El sueño de CÉSAR de BORGIA es unificar Italia bajo su mano y para conseguirlo se vale de cualquier medio, incluida buena parte del dinero que llueve sobre la Santa Sede con ocasión del Año Santo de 1500. Cuatro meses después de su boda, CÉSAR de BORGIA parte con los ejércitos franceses a Italia. Nunca más volverá a ver a su esposa ni conocerá a su hija Luisa.

LUIS XII, nieto de Valentino Visconti, se declara heredero de la antigua dinastía que ha reinado en Milán, antes de ser suplantada por los SFORZA. Reprocha a LUDOVICO el Moro su condición de aliado y vasallo de MAXIMILIANO de Austria. Pero, además del deseo de borrar el fracaso de su predecesor, hay también motivos personales que le empujan hacia la península italiana. Invade, pues, el Milanesado y expulsa a LUDOVICO el Moro que se refugia en la corte del emperador MAXIMILIANO. El rey de Francia, presta tropas a CÉSAR Borja para que conquiste la Romaña y deja un retén en Milán para garantizar la sumisión de la ciudad. Al fin LUIS XII se casará con ANA de Bretaña.

Ocho años atrás había sido descubierto el continente Americano: el Año Santo del 1500 representa por lo tanto un momento de paso no solamente hacia un nuevo siglo, sino también hacia un mundo más vasto. Alejandro VI, el 24 de diciembre de 1499, inaugura solemnemente el Jubileo y añade un nuevo rito: la apertura de una Puerta Santa en la Basílica de San Pedro a la que, desde entonces, fue adjudicado el papel tradicional que la puerta áurea de San Juan de Letrán, había desempeñado por siglos. El Papa quiso, además, que la apertura de las Puertas Santas se realizara en cada una de las cuatro basílicas mayores establecidas para la visita jubilar. Desde aquel momento la apertura de la Puerta Santa y el paso a través de ella, se convirtirá en uno de los actos más importantes del Año Santo. Es también inaugurado un nuevo camino denominado Alejandrino, que une el Castillo del Santo Angel con la Basílica de San Pedro.

El campo de acción de la Inquisición moderna, es la defensa de la fe católica, la caza de los herejes, la extirpación del error (la herética pravedad); le echan la culpa primero a los judaizantes; después, en el siglo XVI, se apuntará a las sectas seudo-místicas (aÍumbrados), a los protestantes, y de nuevo, para siempre, a los judaizantes. De forma accesoria, la Inquisición reprimirá también la homosexualidad (el vicio que no tiene nombre: el pecado nefando), la bigamia, los excesos de los sacerdotes, la brujería… pero, esencialmente seguirá siendo fiel a su vocación primera: lo que le interesa, es lo que creen las gentes, no lo que hacen; la fe, no los hábitos.

Por orden del Papa Alejandro VI, son colgados a ambos lados del puente Sant’Angelo, en Roma, dieciocho criminales  que han intentado aprovecharse de los pobres romeros que asisten al año santo de 1500. Entre ellos, un conocido médico local que, de noche, salía a ejercer de asesino en serie para desvalijar a los romeros previamente muertos de un flechazo de su ballesta.

En la fecha, tuvo lugar en la plaza de la basílica de San pedro de Roma una corrida de toros promovida por el papa ALEJANDRO VI. CÉSAR BORGIA, lidia seis toros. Con un formidable golpe de espada corta la cabeza del último, impresionando a los italianos, que ven en aquel suceso una premonición de los dos siglos de influencia española que habrá de sufrir Italia.

Para la boda entre MARÍA -hija de los Reyes Católicos- y MANUEL de Portugal, es necesaria la dispensa pontificia, que ALEJANDRO concede, tras el habitual tira y afloja, del que obtiene las inevitables ventajas familiares. En la fecha, entra MARÍA en Portugal, el país donde reinará, con el acostumbrado séquito que preside el cardenal Mendoza. El soberano la espera en Alcaçer de Sal; allí se casan, para llegar a Lisboa en Noviembre. Este matrimonio hecho a contrapelo, resulta después el único dichoso de todos los contraídos por las hijas de los REYES CATÓLICOS. MARÍA y MANUEL tendrán mucha descendencia. MANUEL I, fallecida María, se casará con una nieta de los Reyes Católicos: LEONOR de Austria.

La política enturbia de nuevo la vida de LUCRECIA; la creciente amistad de los BORGIA con los franceses va en detrimento de los intereses napolitanos, cuya cabeza en Roma es ALFONSO, el marido de LUCRECIA, que tiene que huir a Nápoles. ALFONSO sale ileso de un primer intento de asesinato en 7/1500, pero, en la fecha, es estrangulado por orden de CÉSAR, el hermano de LUCRECIA.

A los vínculos políticos y económicos que mantiene Valencia con Italia se añade el poder adquirido en Roma por los miembros de la familia BORGIA; es precisamente ALEJANDRO VI quien otorga en 1501 la bula fundacional de la Universidad/Estudi General de Valencia. La lectura y la escritura son patrimonio sobre todo del grupo de los letrados, clérigos y clases dominantes urbanas, con una difusión menor en el ámbito rural.

De nuevo se plantea la cuestión de elegir un marido para LUCRECIA, que ha pasado a ser la administradora de la Iglesia y del Vaticano, aunque esta vez ella toma parte en la elección y en la redacción del contrato matrimonial. El elegido es ALFONSO d’ESTE, heredero del ducado de Ferrara, familia de las más antiguas y respetadas de Italia. En la fecha, se efectúa la boda por poderes en Roma. El día de Reyes de 1502, parte la futura duquesa de Ferrara hacia su nueva casa. Ya no volverá a ver a su padre ni a su hijo Rodrigo quien morirá en 1512, antes que su madre, con 13 años de edad.