El Presidente de EEUU., George W. BUSH autoriza al Fondo de Asistencia de Emergencia y Migración norteamericano ayudar económicamente a los refugiados en Costa de Marfil y otros países afectados por conflictos. Sin embargo, EEUU. se muestra reacio al envío de una fuerza de las Naciones Unidas a Costa de Marfil, país que vive uno de sus peores conflictos desde el fallido intento de golpe de estado del pasado 19 de septiembre de 2002. El motivo alegado por el gobierno estadounidense es que ya es suficiente la presencia en el país de contingentes de la Comunidad Económica de Estados de Africa Oeste CEDEAO. La principal misión de estas tropas es la de mantener la vigencia del alto el fuego acordado entre gobierno y rebeldes que, a pesar de ello, ha sido violado en repetidas ocasiones, tal y como está siendo el caso de los últimos días. La ayuda económica estadounidense no irá a parar sólo a Costa de Marfil, sino a un total de cuatro países subsajharianos. Según los servicios de información norteamericanos, George W. Bush ha determinado que “es importante para el interés nacional ofrecer 11 millones de dólares para la inesperada urgencia a las necesidades de los refugiados desplazados por la crisis en Costa de Marfil y Liberia y de los refugiados en Sierra Leona y Angola”.

El Presidente BUSH, incrementa la presión sobre el líder Irakí SADDAM HUSSEIN. alertando que está harto de los juegos y maniobras de distracción de Saddam y le advierte que apremia el tiempo para que se deshaga de las armas de destrucción masiva. El mandatario norteamericano asegura que no existen aún evidencias que indiquen que Irak ha cumplido con el desarme.

Se publica en The Wall Street Journal una carta a favor de la política belicista de George W. Bush contra Irak, firmada por los dirigentes de España, Gran Bretaña, Italia, Portugal, Hungría, República Checa, Polonia y Dinamarca, que se oponen así a la política contraria a la guerra preconizada días antes por Francia y Alemania, Serán motejados por la agencia Reuters como “la banda de los ocho”.

El ex presidente de Sudáfrica Nelson Mandela fustiga al presidente de EEUU., George W. BUSH, por su posición ante Irak y dice que el mandatario estadounidense no tiene capacidad de previsión, no puede pensar adecuadamente y llevará al mundo a un holocausto. Mandela ha tildado de estado terrorista a los EEUU..

Tiene lugar la Conferencia de las Azores en esas islas del Atlántico entre el presidente estadounidense George W. Bush, el inglés Toni Blair y el español José María Aznar, aliados principales en la guerra contra Irak, para decidir el destino de ésta. España interviene con un papel muy secundario, que es muy contestado por el país.

Encuentro entre George W. Bush, Ariel Sharon y Mahmud Abbas (Abu Mazen) para aplicar la Hoja de Ruta, aprobada el día anterior por la cumbre árabe estadounidense de Sharm el Sheik (Egipto)

El emisario estadounidense para Oriente Próximo, John Wolf, afirma que Washington no tolerará la caída del Gobierno del primer ministro palestino, Mahmud Abbas (alias Abu Mazen). Encargado por el presidente estadounidense, George W. BUSH, de supervisar la aplicación de la Hoja de ruta, un plan de paz internacional para solventar el conflicto palestino-israelí, Wolf se entrevistó este fin de semana con el presidente del Parlamento palestino, Ahmad Qorei. “mensaje de Wolf a Qorei es que los norteamericanos no van a permitir la caída del gobierno de Abbas. Qorei intenta mediar en el pulso que que enfrenta al presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yasir Arafat, y al primer ministro palestino, Mazen, por el control de los servicios palestinos de seguridad. Para salir de la crisis, Mazen intentará obtener la primera semana de septiembre el voto de confianza del Parlamento, donde debe presentar un balance de la acción de su Gobierno desde que asumió el cargo, el pasado mes de abril. Los Gobiernos estadounidense e israelí desean que Arafat se aparte, por considerarlo un obstáculo para la paz, y prefieren tratar con el primer ministro palestino.

La Administración BUSH proyecta que el Consejo de Seguridad de la ONU adopte una resolución que dé pie a una intervención en Sudán, a lo que se opone China, Rusia y Francia. La tentativa de la ineficaz Unión Africana de que el Gobierno de Omar al-Bashir y los jefes rebeldes lleguen a un acuerdo ha fracasado, entre otras razones, por su exigencia de alcanzar una plena autonomía regional y percibir el 15% de los ingresos de la explotación del petróleo, iniciada en 1999 por las compañías extranjeras. El MPLS -el principal grupo rebelde- ha pedido el envío de tropas extranjeras para garantizar la distribución de la ayuda internacional a la población. En los países árabes se repite la misma historia de Irak. Nadie ha levantado la voz para denunciar las atrocidades cometidas contra las tribus de Darfur, como antaño nadie lo hizo cuando los kurdos eran aplastados por Saddam Hussein. Pero todos se han percatado ahora de que la intervención planeada tiene como principal objetivo desintegrar Sudán, pese a que su régimen, bajo las presiones estadounidenses, ha modificado su rumbo político en los úiltimos años, tras la expulsión de Ossama Bin Laden.

Tanto Ariel SHARON como George W.BUSH dejan claro que un futuro acuerdo con los palestinos no implicará una retirada de los asentamientos de Cisjordania. El octubre, el Parlamento aprueba el plan de Desconexión.

El presidente BUSH advierte que no acepta medias tintas de Siria y exige la retirada total. Jacques CHIRAC la secunda.