Fallece, en la fecha, en Madrid, (en su casa del número 11 de la actual calle Cervantes) a la edad de 74 años, FÉLIX LOPE de Vega y Carpio, poeta y dramaturgo, conocido como «El Fenix de los Ingenios». Genial y prolífico autor, considerado comúnmente como el creador de la comedia, aunque en realidad reúne y funde los elementos ya existentes. Autor de más de 1.500 obras, de las que se conservan unas 800. Los restos de Lope descansan en una fosa común de la iglesia de San Sebastián de Madrid.

Uno de los principales empeños de este periodo es la construcción de un nuevo sitio real, el Buen Retiro, iniciativa del valido del rey Felipe IV, el conde-duque de Olivares que integraba un gran palacio de recreo, jardines, fuentes, canales, estanques y huertas, situado al extremo este de la villa y futuro motor de desarrollo de la ciudad. La calle de Alcalá se convirtió en un potente eje de desarrollo urbano vinculado a esta zona. Una cerca con fines fiscales rodeaba la villa con una superficie de 732 Has. constriñendo su expansión., situación que se prolongaría hasta 1868 en que fue demolida por completo. En el Buen Retiro tanto los artistas plásticos como los dramaturgos produjeron unas obras esenciales para que se desarrollara el Siglo de Oro, del que Madrid fue el centro indiscutible.

Los alojeros (servían en su establecimientos o alojerías, vasos de refrescante aloja acompañados de barquillos) alcanzan el privilegio de formar gremio por treinta años y ser los únicos fabricantes legítimos, no solo de la aloja -que ya lo eran- sino de los obligados dulces con que se acompañaba, es decir, los famosos barquillos, tabletas y obleas. Todo ello  para conseguir acabar con la venta callejera de estos productos que constituía una competencia desleal.

En 1600 la población de Madrid era de unos 45.000 habitantes con una pérdida substancial sobre el siglo anterior derivada del traslado temporal de la Corte a Valladolid, con Felipe III. Retornados a la situación anterior pocos años después la población crece exponencialmente hasta llegar en 1659 a los 142.000, aunque los ritmos de crecimiento serán muy irregulares con una tendencia a la estabilización.

Fallece Diego de Velázquez. Nacido en Sevilla , donde vivió hasta que el Conde duque de Olivares le pidió que se trasladará a Madrid para incorporarse como pintor de cámara a la corte del rey Felipe IV. Las Meninas será la obra culminante de su carrera como retratista siendo considerado uno de los cuadros más emblemáticos de la historia del arte. Otros cuadros de Velázquez: El aguador de Sevilla, Vieja friendo huevos, La adoración de los magos, Rendición de Breda,  Dama del abanico, Los borrachos, etc.

Primera publicación de la Gaceta de Madrid.

El 17 de septiembre de 1665, Carlos II el Hechizado, nacido en 1661, sucede a su padre Felipe IV (1665-1700). Ya que sólo tiene cuatro años aún no cumplidos, Mariana de Austria, su madre, se convierte en regente del reino (1665-1675) con la oposición del hijo bastardo del rey, don Juan José de Austria, principal enemigo político de la reina. Mariana de Austria, mujer sin aptitudes para el gobierno y más atenta a las cosas de religión que a la política, acaba entregando la conducción del reino a su confesor, el jesuita alemán padre Nithard. Éste, bien intencionado pero nada político, seguirá una política exterior errática, a la vez que concitará la antipatía de nobles y pueblo por sus fallos en el gobierno interior.

Tras 44 años de reinado fallece el rey de España FELIPE IV. Deja una España maltrecha y una monarquia desacreditada. Instantes antes de entregar su alma a Dios pide que se acerque su heredero de cuatro años y, haciendo en su frente la señal de la cruz, musita en su oído: «¡Quiera Dios, hijo mío, que seas más feliz que yo!». EL reinado de FELIPE IV ha estado lleno de guerras y levantamientos, originando la pérdida de la hegemonía española en Europa, la independencia de Holanda y Portugal y la ruptura del equilibrio entre las tierras hispanas. Declinan la industria y el comercio, y las continuas guerras empobrecen el campo. Sin embargo, las artes y las letras alcanzan el mayor esplendor. Su vida disipada le ha llevado a un estado de suma postración. Su carácter contradictorio, que ha alternado los accesos lujuriosos con los arrepentimientos fulminantes y sobre todo su fuerte abulia, se conjugan para conseguir una despedida melodramática. Un testimonio ocular dice: «[…] su arrepentimiento hizo derramar lágrimas a cuantos se encontraban presentes, incluso a la reina». Frase certera, pues ésta había sido la primera víctima de su vida disipada.

Se celebra en Madrid un impresionante Auto de fe, con esplendor y solemnidad no igualados desde el reinado de FELIPE II.