AVIÑÓN: SEGUNDA CAUTIVIDAD DE BABILONIA (1309-1378)

Total de piezas: 84

Son quemados vivos los tres miembros de la Orden de los Templarios condenados el día anterior.


A consecuencia de sus protestas, son quemados vivos los tres miembros de la Orden de los Templarios (entre ellos, JACQUES DE MOLAY, el Gran Maestre de la Orden). En el momento de subir a la pira que debe consumir su cuerpo, JACQUES DE MOLAY, invocando el nombre de Dios y proclamando su inocencia, emplaza al Papa y al rey para que en el plazo de un año comparezcan ante el «Juicio de Dios». Efectivamente, el Papa CLEMENTE V morirá el 20 de abril siguiente, un mes después del sacrificio de MOLAY, y el rey FELIPE el Hermoso de Francia, pocos días después de la ejecución contraerá una enfermedad, cuyo origen nadie puede averiguar, muriendo el 29 de noviembre de 1314, ocho meses después del emplazamiento.

Así termina la Orden de los Templarios, aunque en algunas naciones durará áun un par de años más.


Así termina la Orden de los Templarios, aunque en algunas naciones durará áun un par de años más. Los caballeros que en Francia se salvan del suplicio y aquellos que residen en otras naciones ingresarán en su mayoría en las órdenes militares que existen en ellas. Varía tentativas, que no darán resultado, se harán a lo largo del siglo XVIII para resucitar la Orden. En Francia todo había sido una cuestión de dinero.

Fallece el papa CLEMENTE V estando en viaje a Burdeos.


Fallece el papa CLEMENTE V estando en viaje a Burdeos sólo meses antes que el otro gran protagonista de su pontificado, el rey francés FELIPE IV, también muriera. Las profecías de San Malaquías se refieren a este papa como De fasciis Aquitanicis (De las fajas de Aquitania), cita que hace referencia a que fue arzobispo de Burdeos, en Aquitania, antes de ser elegido pontífice y a que en su escudo de armas figuran tres fasces (fajas) de gules. (Una «faja» es una pieza heráldica consistente en una banda horizontal, cuya anchura no debe exceder nunca de un tercio del escudo)

En la época de los papas de Aviñón, después de la muerte de CLEMENTE V, se reunió en Carpentras el cónclave cardenalicio para elegir sucesor.


En la época de los papas de Aviñón, después de la muerte de Clemente V, se reúne en Carpentras el cónclave cardenalicio para elegir sucesor y una vez más se ponen de manifiesto las diferencias profundas existentes entre franceses e italianos. Llega a ser elegido el candidato de los italianos, pero antes de que la elección sea validada, el palacio donde se desarrolla la elección es invadido por una banda capitaneada por los parientes de Clemente V quienes al grito de «¡Mueran los italianos!» incendian la sala de reuniones obligando a huir a los allí congregados.

El nuevo Papa toma partido por FEDERICO III el Hermoso de Austria como nuevo emperador del SIRG.


Tan pronto como es elegido el Papa JUAN XXII, se le pide que se pronuncie sobre el nombramiento del nuevo emperador del SIR ya que han sido elegidos dos: LUIS, duque de Baviera, y FEDERICO, duque de Austria. El nuevo Papa toma partido por FEDERICO III el Hermoso de Austria. Por otra parte, el dominico inquisidor Bernardo Gui es elevado al episcopado; su ascenso será otorgado por el Papa JUAN XXII en recompensa por sus servicios.

Más de dos años después de la muerte del papa Clemente V es elegido nuevo papa JUAN XXII.


Más de dos años después de la muerte del papa Clemente V es elegido nuevo papa Jaime de Eusse, hombre de grandes conocimientos sobre derecho. Elige el nombre de JUAN XXII y ocupa el trono de S.Pedro desde el 5/9/1316 a 4/12/1334. Es originario de Francia y fijará su residencia en Aviñón. Apoya a los angevinos de Nápoles. Se enfrentará a LUIS de Baviera al intentar la mediación en sus conflictos con FEDERICO de Habsburgo por el trono imperial.

La cuarta gran Orden militar española, la de Santa María de Montesa, es instituida en Valencia por JAIME II el Justo.


Tras conseguir, en la fecha, una bula de JUAN XXII, se instituye en Valencia, por JAIME II de Catalunya y Aragón, la cuarta gran Orden militar española, la de Santa María de Montesa, para sustituir a la de los Templarios, suprimidos a principios de siglo por el papa Clemente V. Las otras tres grandes grandes órdenes militares españolas son: la de Calatrava, la de Santiago y la de Alcántara. El rey JAIME II se había negado obstinadamente a traspasar los bienes de los Templarios a la Iglesia. Finalmente consigue que el Papa acepte su proyecto de crear con una parte de dichos bienes, la Orden militar de Santa María de Montesa encargada de la defensa de las fronteras meridionales de la Corona. En 1587 será incorporada a la Corona

JUAN XXII publica una bula en la que condena la postura de los franciscanos espirituales, también conocidos como fraticelli.


En el seno de la orden franciscana se había producido en 1245 una división entre los llamados «conventuales» y los «espirituales», radicales que defendían un ideal de pobreza absoluta alegando que tanto Jesús como sus discípulos carecían de posesiones ni individuales ni comunales. En 1318, JUAN XXII publica una bula en la que condena la postura de los espirituales, también conocidos como fraticelli, calificándola como herética y citando al general de la Orden, Miguel de Cesena, a comparecer en la sede de Aviñon. Éste, que no pertenece a la facción radical, se niega a aceptar los argumentos papales y decide buscar la protección del rey Luis IV de Baviera por lo que, tras ser expulsado de la orden, es excomulgado.

La mística belga Juliana de Lieja presiona al papado para que canalice la piedad hacia la Eucaristía.


A la estela del cuarto concilio Laterano de 1215, que proclama la presencia real de Jesucristo en la Eucaristía explicada a través de la transubstanciación, la mística belga Juliana de Liepresiona al Papa JUAN XXII para que canalice la piedad popular medieval hacia la Eucaristía con procesiones e himnos. Catalunya se apunta pronto a esta fiesta, universalizada en el siglo XIV. Se hacen procesiones primero en Vic (1318), luego en Barcelona y Girona (1320), y casi inmediatamente en Lleida y Tortosa. En 1370, celebrar el Corpus Christi se habrá generalizado en las parroquias catalanas.

El papa JUAN XXII manda que en adelante el cargo supremo de la Orden de la Merced recaiga en un sacerdote.


Hasta 1318, todos los maestros generales de la Orden de la Merced han sido caballeros legos como el mismo fundador, pero el 5 de junio de ese año, el papa JUAN XXII manda que en adelante dicho cargo supremo recaiga en un sacerdote. Desde entonces, la Orden mercedaria deja de ser militar; los caballeros legos se pasarán a la naciente Orden de Montesa.