JAIME I trata de encender los ánimos a la gente y preparar un ejército en primavera, que le permita dirigir la primera campaña, cuyo destino es Burriana. Así, en la fecha, preside una reunión de Cortes en Monzón donde se arbitran medidas para la conquista de Valencia. Aunque la iniciativa es aragonesa, los catalanes son imprescindibles en una lucha que tendrá indudablemente su vertiente marítima. JAIME I autoriza a los nobles aragoneses que entretanto prosigan por su cuenta la reconquista valenciana.
CORONA DE ARAGÓN (1162-1716)
Total de piezas: 636
La Corona de Aragón englobaba al conjunto de territorios que estuvieron sometidos a la jurisdicción del rey de Aragón, de 1162 a 1716
Burriana es un punto de vital importancia agrícola y comercial.
La elección de Burriana como primera población a conquistar, si lo analizamos desde una perspectiva meramente geográfica, tiene mucho sentido, puesto que está situada en el norte del reino moro de Valencia, la primera zona a conquistar en buena lógica; no es una fortaleza inexpugnable, como pueden serlo los castillos de Peñíscola, Onda o Almenara, por poner sólo unos ejemplos, y, por otra parte, es un punto de vital importancia agrícola y comercial, de la que dependen las zonas situadas más al norte del mismo.
JAIME I de Aragón promulga varias constituciones que tienen que ver con la persecución a los herejes.
JAIME I de Aragón promulga en Zaragoza, varias constituciones que tienen que ver con la persecución a los herejes. JAIME I actúa con asistencia y consejo de seis Obispos, de los Maestros del Templo y del Hospital, de muchos abades y otros prelados. Uno de estos decretos, dice: «En los lugares sospechosos de herejía, un sacerdote o clérigo nombrado por el Obispo, y dos o tres laicos elegidos por el Rey o por sus vegueres y bailes, harán inquisición de los herejes, con privilegio para entrar en toda casa y escudriñarlo todo, por secreto que fuese. Estos inquisidores deberán poner inmediatamente sus averiguaciones en noticia del Arzobispo u Obispo y del vicario o baile del lugar, entregándole los presos».
El ejército real con menos gente de la prevista inicialmente se desplaza desde Teruel a Burriana
El ejército real con menos gente de la prevista inicialmente se desplaza desde Teruel a Viver y Jérica, cuyos campos son talados. Después hasta Segorbe y Torres Torres, y desde allí virando hacia el norte ponen cerco a Burriana. Sa’ad Abu Said, dueño de Segorbe, facilita al rey cristiano el libre acceso al reino de Valencia, a través del camino que une Valencia con Teruel por Segorbe y que JAIME I habrá de utilizar en multitud de ocasiones a lo largo de su vida, para llevar a cabo los desplazamientos de sus tropas primero y luego sus propios viajes normales. Es a partir de entonces cuando esta vía de unión entre Aragón y Valencia adquiere importancia, en detrimento de la otra que se usaba con más regularidad en tiempo de sarracenos, y que iba desde Valencia a Sagunto, Onda, Morella y desde allí a Zaragoza.
En el camino de JAIME I hacia Valencia, Burriana ofrece una resistencia obstinada.
En el camino de JAIME I hacia Valencia, Burriana ofrece una resistencia obstinada y muchos caballeros aragoneses prefieren dejar el protagonismo en las manos de JAIME I. Muchos de estos nobles luchan para conseguir un botín personal y no están dispuestos a asumir un riesgo muy elevado. Por el contrario, las tropas reales (más numerosas y disciplinadas) protagonizan una actuación más constante y sistemática. El monarca ofrece notables muestras de valor encabezando personalmente los asaltos de sus soldados contra las murallas de Burriana. Por otra parte, no se realizan contraataques de los musulmanes de la ciudad de Valencia y demás castillos próximos, cuya delicada situación política los mantiene muy ocupados en luchas internas continuas. Por fin, a mediados de julio, capitula Burriana. El primer paso ha sido dado. De inmediato le llegan noticias de que los moros de Peñíscola quieren rendirse a él y en dos o tres días se presenta JAIME I ante su fortaleza, donde recibe juramento de fidelidad de la población.
