Pero los dos bandos que se enfrentan son socialmente heterogéneos ya que las razones son varias: Ansias de poder de la nobleza frente a la monarquía, situación económica, conflicto de los remensas, muerte del príncipe CARLOS de Viana. En los dos hay nobles, remensas, buscaires. Podríamos resumir aceptando que en realidad, quienes se enfrentan son, por un lado, los realistas, partidarios del rey JUAN II. Por el otro lado, los partidarios del “pactismo” encabezados por la Diputació y el Consejo del Principado, que aun disponiendo de un fuerte soporte popular a causa de la adhesión sentimental al recuerdo de CARLOS de Viana se han erigido en defensores a ultranza de los intereses de las oligarquías representadas en las instituciones (Cortes, Generalitat, Consell de Cent…) Esta guerra permitirá que aflore todo aquello que se ha estado incubando desde hace mucho tiempo; probablemente, desde el esplendor del siglo XIII o, como mínimo, desde la crisis de la segunda mitad del siglo XIV.

GASTÓN de Foix, casado con LEONOR de Navarra, hija de JUAN II de Navarra y Aragón, ve ahora más factible su acceso al trono de Navarra, por ello casa a su hijo con Magdalena de Francia y propicia la ayuda de LUIS XI, rey de Francia, a su suegro, JUAN II. Firman, en la fecha, el “Tratado de Bayona”. En él, LUIS XI se compromete a enviar tropas contra los catalanes. En compensación recibirá el Roselló y la Cerdanya y los castillos de Perpinyà y Cotlliure. Este acuerdo, que podría ser considerado delito de alta traición, confirma a los componentes del Consejo del Principado y dirigentes de la Generalitat de que no hay marcha atrás.

En la fecha, la Diputació de Catalunya, con el voto unánime de todos los estamentos, declara a JUAN II de Catalunya y Aragón, enemigo del Principado, desposeyendo de la corona a JUAN II y a su esposa.

En Catalunya, las tropas reales -rompiendo la Concordia de Vilafranca- entran en Girona, al mismo tiempo que lo hacen las francesas, enviadas por LUIS XI, conquistando la ciudad. El príncipe FERNANDO apoyado por las tropas francesas, se junta con su padre JUAN II en Montcada, pasando seguidamente a Zaragoza. El Principado se halla en plena revuelta. Muchos “buscaires” son ejecutados.

La Diputació de Catalunya desposee, en la fecha, a FERNANDO de los derechos de su primogenitura. Al frente del Principado irán desfilando, a lo largo de los próximos años, diversos reyes paralelos a JUAN II: Enrique IV de Castilla, Pedro de Portugal, Renato I de Anjou

Después de la victoria de las tropas de JUAN II, se firma la Paz de Pedralbes, por la cual el Consejo del Principado capitula ante el rey. Este acta pone fin a diez años de guerra civil catalana entre los ejércitos reales y los de la Generalitat. Gracias a la diplomacia de Fernando de Aragón, la Corona de Aragón recupera el Rosellón y la Cerdaña, perdidos por Juan II en la lucha contra los angevinos.

En la fecha, la Diputació de Catalunya realiza las capitulaciones de guerra -la Pau de Pedralbes-, terminando así la rebelión de Catalunya, pero también la vigencia de la Concordia de Vilafranca (1461). Aunque no todo el Principado se ha rendido a las fuerzas reales, la capitulación da un mes de tiempo a todos sus habitantes para adherirse y quince días a todos los castillos y fuerzas que todavía se mantienen fieles a RENATO d’Anjou. La capitulación devuelve al país la condición jurídica vigente a la muerte de CARLOS de Viana (1461). Esta guerra ha destrozado terriblemente a Catalunya, y el eje de la Corona de Aragón pasa definitivamente a la línea Zaragoza-Valencia. La paz, de hecho, pone fin al conflicto bélico en Catalunya, pero a pesar de que el rey JUAN II ha ganado la guerra, deja sin resolver la cuestión de los remensas, la reforma política de las instituciones del Principado y la recuperación de la crisis económica. Nadie sale ganando nada. Por ello, a lo largo de los próximos años, existirá una política de recelo entre el rey y los payeses.

Otro problema fundamental en el final del siglo XV es la situación del colapso económico en que se encuentra el Principado. La crisis tiene raíces muy lejanas, se ha agravado de forma extraordinaria durante la guerra civil y costará mucho de superar. La parálisis productiva es extraordinaria y la proyección comercial mediterránea es meramente residual. Por esta razón, las Cortes de este año también se ocupan de la problemática económica y aprueban una serie de medidas, conocidas como el “Redreç de la mercaderia”. Así, por ejemplo, se privilegia el transporte de productos con barcos catalanes y se prohibe la importación de tejidos extranjeros a los territorios de la Corona de Aragón, todo ello inspirado en una politica proteccionista, que ha estado largamente reclamada por algunos sectores del país, como la Busca. De todas maneras, a largo plazo, la recuperación de la capacidad económica del país se fundamentará en la recuperación de la productividad y no en los aranceles.

Desterrados italianos de los grandes principados de Roma, Venecia, Nápoles, Milán y Florencia han encontrado acomodo en la corte francesa y animan a CARLOS VIII a intervenir en las luchas intestinas italianas, reivindicando sus derechos a Nápoles, adquiridos de su abuela Maria de Anjou contra las pretensiones del rey FERNANDO de Aragón. CARLOS VIII apoyado por Ludovico SFORZA, llamado el Moro” por su color moreno, que gobierna Milán, se corona rey de Nápoles y con treinta mil hombres entra en Italia en agosto de 1494.

Las complicaciones que surgen a la hora de aplicar el Tratado de Granada del año 1500, para repartirse entre LUIS XII y FERNANDO el Católico el reino de Nápoles (disputa por la ocupación de las provincias centrales, Basilicata, Capitanata y Principado) desembocan en una reanudación de las hostilidades militares entre españoles y franceses.