PEDRO III el Grande (Rey de Aragón, Valencia y C. de Barcelona 1276-1285)(Sicilia 1282-1285)

Total de piezas: 80

Pedro III el Grande, rey de AragónPedro III el Grande, rey de Aragón, nació en Valencia, fue hijo de Jaime I el Conquistador y su segunda esposa Violante de Hungría

(Véase genealogía de Pedro III el Grande, rey de Aragón)

PEDRO III autoriza la instalación del “Consolat de Mar” en Valencia.


PEDRO III autoriza la instalación del “Consolat de Mar” en Valencia, institución medieval que con precedente en el siglo XI en las costas italianas, esta encargada de administrar justicia por delegación real en materia mercantil y en asuntos marítimos. Ha sido creado en Barcelona en 1282.

JAIME II el Justo empieza siendo el lugarteniente de su padre en el reino de Sicilia.


Las primeras actuaciones políticas de JAIME II el Justo están estrechamente ligadas al reino de Sicilia, primero como lugarteniente de su padre PEDRO III el Grande al lado de su madre CONSTANZA (1283-1286)

El papa ofrece al rey de Francia, los reinos de Pedro el Grande para un hijo que no sea el heredero.


El papa MARTÍN IV, ofrece -en la fecha- al rey de Francia, los reinos de PEDRO el Grande para un hijo que no sea el heredero.

El Papa Martín IV depone formalmente a Pedro el Grande como rey de Aragón.


El Papa MARTÍN IV depone formalmente, en la fecha, a PEDRO III el Grande como rey de Aragón. El rey FELIPE III de Francia aprovecha el interdicto papal para invadir los territorios del rey de Aragón al norte de los Pirineos, incumpliendo el tratado de Corbeil.

PEDRO el Grande se ve obligado a dejar Sicilia y volver a la Península. Establece condiciones de herencia.


Mientras, en la fecha, PEDRO el Grande se ve obligado a dejar Sicilia y volver a la Península ya que sus reinos están amenazados por la cruzada promovida por el rey de Francia y el Papa. Por ello, PEDRO asigna la regencia a su mujer, la reina CONSTANZA, que se instala en Sicilia acompañada de sus hijos JAIME y FEDERICO. Al lado de la reina quedan el gran canciller Joan de Pròixida, el gran almirante Roger de Llúria y el gran justicia Alaimo de Lentini. PEDRO aprovecha la ocasión para establecer que cuando él muera, las coronas de Aragón y de Sicilia han de separarse. La primera ha de corresponder a su primogénito ALFONSO, y la otra, a su segundo hijo, JAIME.

PEDRO declara “felón” a Carlos de Anjou, ya que no ha cumplido su palabra.


CARLOS I de Anjou ha aprovechado la ocasión para hacer acusaciones de traición y de deslealtad contra PEDRO el Grande. Éste ha optado por un desafío personal. El acuerdo a que se ha llegado es que los dos monarcas, asistidos cada uno de ellos por cien caballeros luchen el 1 de junio de 1283 en Burdeos, ciudad que se encontraba bajo la soberanía del rey Eduardo I de Inglaterra y que para este fin parecía, por tanto, terreno neutral. Pero mientras tanto, Eduardo I se ha desentendido del tema y ha puesto bajo el dominio del rey de Francia, sobrino de CARLOS de Anjou, Burdeos y toda la Gascuña. Por ello, y porque PEDRO se entera de que CARLOS de Anjou le prepara una trampa para encarcelarlo, considera roto el pacto caballeresco. Sin embargo, PEDRO quiere demostrar su valor personal y disfrazado de mendigo entra en Burdeos, recorre el palenque y hace levantar un acta notarial del hecho. Al no aparecer su rival por ninguna parte, PEDRO, conforme a las leyes de caballería, declara “felón” al príncipe francés. Cuando CARLOS de Anjou, que esperaba a PEDRO con un fuerte ejército, se entera del hecho, ya PEDRO está fuera de su alcance.

PEDRO el Grande de la Corona de Aragón conquista el castillo de Malta, la isla de Gozzo y la ciudad de Lipari.


Termina el encarnizado combate naval iniciado el día anterior frente al puerto de la isla de Malta; PEDRO el Grande de la Corona de Aragón conquista el castillo de Malta, la isla de Gozzo y la ciudad de Lipari. La acción militar angevina es anulada por la victoria naval de ROGER de Llúria en Malta que pone en manos de Catalunya todos los puntos que dominan los caminos del Mediterráneo.

Les Corts de 1283 convierte la “remença” en ley.


Les Corts de 1283 convierte la “remença” en ley. En concreto, la constitución “Recognoverunt proceres”, es uno de los documentos que tendrán una incidencia más grande en la condición de los payeses de remensa y en la consolidación del poder de los señores. En cierta manera, éste es el precio que las ciudades y la corona tendrán que pagar a los señores, a cambio del soporte de éstos a la expansión marítima catalana. En los momentos de su máximo esplendor, la sociedad catalana pone los fundamentos de su futura crisis.

El Papa MARTÍN IV declara que los dominios del rey de Aragón pertenecen a FELIPE III de Francia.


El Papa MARTÍN IV declara que los dominios del rey de Aragón pertenecen a FELIPE III de Francia. Tropas francesas ocupan el Valle de Arán. PEDRO III responde con contundencia asediando Tudela, pues Navarra, donde reina una dinastía de Champaña, se coloca al lado de Francia.

PEDRO III convoca Cortes en Tarazona en un momento de enorme descontento en Aragón.


En septiembre de 1283, PEDRO III convoca Cortes en Tarazona en un momento de enorme descontento en Aragón motivado por la guerra de Sicilia y la próxima con Francia, por la excomunión dictada por el papa y muy especialmente en el secretismo para declarar y proseguir las guerras y la imposición de nuevos tributos y servicios. Problema que se agudiza con PEDRO III pero que ya se ha iniciado con su padre Jaime I, contrario a otorgar privilegios pero sí dispuesto a aumentar el poder real. En las Cortes le presentan sus agravios y desafueros, le piden celebrar consejo para la guerra de Sicilia y la próxima con Francia. El rey se niega rotundamente y entonces las Cortes piden que como no guarda los fueros, costumbres, usos, privilegios y libertades propias de los aragoneses, que vuelva a jurarlos. El rey de nuevo se niega y los aragoneses se preparan para defender sus libertades. Ante esta postura de los aragoneses y la difícil situación por la que pasa PEDRO III, se compromete a que en las próximas Cortes de Zaragoza quedarían solucionadas todas las desavenencias.