Ya las tierras de la mitad norte de la provincia de Castellón han pasado al bando cristiano.
La Orden del Hospital toma en los meses siguientes posesión del castillo de Cervera, y los templarios del de Xivert, con lo cual hallamos que, a finales de 1233, las tierras de la mitad norte de la provincia de Castellón han pasado al bando cristiano y se cumple el pronóstico de que cayendo Burriana arrastraría consigo una importante área geográfica. JAIME I ni se plantea el ataque a los castillos de Onda, Nules, Uxó y Almenara, todos en la Plana, y que le son hostiles, porque su asedio sería una pérdida inútil de tiempo y esfuerzo y los resultados de su conquista no merecen en este momento la pena, en relación con el plan global previsto. Podemos decir, por tanto, que en el mismo año 1233 don Blasco de Alagón en Morella y JAIME I en Burriana, al otorgar cartas pueblas a ambos lugares, y comenzar a repoblarlos con cristianos, están dando origen al reino cristiano de Valencia.
Las tropas cristianas ocupan a lo largo de 1234 toda la zona montañosa situada entre Teruel y Valencia.
Las tropas cristianas ocupan a lo largo de 1234 Almassora, Castelló, Borriol, Coves de Vinromà, Vilafamès y el territorio del castillo de Alcalatén, es decir, toda la zona montañosa situada entre Teruel y Valencia, lugares que se empiezan a repoblar con cristianos. JAIME I no propicia la despoblación de las tierras de sus primitivos habitantes moros sino que procura mantener a la gente en sus casas, porque no tiene capacidad para atraer un número de repobladores cristianos capaz de sustituir a los habitantes moros, con lo cual, en caso de quedar vacías las tierras, la economía se iría a pique, y, por supuesto, la posibilidad de recaudar impuestos desaparecería. La iglesia no fomenta tampoco la marcha de la población musulmana, porque igualmente recibe diezmos de ellos.
Se firman los acuerdos por los que JAIME I cede el Reino de Navarra a TEOBALDO I de Champaña.
Habiendo fallecido el rey Sancho VII el Fuerte sin sucesión legítima, el reino de Navarra es heredado por TEOBALDO I el Trovador (1234-1253) conde de Champaña, hijo de su hermana BLANCA casada con Teobaldo III asimismo conde de Champaña. JAIME I -en cumplimiento de su acuerdo con el fallecido Sancho VII en 1231- ocupa diversos territorios navarros, pero pronto se ve obligado a renunciar a sus pretensiones ya que los nobles navarros le retiran su juramento de fidelidad. JAIME I debe ceder el Reino de Navarra a TEOBALDO I de Champaña, conformándose con recobrar cuatro castillos embargados por Sancho VII. En la fecha, se firman los acuerdos correspondientes.
GREGORIO IX aprueba la Orden de Nuestra Señora de la Merced como una orden de caballería.
PEDRO NOLASCO, con el favor del rey JAIME I y con el consejo de RAIMUNDO de PEÑAFORT, pone los fundamentos de la Orden de Nuestra Señora de la Merced o de la Misericordia como una Orden de caballería y en el año de la fecha, recibe la aprobación del papa GREGORIO IX. A partir de este año, se incrementa en Barcelona la veneración a la Virgen mercedaria, a Nuestra Señora de la Merced.
JAIME I no hará sino consolidar su posición y la de sus gentes en el área ya conquistada de Valencia.
En este año, JAIME I no hará sino consolidar su posición y la de sus gentes en el área ya conquistada de Valencia, llevando a cabo algunas incursiones militares para recoger información. Es de destacar la lentitud con que se lleva a cabo el proceso conquistador, motivado por la limitada capacidad de convocatoria y la menor posibilidad aún de convencer a los nobles de que le acompañen en la campaña militar permanentemente y no sólo cortas temporadas, como tienen obligación según sus respectivos fueros. Y así, mientras sus soldados están atareados en el escenario valenciano, reaparece la tradicional cuestión occitana. JAIME I aspira a recuperar Carcassona, un condado que pertenece a su patrimonio, pero que es ocupado por el rey de Francia. Una vez más, el papado ha intervenido a favor de Francia, y JAIME I ha renunciado a sus derechos.

