El angevino LUIS I el Grande (1342-1382), hijo de Carlos I, sucede a éste en el trono de Hungría orientando su política hacia el Este. Como resultado de las guerras que librará, las fronteras meridionales del país llegarán hasta Bulgaria, los nuevos principados rumanos (Moldavia y Valaquia) prestarán juramento feudal y Venecia cederá Dalmacia a Hungría. Hungría, en virtud de su herencia polaca y a través de las guerras de conquista, se convertirá en uno de los reinos más grandes de Europa, y LUIS I resultará el mejor monarca europeo de su tiempo. Sigue la política de su padre en la línea del absolutismo francés. Es un mecenas de la cultura. LUIS instituye numerosas reformas administrativas, frena el poder de los señores feudales y promociona el desarrollo del comercio, la ciencia y la industria.

Por estos años, se establece la Inquisición Pontificia o medieval en Alemania y Polonia, en Dalmacia, Bosnia, Rusia, Croacia e Istria; en Armenia, Georgia, Grecia, Tartaria y Valaquia. De hecho este tribunal pertenece ya a la disciplina general de la Iglesia.

Nace VLAD TEPES. En la vida de este príncipe de Valaquia (Rumanía) se inspiró BRAM STOKER para escribir su novela “Drácula”. De hecho, este príncipe tenía el apodo de “Draculea” que quiere decir “el hijo del Diablo” ya que su padre tenía el apodo de “Dracul” (Vlad -el Diablo). Pero el pueblo le apodó también de otro modo -“el Empalador”- por la pena capìtal que aplicaba corrientemente: empalar.

Hungría es atacada a mediados de 1439 por el voivoda de Valaquia, Vlad II Dracul, quien entra en la región de Transilvania junto con el ejército turco llevándose numerosos rehenes húngaros. Para calmar a la nobleza húngara, ALBERTO extiende sus privilegios, donde no era necesario que estos y sus tropas luchasen, sino solamente cuando las fuerzas reales resultaran ser ineficientes. Esto genera cada vez más caos en el reino ante la invasión otomana, y en 1439 el rey húngaro lleva sus ejércitos a Szendr?, donde chocan con los turcos. Esta empresa deriva en una derrota y se ve forzado a marcharse sintiéndose enfermo, para morir cerca del asentamiento de Neszmély el 27 de octubre de 1439.

Firma de la Paz de PASSAROWITZ (Yugoslavia), que pone fin a la tercera guerra austro-turca. Firmado por Austria, Venecia y Turquía. Esta última es obligada a ceder a Austria el Banato, el N. de Serbia y de Bosnia (con Belgrado) y parte de Valaquia. Turquía conserva Morea. Venecia continúa con sus posesiones dálmatas y albanesas.

CARLOS VI, emperador del SIRG, resulta victorioso contra los turcos en la guerra (1716-1718). La Guerra austro-turca de 1716-1718 ha enfrentado al Sacro Imperio Romano Germánico que cuenta con el apoyo de la República de Venecia frente al Imperio Otomano que está aliado con los Tártaros de Crimea y con Moldavia. La guerra ha tenido lugar por el deseo del Imperio Otomano de reconquistar los territorios perdidos tras la Guerra de la Liga Santa y por las ambiciones del Sacro Imperio Romano Germánico de controlar los Balcanes. La guerra ha terminado con el Tratado de Passarowitz, firmado el 21 de julio de 1718. Por el Tratado de Passarowitz Venecia pierde Morea pero el Emperador retiene el Banato de Temesvar, el oeste de Valaquía (Oltenia) y Belgrado. En Bosnia y Croacia el río Sava y el río Una servían de frontera.

La alianza con los rusos conduce a CARLOS III de Hungría (CARLOS VI del SIRG) a una nueva guerra con Turquía, en la que pierde Valaquia y Serbia, en 1739.

Firma del Tratado de Belgrado, que significa un frenazo a la expansión austríaca en los Balcanes. Austria devuelve sus conquistas de 1718, Valaquia y Serbia. Rusia sigue el ejemplo de Austria. Turquia, cuyo Imperio piensan repartirse las potencias austro-rusas, vuelve a sus fronteras de 1699. La influencia francesa también verá aumentada, en detrimento de Inglaterra.

El ejército ruso ocupa los principados de Moldavia y Valaquia (Rumanía)

Congreso de Erfurt, que durará hasta el 14 de octubre. Napoleón se entrevista con el zar Alejandro I y los soberanos de Alemania, excepto el emperador de Austria y el rey de Prusia. Presionado por la guerra española, reconoce al zar la posesión de Finlandia y de las provincias rumanas de Moldavia y Valaquia.