la muerte de su abuelo, el emperador MAXIMILIANO I, estará relegado políticamente.