Durante la expedición en ayuda de Almería, fallece ALFONSO VII, en 1157, de puro agotamiento, debajo de una encina del paso de la Fresneda, en lo más espeso de sierra Morena, viendo que el puerto de Almería y todas su otras conquistas se vienen abajo ante el empuje de la ola almohade que desde 1147 ha invadido la península. La ciudad de Almería se pierde y vuelve a ser musulmana.

Inmediatamente, después de la muerte de ALFONSO VII se producen, en la fecha, desacuerdos entre RAMON BERENGUER IV y su sobrino SANCHO III el Deseado de Castilla, a propósito de Zaragoza.

La idea del imperio había muerto con ALFONSO VII pese a que SANCHO III el Deseado de Castilla recibe en Soria, como rey de Castilla, el homenaje de SANCHO VI de Navarra y el de RAMON BERENGUER IV, en este último caso sólo por el «Regnum Caesaraugustanum».

En la fecha, aparece por primera vez la denominación «Prat de Llanera», en el número 795 del «Cartulari» de Sant Cugat. En este documento se citan los primeros nombres pratenses: Ramon Sunyol y Pere Sunyol.

RAMON BERENGUER IV, se reúne en Nájera con SANCHO III el Deseado, rey de Castilla, y ambos ratifican el acuerdo de Tudején, aunque excluyendo las referencias a Navarra. También se decide que el reino de Zaragoza pasará a ser del hijo mayor de RAMON BERENGUER IV, y, en el caso de su muerte, aquel de sus hermanos a quien pertenezca la corona de Aragón; es condición previa que el heredero -que todavía no ha nacido- se haga antes vasallo de SANCHO y, en su coronación, lo preceda con su espada.

El Papa ADRIANO IV, regula con tres breves apostólicos las relaciones legales de la Corona de Aragón con Roma. En la fecha, escribe a los arzobispos de Tarragona y Narbona diciéndoles que ha tomado bajo la protección de S.Pedro al conde y a todo su país y da su aprobación a los convenios de RAMON BERENGUER IV con las tres Órdenes de caballería, en relación al testamento de Alfonso I el Batallador. ADRIANO IV renueva además el privilegio concedido en 1095, según el cual el conde nada más puede sufrir excomunión o entredicho con el consentimiento del papa.

No poseyendo ninguna otra fuerza armada que aquella que provenía de los propios andorranos, los obispos de Urgel se ven obligados a pedir ayuda y protección a los señoríos más próximos a fin de defenderse de los diversos ataques de los cuales eran objeto, en particular de los condes de Urgell. Efectivamente, estos últimos tratan en reiteradas ocasiones, de recuperar de la Iglesia lo que sus antecesores les habían cedido. En la fecha, se firma un tratado entre la Casa de Caboet (una de las familias más poderosas de la zona), representada por Arnau de Caboet y Bernat Sanç, obispo de Urgell. Este tratado, reconoce la soberanía del obispo de Urgell sobre Andorra y la donación como feudo del territorio a la casa de Caboet, vizcondes de Castellbo. Es decir que queda claramente estipulado que la Casa de Caboet no posee más derechos sobre Andorra que los políticos, militares y judiciales, quedando excluidos los derechos de soberanía.

El año 1159 Ramon Berenguer IV cede a los habitantes de «Pratis» el lugar para construir las casas y las tierras para los cultivos, la libre utilización y posesión de los prados y bosques de toda la montaña de Siurana y los derechos por encima de la Iglesia y la herrería, reservándose el Conde el horno, el molino, los diezmos y las primacías. Este régimen de franquicias es típico de un sistema de dominicatura real, con un poder señorial y feudal poco acusado que facilita la extensión de la propiedad libre.

En 1159, RAMON BERENGUER IV forma parte de una alianza con el propio ENRIQUE de Inglaterra, Guillermo de Montpellier y RAMON de Trancavell de Carcasona-Rases dirigida contra Toulouse, a la que ponen sitio infructuosamente.

El monasterio cisterciense de Santes Creus en Tarragona se funda el 1160. Este monasterio se funda gracias a la cesión de una granja por tres nobles. El monasterio primero se llama de Santa María de Valldaura, por voluntad de los monjes cistercienses que proceden del monasterio de Valldaura. El lugar inicial no es muy apropiado por lo que se producen dos traslados hasta que se encuentra un campo adecuado cerca del río Gaià. Ripoll simboliza la voluntad repobladora de los primeros condes. Poblet y Santes Creus son expresión de la época de los condes-reyes.