AZAÑA, ministro de la Guerra, decreta el cierre de la Academia Militar de Zaragoza, de la que es director Francisco FRANCO, por considerarla antirrepublicana.

Tras las elecciones para las Constituyentes, Niceto ALCALÁ-ZAMORA y Torres es confirmado en el cargo de Presidente del Gobierno de la República española por un período de seis años, «prometiendo su cargo» ante las Cortes Constituyentes. Forma un nuevo gobierno que cuenta con el apoyo de los socialistas y republicanos liberales; los monárquicos y católicos se constituyen en oposición y los anarquistas quedan al margen. Se inicia el período conocido por la Historia como Bienio Reformista (1931-1933):

Para sustituir a los guardias civiles en los conflictos de orden público en las ciudades, el director general de Seguridad, Angel Galarza, organiza en el verano de 1931 una policía gubernativa, que recibe el poco adecuado nombre de Guardia de Asalto. Armados con porra y revólver y especializados en la represión de los obreros y estudiantes en huelga, los guardias de Asalto deben ser capaces de hacer frente a los desórdenes públicos con medios menos expeditivos que los empleados por la Guardia Civil, demasiado proclive a la utilización del fusil y el sable con resultados no deseados por las autoridades.

La República reconoce el derecho de asociación y de sindicación, decreta la jornada laboral de 8 horas, regulariza el trabajo nocturno y aprueba la ley de descanso dominical. Pero el servicio doméstico, cuya práctica totalidad son mujeres, queda excluido de la jornada de ocho horas, sin derecho a prestaciones ni seguros sociales ni a permisos de maternidad.

El 6 de julio, la CNT se embarca en su primer gran conflicto sindical al poner en marcha una huelga nacional de empleados de la Compañía Telefónica. Convocada en un ámbito laboral donde la Confederación no es especialmente fuerte, la huelga, resueltamente combatida por el Gobierno, deriva en sabotajes y violencias y da lugar a sangrientos incidentes en Sevilla, incluida la muerte de treinta personas y el cañoneo del local donde se reúne la dirección de los huelguistas. Conduce además a la CNT a un enfrentamiento abierto con los militantes ugetistas, que actúan para romper la huelga.

En España, el día 14 de julio, aniversario de la toma de la Bastilla, se abren solemnemente las Cortes Constituyentes presididas por el socialista Julián Besteiro y ante ellas declina sus poderes el Gobierno provisional, que, tras obtener un voto de confianza, pasa a ser el primer Gabinete ordinario de la República. Durante las primeras semanas, las Cortes refrendarán los numerosos decretos promulgados por el Gobierno provisional, y que ahora se convertirán en leyes. Pero la principal misión de los diputados es dotar al país de una Constitución, y a ella se aplicarán durante la segunda mitad de 1931.

El proyecto del Estatut de Nuria es aceptado el 14 de julio por la Diputación provisional del Parlamento catalán. Inmediatamente será aprobado por el voto unánime de los Ayuntamientos catalanes.

Del 20 al 27 de julio se produce una huelga general y se proclama la ley marcial en Sevilla.

En España, el texto del anteproyecto de Constitución es bien recibido por los ministros más conservadores, pero rechazado por el grueso de los representantes de la izquierda. Finalmente es rechazado. En su lugar, se encomienda la redacción de otro proyecto a una Comisión parlamentaria, presidida por el socialista Luis Jiménez de Asúa e integrada por veintiún diputados.

El Proyecto de Estatutos para Catalunya, es en la fecha, sometido a referendum del pueblo de Catalunya con una participación del 75% del censo (limitado a la población masculina, de acuerdo con la legislación vigente) y con un 99% de votos afirmativos (592.961 votos). Además 400.000 firmas de mujeres se añaden a esta aceptación popular. En Barcelona, los votos negativos y la abstención llegan al 38 por 100, mientras en el resto de Catalunya representaron únicamente el 15 por 100. Así pues, hubo un texto de Estatuto catalán antes de la aprobación de la Constitución republicana española, de la misma manera que había habido república catalana horas antes de república española.