La firma de la paz de Crépy ha supuesto la salida en 1544 de CARLOS V de la guerra italiana de 1542-1546, pero no el fin de ésta. Su aliado, ENRIQUE VIII de Inglaterra ha continuado la lucha contra Francia hasta la firma del tratado de Ardres en 1546. El puerto de Boulogne es devuelto a Francia a cambio de un importante tributo en dinero (Paz de Ardres, 1546).

Durante el reinado de ENRIQUE II (1547-1559) los postulados y doctrinas de Juan Calvino desarrollaron en Francia una forma peculiar del protestantismo, y consiguió el apoyo de muchos seguidores entre la nobleza y el pueblo llano. ENRIQUE II consideró el calvinismo una amenaza a la autoridad real e intentó acabar con él. Bajo el reinado de sus tres hijos, que le sucedieron, las guerras de Religión, donde se mezclaron conflictos religiosos, políticos y dinásticos, desgarraron el país. El fanatismo religioso de los combatientes y la brutalidad de los mercenarios hicieron que en la guerra fueran habituales los saqueos, la crueldad y las atrocidades.

A Francisco I de Francia, le sucede en el trono su hijo ENRIQUE II (1547-1559) en su tiempo las guerras prosiguirán pero unificará el gobierno incorporando Bretaña a la corona francesa.
Un efecto constructivo de las guerras de Italia será que acelerarán la difusión del pensamiento renacentista en Francia y, a través de ésta, a toda Europa occidental.

Muere en el palacio de Rambouillet FRANCISCO I de Francia dejando su reino como lo había recibido. Muere a los 53 años de edad y treinta y dos de reinado. Perfecto ejemplo de rey renacentista, siempre derrotado pero jamás sometido, había hecho de su vida una constante oposición a la casa de Austria.

Los ingleses invaden Haddington. En junio, una gran armada francesa desembarca en Leith para defender a los escoceses, tras haberse llegado a un acuerdo por el cual MARÍA Estuardo contraerá matrimonio con el heredero del trono francés.

Los franceses rescatan a la reina niña (de cinco años), María ESTUARDO, en Dumbarton y la trasladan a Francia, donde pasará 14 años.

La Contrarreforma, llevada adelante por los jesuitas de Molsheim, combate el protestantismo, firmemente arraigado en Estrasburgo.

Los siglos XVI y XVII ven a Alsacia dividida en numerosas y diminutas señorías. Gradualmente, éstas se van agrupando en federaciones, que darán origen a los Estados Generales de Alsacia. Alsacia se convierte en un centro comercial de primer orden.

En Francia sobrevivió nominalmente la inquisición medieval, aunque a partir de la primera mitad del siglo XVI la tarea de combatir la herejía fue progresivamente asumida por el poder regio.

Las guerras de religión de Francia de la segunda mitad del siglo XVI, que enfrentan a hugonotes y católicos, resultan particularmente violentas en la Gascunya y en el Languedoc y coinciden también con un período de prosperidad en Catalunya. Por estos dos motivos, tiene lugar una corriente de inmigración occitana en Catalunya. Los inmigrantes se concentran en las áreas litoral y prelitoral y se dedican a trabajos agrícolas y urbanos poco cualificados. Por su pobreza son identificados con corrientes marginales, como el bandolerismo en el caso de los hombres y la ?brujería en el de las mujeres.