Por otra parte, se acuerda entre ALFONSO VII y RAMON BERENGUER IV que la frontera entre Castilla y Aragón quede situada a la línea Tarazona-Calatayud, donde se encuentra todavía en la actualidad. De esta manera, RAMON BERENGUER IV se encuentra libre de preocupaciones por el lado Oeste. Seguidamente, se ocupa de la seguridad y fijación de los límites meridionales del «regnum Caesaraugustanum»

Finalmente, en la misma reunión de Carrión, ALFONSO VII y RAMÓN BERENGUER IV se ponen de acuerdo para repartirse el país montañoso de Pamplona, o sea restablecer la situación que existía entre 1076 y 1131.

Una de las primeras cosas que hizo RAMON BERENGUER IV fue demostrar que estaba dispuesto a mantener buenas relaciones con ALFONSO VII. Así, el conde de Barcelona, se reúne en Carrión con ALFONSO VII de Castilla prestándole homenaje. Con evidente satisfacción, la crónica de ALFONSO hace constar que el conde le promete obedecerle en todas las cosas. En efecto, es un momento magnífico para el emperador porque con RAMON BERENGUER IV pasa a ser vasallo suyo el último soberano cristiano de la península que todavía no lo era. Por esto, al final del parágrafo correspondiente, la crónica dice que las fronteras del reino dominado por ALFONSO VII se extienden desde Santiago de Compostela hasta el Roine.

En la fecha, las tropas castellanas penetran en tierras navarras y se apoderan de Pamplona. Para solucionar su apurada situación, GARCÍA RAMÍREZ ofrece a ALFONSO VII la boda de su hija BLANCA de Pamplona con el primogénito del emperador, SANCHO de Castilla.

Poco a poco, ALFONSO I Enríquez, al mismo tiempo que va ganando prestigio, va afirmando la autonomía de Portugal. Pero aunque ALFONSO I Enríquez, ostenta el título de rey de Portugal, sigue siendo vasallo de ALFONSO VII. Para sacudirse este yugo se hace vasallo de la Santa Sede, comprometiéndose a pagar un censo anual a cambio de la protección del papa.

Aprovechando la presencia del cardenal GUIDO de Vico, legado del papa en el concilio de Valladolid (1143) el rey de Portugal y el rey de Castilla y León se reúnen en Zamora. ALFONSO VII, en esta entrevista, confirma el título de rey a ALFONSO I Enríquez (1143-1185) y reconoce la existencia de un nuevo Estado, desgajado del dominio leonés. Con ALFONSO I Enríquez se implanta en Portugal una dinastía real, la casa de Borgoña, que durará doscientos años. En adelante, el nuevo soberano no figurará, como el rey de Pamplona o el conde de Barcelona, entre los vasallos del emperador ALFONSO VII. Desde entonces, cada reino actuará en su propio campo de acción dentro de la reconquista. La independencia de Portugal se ha consumado.

Matrimonio entre GARCÍA RAMÍREZ de Pamplona con Urraca Alfonso la Asturiana, hija bastarda de ALFONSO VII y de la bella Gontroda Pérez.

ALFONSO VII, el emperador, fuerza, en la fecha, el establecimiento de un tratado de paz entre RAMON BERENGUER IV y GARCÍA RAMÍREZ de Pamplona. Frente a la amenaza almohade, el emperador desea que todos los reinos cristianos puedan participar en la lucha que se avecina.

Los éxitos cristianos, la desunión musulmana y el peligro de desembarco de los almohades impulsan a éstos a ofrecer a ALFONSO VII la ciudad de Granada. Los Ándalusíes están dispuestos a todo antes que a soportar una nueva dominación africana. En la fecha, las tropas de ALFONSO VII entran en Córdoba, pero pronto la abandonan ante la imposibilidad de defender la plaza. ALFONSO VII la devuelve a los almorávides.

ALFONSO VII ha tomado Coria en 1142; en 1143 han sido derrotados los caídes de Sevilla y de Córdoba en las proximidades de Motiel. En la fecha, Zafadola es derrotado en Chinchilla y muere en el campo de batalla.